Música en las sombras (Nico Di Angelo)

33. Una Pala Para Ti

CAPITULO 33 "Una Pala Para Ti"
Daphne P.O.V.

Habían pasado casi un mes desde la ultima vez que había visto a Nico di Angelo, probablemente sonaba algo tonto y desesperado que hubiera contado los días sin él, pero en serio me hacía falta en mi vida. Nunca me había dado cuenta lo mucho que necesitaba a Nico en mi vida hasta que desapareció a sabe donde.

Si estuviera segura de que regresó al inframundo no me hubiera importado que medio mundo estuviera congelado, no me hubiera importado que su padre me odiara y habría dejado mi orgullo de lado lo buscaría, pero ni si quiera estaba segura de que se encontrara ahí.

Pero no sabía nada de su paradero.

Ahora la noches de insomnio se habían convertido largas y aburridas. Porque estaba preocupada por Nico que tal si había cometido un error o lo hubiera atacado algo ahora estaba lastimado, a mitad de la nada sin que nadie lo ayude. O peor que tal si un dios le había pedido un favor.

Las noches de insomnio me estaba volviendo en una persona malhumorada y paranoica. cuando dormía tampoco era mejor con aquellos sueños de Nico matándome. Si un día me encontraba con Elena Allen cara a cara le iba dar un buen golpe por meterme esas ideas a la cabeza.

Ahora era de noche y como siempre no podía dormir, únicamente daba vueltas en mi cama y escuchaba los ronquidos de mis hermanos.

-Daphne ¡Daphne!- me sacudió una de mis hermanas pensando que estaba dormida.

-¿Que pasó?-

-Ven creo que tienes que ver esto- me jaló del brazo y me llevo a fuera de la cabaña.

Todos los campistas estaban despiertos haciendo un círculo alrededor de alguien me abrí paso entre todos ellos vi que en medio estaba Nico.

Parecía descuidado, su cabello estaba todavía más largo y despeinado de lo normal, se veía un poco más delgado y sus ojeras estaban más pronunciadas que antes. Tenía una mirada rota. ¿cómo podía lucir tan mal y al mismo tiempo tan bien? Eso era injusto, era tan atractivo. Lo odiaba.

Percy se acercó a mi aventando a toda la muchedumbre que se encontraba alrededor me dijo:

-Es como volver a ver a Nico después de que se murió su hermana Bianca hace años, pero al menos no estaba... borracho-

¿borracho? Vi que Nico se tambaleaba un poco cuando caminaba gritaba algo.

-Necesito verla. Solo una vez mas. ¡necesito verla una vez mas!- se tropezó con la nieve callo.

Fui corriendo hacia él empecé ayudarlo, vi que estaba más frío de lo común. Mi corazón latía con fuerza por preocupación y por estar tan cerca de él de nuevo.

-¿Nico? ¿que haces aquí?- pregunté intentado hacerme la enojada, pero en el estado como se encontraba no podía enojarme con él, esperaría a mañana.

-perdón por irme tan precipitadamente y sin aviso, pero necesito verla-

-¿A quien?-

Vi que Nico estaba mas herido emocionalmente de lo que yo pensé en un principio, vi que estaba a punto de llorar sabía que cuando estuviera sobrio odiaría la idea de que medio campamento lo viera vulnerable. Así que apoyándolo en mi lo llevé a su cabaña mientras el murmuraba "Necesito verla".

Llegamos a su cabaña lo senté en su sillón le volvi a preguntar;

-¿a quién?-

-desde que me fui se me metió esa idea loca, la he invocado, una y otra y otra vez, con la esperanzas de verla, pero parece que no me quiere, nunca viene- se lamentó jugando con su anillo de calavera inconscientemente.