Los Spector

Suficiente

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SKYLER'S POV

           —El noveno round siempre es el peor, Lucky. —murmura Mackey cuando vemos como en cámara lenta Mark cae de espaldas y si no fuera por el referí, Dash ya se le hubiera ido encima.

            Volteo a verlo con la mandibula apretada. Él y JoJoe han estado intentando tranquilizarme pero mi paciencia ha llegado a su límite, esto tiene que acabar ahora mismo o yo misma me subiré a ese ring.

            —El caso aquí Mackey es que todos los rounds han sido los peores, no podemos dejarlo que siga.

—Duros golpes por parte de Dash White, en el cuerpo y la cabeza mientras continúa poniendo distancia entre él y Mark Eastwood en el marcador. —anuncia uno de los presentadores. En el ring el réferi se acerca a separar a ambos que se han pegado como lapas para evitar golpes.

—Este muchacho White es muy rápido y está casi matando a Mark ocupando solamente su mano izquierda. —dice otro.

—White ya un peleador más rápido ha aparecido para ganar la mayoría de los rounds a estas alturas de la pelea.

—¡Mantén las manos arriba! ¡Protege el ojo! —le grita Mackey con ambas manos alrededor de su boca.

—¡Anda Mark, muévete! —se le une JoJoe.

Yo solamente observo con los ojos entrecerrados,  analizando cada movimiento de Mark mientras trueno los nudillos de una de mis manos. Es casi como si fuera yo la que está allá arriba peleando, inconscientemente mis reflejos hacen lo mismo que hace Mark y aunque JoJoe piense que no me doy cuenta él hace los mismos que yo, como si nosotros y Steel Fist fueran uno mismo.

Esquiva un recto de White.

—Ahí tienes. —murmuro. Y la multitud se llena de vida cuando Mark conecta una derecha y una izquierda en el cuerpo de Dash—. Muy bien, vamos bien, vamos bien. —grito sin quitar los ojos del ring. Miro de reojo a Ryder que se muerde la uña del dedo pulgar y sigue con la vista cada movimiento de las dos masas gigantes arriba del ring.
Dash sigue lanzando golpes pero Mark los esquiva con rapidez. Se está recuperando pero no tanto como para decir que puede ganar, sino más bien solamente para salir un poco menos golpeado. Se arrinconan en las cuerdas y sé perfectamente que Mark debe estar susurrándole mierda a Dash porque el réferi se acerca y los separa.

—Ahí lo tenemos de nuevo con la misma actitud de hace unos años —dice la estresante voz de Jorge Escobar, el vocero principal de las peleas desde que tengo memoria—. Eastwood nunca se detiene. Este es otro round frustrante para él.

White conecta jabs impresionantes al rostro y al cuerpo de Mark y me estresa ver todo eso y como a absolutamente nadie le importa lo que está sucediendo.

—Él está bien —murmura Mackey en mi oído—. No está herido. —me limito a asentir y sigo observando con detenimiento todo lo que pasa allá arriba, pero no mucho ha cambiado, Dash sigue dándole golpes a Mark como si su vida dependiera de eso y Mark no puede hacer nada más que intentar protegerse.

—¡Voltéasela Mark, mierda! —grito desesperada. Xavier y Sam también gritan. Todo el maldito mundo grita y aunque no se les entiende casi nada sé que todos apoyan a Mark ya que Dash se ha ganado a pulso el odio de todo el mundo aquí.