SHOT FOUR

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Camila estaba sentada en las escaleras de la escenografía y platicaba con Sofi por FaceTime cuando la chica de ojos verdes se acercó.

-Yo también te extraño, pequeña, pero solo dos días más de video y estaré de nuevo contigo- escuchó Lauren y le sonrió cálidamente. -Mira quién está aquí- mencionó Camila volteando la cámara hacia la otra latina.

-Hola Sofi- saludó tiernamente haciendo un movimiento con su mano y caminó hacia la chica de piel bronceada para sentarse a un lado. Una vez sentada con ella, Camila volvió a poner la cámara enfocándolas. -¿Cómo haz estado? Hace mucho que no hablamos, Sofi.

-Lo sé, Lauren pero tú hace mucho que no nos visitas- respondió tristemente y Camila volteó a ver a la chica de a lado.

-Prometo ir pronto. ¿De acuerdo?

-De acuerdo- dijo Sofi animadamente. -Tengo que irme porque mañana hay clases, las quiero.

-Y nosotras a ti- devolvió Camila y Sofía desconectó la videollamada.

-¿Todo bien?- preguntó Lauren dejando un beso en la mejilla a la chica más joven y ésta suspiró.

-Si, solo que me estoy perdiendo de muchas cosas con Sofi- respondió conectando sus ojos chocolate con los ojos verdes que tenía enfrente.

-Para todo hay tiempo, Camz- sonrió levemente y quitó uno de sus mechones de su cara y lo colocó detrás de su oreja. -Te ves muy guapa hoy, extrañaba tu ropa casual.- Camila vestía un short negro con su polera blanca de "STUSSY".

-¿Tú por qué aún sigues con el vestuario? Veo que solo te cambiaste la playera por una manga corta.

-Hacía calor- respondió acercándose a su oído. -Pero ahora, hace más- susurró en él y Camila sonrío pasando una de sus manos en la mejilla de Lauren y la abrazó. -La verdad es que te estaba buscando.

-¿A mí? ¿Para qué?- respondió sorprendida.

-Para esto...- Lauren tomó el rostro de Camila entre sus manos y la empezó a besar, primero de forma tierna por lo ocurrido hace unos momentos y después el beso pasó a ser excitante. Camila se hizo para atrás un momento separando sus labios de los de la otra morena.

-Es...pe...ra...- pidió Camila entre cortado. -Aquí no, Lauren, nos pueden ver.

-Eso no te importó cuando estábamos en el tractor, ¿se te olvidó cómo metiste tus dos dedos en mi?- Camila no negó ni afirmó nada. -¿Quieres que te lo recuerde?- preguntó Lauren con voz seductora y esta vez la otra latina asintió.

Lauren continuó besando a Camila de manera caliente, sus lenguas entraban en el campo de batalla para luchar la una con la otra. La chica de ojos verdes colocó una de sus manos en él cuello de la menor para hacer un agarre más fuerte y así el beso no se desprendieran en ningún momento. Lauren se aferraba a los labios de Camila como si fuera la última vez que la besaría.

La menor tomó de la cintura a su chica ojiverde, agarró la playera y la empezaba a subir dejando al descubierto su abdomen. Se podía observar la tensión en el cuerpo de ambas. La adrenalina, el frío, el calor que sumergía con cada segundo que se besaban.

Lauren se terminó de quitar la playera y Camila tomó sus pechos y los masajeaba con fuerza. La chica mayor se sentó en Camila con las piernas abiertas y la vista en sus ojos, se mordía el labio inferior y movía sus caderas; de adelante hacia atrás, rápido y lento para provocarla más. -Quítate tú polera y el sujetador- ordenó Lauren y Camila sin alegar obedeció.

Al quitarse el sujetador, la mirada de Lauren se encendió de pasión y de lujuria, pegó un momento sus cuerpos para sentir el calor que la chica menor emanaba de el. Se separaron y Lauren no dudó ni un solo momento en llevarse uno de los pechos a su boca mientras que, con una de sus manos sujetaba el otro. La chica de ojos verdes chupaba, mordía, lamía y tiraba del pecho con fuerza, los pezones de Camila estaban muy erectos, lo cual le daba oportunidad a Lauren de morderlos suavemente. La chica de ojos cafés trató de quitarle el sujetador pero la otra latina la detuvo. -No- espetó Lauren. -Esta vez tú serás quien reciba toda clase de placer- y siguió besando los pechos de Camila.

