Capitulo 3

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Bien chicas, ahora intentare un tipo de narración distinto, porfissss díganme que opinan de como lo Narre, si quieren les gusta más así y como lo hago comúnmente y si tienen algún consejo lo acepto con gusto :D

La humedad en el ambiente era casi insoportable, era como estar en el corazón de la selva, no paraba de sudar, y la respiración era pesada; a veces podía llegar a ser tan frío como la misma Antártida, al punto de casi morir por hipotermia. O como en el caso de ese momento, con el calor y humedad del ambiente podría matarlo de deshidratación, lo cual era irónico estando en el fondo del mar. La pequeña celda de bloques grises y barrotes de hierro oxidado, llena de algas y moho gracias al agua que entraba en ocasiones por las grietas. La cama no era algo cómodo, en la pared derecha un colchón con machas cafés y verdes podrido de máximo quince centímetros de grosor, quien sabría cuanto llevaría ahí, cientos de años tal vez o más. Y en la esquina estaba él, el chico rubio de ojos tormenta, la misma esquina de siempre, pensando en lo mismo de todos los días, ella, era todo en lo que podía pensar, la había dejado sola, la había abandonado, el tenía la culpa, no sabía donde ni como estaba. Su chica, el amor de su vida, extrañaba todo de ella, la forma en que despertaba en las mañanas con el cabello castaño claro despeinado y enredado cubriendo la almohada y a veces su cara, su carácter con el que no dejaba que nadie la manejara, sus suaves y rosas labios, su sonrisa blanca, la forma en que se movía con suavidad y agilidad como si estuviera en agua, cuando rodaba los ojos cada que le daba una orden, estar ahí no hacía más que recordarle todas esas veces que miro sus ojos mar, las veces en que ella lo miro a él como si fuera lo único en el mundo que importara, esperaba que ella se hubiera dado cuenta que él la miraba de la misma forma, siempre. Demonios como la extrañaba, necesitaba tener su cuerpo entre en sus brazos, besar sus labios dulces una vez más, si la tuviera con el nunca más la dejaría alejarse. El vacío y dolor se sentían en su pecho, nunca pensó que se sentiría así en algún momento de su vida, era como si le hubieran arrancado lo más esencial en su vida, hubiera ido a donde sea por ella, y sabía que ella hubiera echo lo mismo, era su culpa, toda la culpa la tenía el por no haberse dado cuenta antes, por no haber luchado sólo un poco más, se tragó su orgullo al pedir misericordia, al rogar por que le creyeran, grito todas las noches y días por más de un mes que sólo dejarán verla una vez más, rogó porque escucharan lo que planeaba antes de que atacaran el barco, pidió con todo lo que pudo que sólo oyeran lo que tenía que decir, que creyeran en la verdad que decia. Pero nadie escucho, nadie le creyó, estaba solo como en el inicio, pero esta vez era culpa suya, y se lamentaba cada minuto que pasaba. Se nada le sirvió lamentarse, de nada sirvió rogar y de nada sirvió tragarse el orgullo, no sabía como pudo creer por un momento que algo pasaria, los Dioses siempre eran iguales, fue un iluso al pensar diferente.

Luke paso la mano por su cabello rubio sintiéndolo grasoso y más largo, suspiro y miro al techo recordando las constelaciones que le enseño a ____, rio entre dientes y con nostalgia al recordar como ella había bufado y enojado al no poder verlas la primera vez, se había reído tanto de ella y como había actuado. Su camiseta estaba empapada de sudor, se la quito y se limpió con esta la cara, hacia demasiado calor, se sentía mareado por la segura deshidratación pero sabía que no moriría por eso, en unas cuantas horas la temperatura volvería a cambiar como siempre. El estómago le rugió, tenía hambre y no sabía si lo alimentarían ese día, agudizo el oído y oyó pasos por el pasillo, y algunos quejidos de las otras celdas alejadas, en unos segundos un guardia llego frente a su celda, era muy parecido a quienes lo separaron de _____ pero este tenía la nariz un poco torcida y era de distintos colores, en sus manos traía una bandeja de plata con un vaso de agua y un plato de arroz, su estómago rugió de nuevo, el guardia de armadura plateada paso la bandeja por un orificio rectangular, dejándola para que comiera y después desapareció de nuevo por el pasillo. Se levantó rápidamente y comenzó a comer, tomo el agua disfrutando su frescura, una vez que término dejo todo y se sentó esta vez en su "cama", si es que se le podía decir así. Minutos después llegaron por la bandeja de nuevo y se la llevaron, levanto el colchón, tomo una piedra y anoto los minutos que tardaron y los pasos que se oían hasta llegar a su celda, en el piso. Números y letras escritas en el suelo debajo del colchón, patrones descubiertos, no tenía un plan aún pero pronto lo haría. Volvió a poner el colchón en su lugar, se sentó de nuevo en el y comenzó a idear como saldría de ahí, como llegaría a _____, aunque escapara era practicante imposible que llegara a la superficie, y aún si lo hiciera no sabía donde estaba, no sabía si abría tierra cerca (lo cual era muy poco probable), por ahora no podía idear una salida pero tenía que haber una, era algo que con los años había aprendido, siempre había una salida. 

Volveré por ti ( Luke Castellan ) 2da tempWhere stories live. Discover now