Donor

Capitulo 24

Los días pasan y yo estoy encerrada, fingiendo no recordar nada, fingiendo que confió en ellos, que les creo, cuando la realidad es otra, no les creo, no confió en ellos y recuerdo toda, recuerdo toda mi vida.

Solo pasaron unas horas desde que me desperté para recordar todo. Me mienten e inventan tantas infamias en contra de todos aquellos que conozco. Me dicen desde que les han robado la corona, que los han humillado, que han asesinado a sangre fría a sus familiares, a mis familiares.

Cada día me vienen a visitar, en total son tres, esta Matías, Mauro y Mauricio, son tres hermanos y lo mas irónico que todo es que ya descubrí quienes son los asesinos, ya descubrí cual de las familias reales estaba conspirando en contra de los reyes actuales, los mismos Grey, la misma familia de Fabianna, ellos mismo la asesinaron por la sed de poder, por la avaricia, porque lo único que querían era el poder, el poder que según ellos le arrebataron.

Han pasado 16 días desde que me tienen aquí, los he contado según las comidas que me traen, aquí no hay ventanas, no hay nada, la única salida es la puerta, y lo único que se puede ver cuando abren esta, son unas escaleras, lo que sacando la conclusión quiere decir que estoy en un sótano.

Entre el almuerzo y la cena, viene uno de ellos para hablarme pestes de todos, para ponerme en contra, para odiar a todos. Porque su plan ya cambio, ya no hay necesidad de matarme, ahora yo soy su arma en contra de la Alejandro y David. Se que Matías fue el amor de Alicia, fue el que la asesino, el me dijo que asesinaron a su novio, solo para que el no fuera feliz, esta enfermo, esta loco, el la mato y me dice que la amo, cuando acabo con ella, cuando la destruyo.

Es duro despertarte cada mañana y recibir a los asesinos de Mike, porque jure matarlos, jure vengar a mi amigo, pero soy solo yo y no se mucho de lucha y lo poco que se, no me servirá de nada, solo para salir yo mal herida. Esas ganas de cada día atacarlos y sacarles los ojos, lo duro que es esconder mi odio hacia ellos, esperando el momento que vengan por mí, porque por más que lo intentado, no he podido conectarme con Sebastián, y es tan frustrante querer gritarle y decirle: '' ¡Aquí estoy! Se quien ha hecho todo, los asesinos los tengo ante mi. Ven por mí, por favor. ''

Han sido días largos, días duros, han sido días en los cuales tengo que fingir, tengo que actuar, tengo que ocultar, y tengo que dejar pasar que se que ellos me están mintiendo, tengo que hacer como si no los odiara, porque no soy un vampiro, ni un poderoso, soy de la realeza, pero también soy una donante y quiero sangre de ellos, quiero su sangre corriendo por mis manos, deslizándose entre mis dedos, pero tengo que callar, porque estoy esperando que vengan por mi, pero mientras espero, siento que me rompo, y aunque pongo todo de mi, es difícil, tener tan cerca a quien tanto odias y no poder acabar con su vida, como acabo con tanto, poder abrirle el cuello de oreja a oreja y ver como se desangra poco a poco y aunque es crudo, es sádico, es lo que se merecen, merecen sentir el dolor, merecen saber que su vida se esta yendo poco a poco y ellos no poder hacer nada. Su destino será el infierno y así sea lo último que haga en mi respiro final, ese será su casa, será su martirio, será su fin y sufrirán por el resto de la eternidad.

Aunque el odio recorre mis venas, ansió un abrazo, quiero un amigo, quiero a mis chicos, y todo este tiempo que he permanecido sola, me ha abierto los ojos, y aunque creo que ya los tenia abierto, no era como ahora, en este momento y en el venidero, se lo afortunada que soy, porque aunque no fue fácil para mi, he tenido durante toda mi vida que a su tiempo no aprendí a apreciar y ahora que lo hago, veo lo afortunada que soy, porque no solo tuve comida en mi estomago y nunca pase hambre, conocí a maravillosas personas que solo yo los aparte, porque era un escudo, que poco a poco se ha ido derrumbando. Y no lo recordé y me borraron la memoria, pero tuve una madre, un padre y un tío que me amaban, y que no lo recordara no quiere decir que no estuvieron ahí para mi, soy afortunada y en estas cuatro paredes, me di cuenta de eso, porque conocí el amor y aunque poco fue lo que o disfrute, luchare porque no sea poco, sino mucho, y aunque fui hija única, conseguí dos hermanos, Mike y Benjamín y aunque uno no este, siempre vivirá en mi corazón y al otro lo atesorare y cuidare, lo apreciare.