Capítulo XVII

2.1K 156 9
                                    

Capítulo XVII | Lizzie.

Sabía que algo andaba raro desde que salimos del restaurante de mi madre, su mirada perdida me decía que algo no andaba bien en Kendall, se notaba preocupado y yo me di cuenta de eso. Empezó cuando llegamos a Ghost Lots, ¿entrar por la parte de atrás y dar órdenes a un guardia? Después de hablar con Carter volvió a estar tenso, y antes de que pudiera hacer algo, Kendall ya había desaparecido por arte de magia del lugar.

Alice me hizo olvidar por un rato lo que estaba pasando con él; a ella también la había notado rara, no ha querido contarme qué ha sucedido o porque Brayden no estaba con ella, no he querido ser entrometida en su vida, pero que ninguno de los dos confiara en mí me estaba cansando, a Kendall lo entiendo, él y yo no somos nada, solo compañeros de trabajo, ¿Pero Alice? Ella era mi mejor amiga desde el preescolar. ¿Acaso no confiaba en mí?

No voy a negar que me sobresalté cuando Kendall me sujetó por la parte de atrás mientras bailaba con Alice, había estado a la defensiva desde que descubrí a Ethan vagando por el lugar. Recordé lo que Kendall me confesó aquel día de la fiesta de halloween y ver que él me observaba me entró un poco de pánico.

Voy a confesar que no esperaba que el lugar fuera de él, por eso me sorprendí cuando me confesó que Ghost Lots era suyo. Había estado dudando en contarle que Ethan estaba aquí y me estaba observando, pero debido a la situación y que al fin estaba siendo sincero conmigo, creí que era mejor que ambos empezáramos a confiar el uno con el otro. Así que se lo dije, fue mala idea en primer lugar. No entendía qué era lo que él ya sabía, si Ethan ya estaba aquí o que me estaba observando. Sea la respuesta que sea, él se estaba alterando y por lo que sé, padece de asma. Por eso traté de calmarlo, dejándole en claro que estaba segura aquí, con él. Comencé a distraerlo con el juego que teníamos previsto hace una semanas; debo admitir que sentir su piel desnuda con mis manos, me hace querer desearlo, pero no dejaré que se diera cuenta que tanto puede afectar.

—¿Entonces, te hago sentir placer?—le pregunté después de soltarme aquella verdad. Se supone que el juego era de los dos, nunca pensé que Kendall podría estar disfrutando y ni siquiera lo oculta. Lo que más me molesta es que tiene razón. Yo soy la aferrada en decirle que ningún desconocido puede hacer sentir placer a otra persona si no quiere, el problema es que ambos queremos pero no lo admitimos. Y creo que de eso se trata el juego de Kendall.

Quiere que yo lo admita.

—Es un secreto. —responde escondiendo una de sus risas burlonas.

—¿Estás jugando conmigo?—le pregunto cabreada. En verdad no entendía su sarcasmo del humor.

—Yo no lo diría así, tú comenzaste. —se defiende ante mi acusación. En parte tiene razón, yo comencé.

—Ahora Elizabeth...—comienza, mirando mi posición aún con mis manos en su torso. —¿Vas a seguir negando que te hago desear con tan solo hablar o seguiremos jugando hasta que te haga admitir?

—¿Estás admitiendo que te hago desear?

—Nunca negué nada.

—¿Por qué siempre quieres ser el que controla todo?

—Te recuerdo que en estos momentos tenías el control, podrías hacerme lo que quisieras.

Su voz tan suave me hace estremecer, cada palabra la hace sentir como si fueran sus manos quien me estuvieran rozando cada parte de mi cuerpo. Quiere tentarme y está lográndolo.

—Me dijiste que darías respuestas. —recordé, cambiando de tema mientras me alejaba de él.

Me senté en la cama que se encontraba en el lugar. Cuando lo observé hace un rato, casi por un instante creí haberme trasladado al cuarto rojo de Christian Gray. Había de todo un poco en esta habitación, que si fueran otras las circunstancias, habríamos hecho muchas cosas en este lugar.

—Comienza, ¿Qué quieres saber?—Veo como termina de quitarse su camiseta ya desabrochada, quedando su parte del torso desnudo.

—¿Qué quiere Ethan?—inicie con mi primera pregunta.

Guarda silencio un largo minuto, no se si estaba creando una historia para decir quien era Ethan o se está debatiendo en encontrar las palabras adecuadas para contarme.

—No quiero meterte en esto... —hace una pausa— Pero, se que de alguna forma u otra, intentaras meterte porque así eres tú.

Pude ver por la poca luz que entraba en la habitación que había soltado una pequeña risa.

—Vamos Kendall, déjate de rodeos —presioné con insistencia. Que Kendall quisiera contarme algo es un gran avance, pero que lo haga dudar me decepciona un poco.

Antes de que pudiese continuar, el sonido de su celular hace interrumpir sus palabras.

—De acuerdo, sí, ya voy. —musitó entre dientes. Después de colgar, se agachó al suelo para recoger la camiseta que anteriormente había quitado.

—¿Sucede algo? —me atreví a preguntar después de verlo alterado.

—Tengo que arreglar algo allá abajo, Brayden armó una escena. Y con uno de tus hermanos.

¿Qué? Mierda.

Al bajar a la primera planta, había un alboroto, la música cesó un poco y solo se escuchaba una bulla en el centro del lugar. ¿Que no hay guardias en este lugar?

Como pudimos, Kendall se abrió paso entre la multitud y cuando pudimos, nos dejó apreciar la escena.

No podía creer lo que mis ojos estaban viendo, uno de los gemelos intentaba separar al otro y Carter intentaba separar a su hermano. Kendall se acercó intentando intervenir a los chicos y que esto se vuelva aún más grande. Lo cual milagrosamente funcionó y Brayden se apartó de mi hermano. Yo me acerqué preocupada a ellos dos.

—¿Qué pasa con ustedes? —reprendí. —¿¡Acaso querían ir a la cárcel!?

Aunque estaba segura que Kendall no lo haría, sabía que no podía tener escándalos y llamar a la policía no sería una opción para él.

—¡Solo fue un jodido beso! Si hubiera sabido que tenía novio ni me le acerco.

Responde una de los gemelos, creo que es Chad. Hace una mueca de dolor y se masajea la cien.

—¿Y tú dónde estabas?—Me cuestiona Math. Mirándome fijamente.

—No es momento de preguntas Math, debemos llevar a tu hermano a un hospital. ¿Por qué besaste a mi mejor amiga? —Esta última pregunta se dirigió a mi hermano herido.

Salimos de Ghost Lots por la puerta principal y llevamos a Chad al hospital, no sin antes llevarnos unas cuantas miradas de alguien y un «lo siento» de mi parte a una chica que chocamos.

Daianna date precisa. Escuché decir a un chico.

Daianna, repetí en mi mente ¿Dónde escuché ese nombre? 

💜

¡Holiiiiis! Les tengo un cap, yo se, Que este capítulo de Elizabeth no es tan largo como se esperaban, pero el siguiente capítulo no será de Kendall. 

 Ya casi estamos a la meta y aún quedan muchas cosas que investigar. ¿Que creen que hacÍa Daianna ahí? 

Nos vemos en el siguiente capítulo. No se olviden de comentar y votar este cap, me harían feliz. ¡besooooos y baiiiii!💕🌟

Seduciéndote ©Where stories live. Discover now