Cartas A "Alguien" © -Hiccstrid- |2do Lugar Premios Alex 2016|

Capitulo 2 - Mi Nombre es...

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- ¿Hola? – volví a preguntar, con la mirada hacia el suelo

Baje mi mano lentamente, la cual estaba a unos cuantos centímetros del picaporte, y gire mi cuerpo dándole la espalda a la puerta que daba al interior de mi casa.

Mantuve la mirada fija, sobre el hombro de aquella chica esperando alguna respuesta, pero en vez de eso solamente escuche el crujir de las hojas, para cuando puse mi atención en la chica esta estaba regresando de donde vino.

- ¡Ore! ¡Espera! - grité sorpresivamente mientras corría a aferrarme a los barrotes de la puerta

La chica giro un poco su apática mirada cómo si estuviera desilusionada después de estar esperando algo.

- ¿Tú eres la hijas de la familia nueva?- cuestioné quedamente mientras mis manos apretaban suavemente aquellos barandales que despedían un olor peculiar.

La chica se giro por completo su cuerpo provocando que aquel repetitivo sonido de las hojas quebrarse se volviera a escuchar.

- Tal vez – espetó la chica con una voz rasposa por la falta de habla

- No hablas mucho ¿Verdad? – cuestione mientras analizaba a la chica con la mirada

Ella solo encogió sus hombros como si estuviera afirmando mi pregunta. No podía explicar bien el sentimiento que aquella chica me dada, era algo igual a lo que me pasaba cuando me encontraba con las sirvientas de mi madre pero con aquella chica había algo distinto...

- Creo que me voy – susurró la chica con la intención de querer dar la vuelta

- ¡Espera!, pero si apenas... ¿Cómo te llamas? –

La chica alzó sus ojos con una mirada llena de duda y asombro que a los pocos segundos miraban al piso

- No creo que decírtelo sea muy importante para ti – murmuró la chica dando una patada a una piedrita que descansaba al frente de ella

- No te entiendo, si te digo el mío... ¿Me dirás el tuyo? – propuse con una pequeña sonrisa en mis labios

- No lo sé... - respondió la chica con un tono seco y con los brazos cruzados

- Eres algo rara, ¿Sabes? – propuse con un tono indiferente.

Al parecer dije algo malo, ya que la chica al escuchar mis palabras, alzo la vista con los ojos entrecerrados, acercándose hacia la puerta de barrotes con la mano en alto.

- ¿Por qué dices que soy rara, niño? – protestó la chica dando un manotaso a un barrote de la puerta - ¿Es por ser tan callada?, ¿Por no mostrar querer hablar? –

- Oye, espera, yo no dije nada malo, acepta que eres algo rara, no he conocido a alguien tan calladó como tú, a excepción de las sirvientas que cuidan la casa de mis padres, pero tú eres –

- Ah, ¿Ahora me estas comparando con otras personas? – rezongaba la chica apuntándome con su dedo – Como te atreves a juzgar a una persona solo con verla por unos minutos –

- Oye, retiro lo dicho, al parecer eres muy violenta – indicaba mientras más me aferraba a los barandales

- Violenta, ¿Qué es lo que estás diciendo...? - . La chica bajo su tono de voz al darse cuenta de mi observación y volvió a bajar la vista con una mirada de arrepentimiento – Lo siento -