De un momento a otro Lauren ayudó a Camila a ponerse de pie y con su boca bajó su short junto con sus bragas, dejando la zona íntima de la chica al descubierto. La ojiverde vio lo húmeda que estaba, y mojó sus labios mostrando deseos de probar sus fluidos de una sola vez. Se hincó y se acercó poco a poco a sus piernas, dejó besos húmedos en ellas; desde las rodillas hasta a un costado de su centro. Antes de que Lauren comenzara a darle placer a Camila en su intimidad volteó a verla encontrándose con sus ojos chocolates. La chica de ojos verdes sonrío malignamente y Camila solo asintió.

Lauren pasó primero su lengua; desde su centro hacia la parte más baja del abdomen. Colocó sus manos en las caderas de Camila y comenzó a devorar su zona íntima como si no hubiera un mañana. Pasaba su lengua rápida y lentamente para provocar que el cuerpo de la chica menor se tensara más. Chupaba su intimidad y mordía exquisitamente su clítoris. Los gemidos de la menor comenzaban a hacerse presente y lo único que hacía Lauren era intensificar sus movimientos para hacerla sufrir un poco más.

La morena que estaba hincada, metió dos de sus dedos en Camila y ésta jadeo como reflejo a la acción. Lauren movía sus dedos lentamente y al sacarlos conectó su mirada junto con la de su novia y llevó sus dedos a su boca, los chupó con tanta desesperación como si tuviera sed de ellos. La chica de ojos cafés presenció la escena y sus mejillas estaban ardiendo como el resto de cuerpo. Lauren volvió al centro de de la menor y volvió a lamer su intimidad; dejaba besos en ella y a la vez con su lengua trazaba círculos pequeños y mordía su clítoris.

-Vamos, Camz, necesito que te corras, no aguanto más- exigía la mayor. -Necesito saberte una vez más, necesito que liberes esa energía de ti. Hazme saber que lo estás disfrutando, házmelo saber de esa manera.

La más joven estaba más que excitada y para llegar al orgasmo le faltaba muy poco. Lauren continuaba con su trabajo; saboreando cada rincón de la intimidad de su novia, metía sus dedos para probarla de vez en cuando, su lengua jugaba con clítoris y los gemidos de Camila eran música para sus oídos, y entre más gemía Camila mas fuerte hacia todos sus movimientos. Los fluidos de la menor comenzaban a hacerse presente y Lauren no se detuvo en ningún momento hasta que salieron por completo.

Lauren succionó cada gota de los fluidos vaginales de Camila, mientras que al mismo tiempo, la de ojos cafés dejaba salir un pequeño y fuerte grito de placer. La ojiverde sonreía como si hubiera ganado el mejor premio del mundo, para ella hacer sentir a Camila era la mejor sensación que existía.

Las piernas de la morena temblaban y la mayor ayudó a Camila a sentarse, la besó en los labios tiernamente y la abrazó.

Lauren sabía que tener a Camila entre sus brazos después de hacerle el amor con tanta lujuria e intensidad era el mejor regalo que la vida podía darle. Ambas disfrutaban su intimidad, y hacerlo en lugares donde podían ser vistas para ellas era excitante. Les excitaba lo peligroso, la adrenalina corriendo en sus venas hacía que quisiesen más de cada una de ellas.

Era como la luna. Entre más brillosa esté más ilumina cada rincón y calle de la ciudad. Solamente que la única diferencia que había con ellas, era que; entre más peligroso sea el lugar, más insaciable y ardiente se volvía.

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Quinto shot. Para que se relajen aquellos que entran mañana a la escuela. Tómenlo con calma y disfrútenlo. Sigan pasando el fic, y votando por el.

Gracias por el 1K de lecturas. Tan's, esto ha sido gracias a ti, te quiero idiota.

-Majo / @LaurenDrugsMe

WORK ON MY BODY, I'M GONNA MAKE YOU SHOUTWhere stories live. Discover now