Golpes bajo la mesa.

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- Está bien Scott, tu ganas, los ignoraré - Murmuré por lo bajo rodando los ojos -.

Scott puso su mano sobre mi hombro y se puso serio.

- ¿No vas a hacerlo verdad?

- Me conoces demasiado bien - Mascullé entre dientes - No es justo.

- Stiles, pueden hacerte daño. Ignóralos.

- Sí, papá...

Scott golpeó mi brazo y se echó a reír. Tras unos pasos más, los dos entrabamos en el aula.

La mañana pasó bastante deprisa, aun que el tener a Scott en la mesa de delante, ayudaba, ya que nos pasábamos las clases hablando. Tras guardar mis cosas en la mochila, me la eché al hombro y salí al pasillo delante de Scott. 

- Ve tirando para el comedor, voy a ir al baño - Murmuré mirando a Scott mientras me alejaba por el pasillo -.

- Está bien, te guardo sitio en la mesa, no tardes.

Casi no alcancé a escucharlo debido al ruido de la gente saliendo de las aulas, pero asentí.

Abrí la puerta del baño, y rápidamente me dispuse a cambiar el agua al canario. No podía aguantar más.

Cuando por fin iba a salir, la puerta del baño se abrió. Los gemelos otra vez.

- ¡Pero si es Stiles! - Exclamó Aiden - Deja que adivine. ¿Scott se espera unos minutos antes de salir del baño para que nadie sospeche no? 

Ethan se quedó en la puerta, cruzado de brazos mientras se reía.

Las palabras de Scott volvieron a mi mente. Decidí ignorar el comentario, pero tenía que quedarme allí plantado hasta que decidieran apartarse.

- De haber sabido que te iba eso de montártelo con el Alfa, te hubiera entrado - Murmuró Ethan -.

- Pero que dices Ethan - Murmuró riendo su hermano - ¿Te lo montarías con este? 

- Solo por ver la cara que pone, debe ser épica. 

Aquel comentario ya consiguió cabrearme. Pero seguía tratando de ignorarlos.

- ¿Has oído Stiles? Si lo deseas, Ethan está dispuesto a....

- ¿Habéis terminado? - Interrumpí mirándolos -.

- Pobre Stiles... - Murmuró Aiden - Se ha enfadado...

- Sí, será mejor que nos apartemos y lo dejemos salir -Añadió Ethan con cara de pena- si no puede que nos mate... Ah no... que es Stiles...

- Venga Ethan, se bueno y deja que se marche...

Tras aquellas palabras, se apartó y rápidamente traté de colarme entre los dos. Abrí la puerta y me dispuse a salir. 

Paré de golpe cuando sentí la mano de Ethan, darme un azote en el culo. Me dí la vuelta lentamente, tratando de contener mis palabras, pero me fue imposible.

- Te vas a cagar, imbécil.

Nuevamente caminé alejándome. Aquellos dos no dejaban de reírse, pero aquello no había terminado. 

Pasé de largo al ver la cafetería, y salí por la puerta del instituto. Seguí andando, hasta que llegué el aparcamiento, y me planté frente las motos de aquel par de imbéciles. 

De una patada, las eché al suelo. Disfruté de lo lindo al escuchar el sonido cuando acabaron en el suelo. 

Rápidamente, me dirigí a la cafetería, dónde Scott me esperaba.

- Pues ya estoy aquí...

- Esa sonrisa que traes... ¿Que has hecho? - Preguntó Scott alzando sus cejas -.

Simplemente me dediqué a señalar por la ventana. Scott miró, y me miró al momento.

- ¿¡Estás loco!?

- Completamente - Murmuré mirándolo - Pero he hecho lo que dijiste, los he ignorado.

Le dediqué la mejor de mis sonrisas al terminar la frase, pero no funcionó.

- Stiles, es que... Eres idiota. 

- Sí, pero verás que risa cuando salgan y las vean.

- Al menos no van a saber quien ha sido - Añadió Scott de forma tranquila -.

- Oh... Creo que lo van a saber. O al menos lo van a imaginar. Pero se supone que al ser de tu manada, tengo tu protección ¿No es así?

La cara de Scott no tuvo precio, trataba de mirar seriamente, pero le resultaba imposible.

- Supongo que sí...

- Pues ya sabes que hacer - Murmuré entre risas - Voy a necesitar mucha.

- Te van a matar, y me matarán a mi también. Nos van a matar a todos, por tu culpa.

- Uh... que pena - Susurré antes de echarme a reír -.

Volví a señalar la ventana al ver que los dos se dirigían a las motos. Scott no tardó en ponerse a mirar. 

Aquellos dos estaban rabiando. Levantaron las motos, y se miraron confundidos.

No pude evitar reírme a carcajadas.

- Ponte a comer, y disimula, que seguramente vengan a comer - Murmuró Scott golpeándome - Idiota.

Y así fue. A los pocos minutos los dos entraron. La expresión de sus rostros reflejaba que no estaban de muy buen humor. Pero aún así, tenían que acercarse a decir algo.

- ¿Como está la mejor pareja del instituto? - Preguntó uno de ellos -.

Scott me miró al momento. Sabía que iba a hacerlo. Quería que me contuviera, pero él sabía que era imposible. Se llevó las manos a la cabeza al ver que comenzaba a responder a la pregunta.

- No mejor que vuestras motos - Murmuré mirándolo - Ah no... que se han caído al suelo... Es lo que tiene...

Scott no dejaba de golpearme bajo la mesa, pero no pudo impedir que respondiera.  


En llamas(Sciles).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora