RUBY STORM | ROMANOGERS

Capítulo 1

Natasha caminaba por los pasillos de la central de Los Vengadores, observando unos papeles en su mano. Su mente estaba tan concentrada en ellos que no notó a la persona que la seguía hasta que la tomó del brazo y la arrastró hasta un costado al lado de una máquina expendedora.

– ¿Vas a alguna parte? –Preguntó mirándola fijamente.

Ella trató de reprimir una pequeña sonrisa, sin embargo falló. Abrazó los papeles con su brazo izquierdo, y con su mano derecha colocó un mechón de su corto cabello rojizo tras su oreja.

–Ahora, no lo sé. –Contestó y se encogió de hombros. Steve colocó uno de sus brazos a un lado de la cabeza de ella. Sus ojos nunca se apartaron de los de suyos, cosa que causaba un cierto nerviosismo en ambos. –Iba a dejarle unos papeles a Stark. –Torció un poco sus labios.

Steve levantó ambas cejas en forma de sorpresa. Stark nunca recibía papeles, para él todo tenía que ser electrónico. Apartó esos pensamientos de su cabeza y se concentró en la bella chica que se encontraba muy cerca de él. En ese momento lo único que le importaba era estar con ella, con nadie más. Aún no podía explicar el extraño sentimiento que causaba ella en él. Cuando estaba junto a Natasha, sus manos sudaban, su estómago parecía querer salir de su cuerpo, sus pensamientos no eran muy claros, y sus palabras salían algo torpes de vez en cuando. Él creyó conocer el amor antes, sin embargo, esto era mucho más fuerte que ese que alguna vez sintió con Peggy.

–Quizás, luego que entregues eso me puedas acompañar a tomar un café, –propuso levantando su mano para acariciar su mejilla suavemente.

Natasha cerró sus ojos por unos escasos segundos tras sentir el afecto y cariño que él le brindaba. Algo tan raro para ella. Su personalidad dura e independiente parecía adormecerse al sentir a Steve cerca.

–No lo creo. –Contestó torciendo sus labios rojos–. Te llaman.

Steve frunció el ceño confundido. – ¿Qué...?

–Capitán. –Una voz femenina lo llamó interrumpiendo su momento juntos.

Él quitó su vista de Natasha y la centró en la rubia que se encontraba a unos metros.

–Fury quiere verlo. – Comunicó la agente Sharon Carter con su mirada fija en Steve y el rostro serio. –Si puede ir ahora sería genial.

–Iré en unos momentos. –Respondió esperando que Sharon se retire, sin embargo no lo hizo. Miró a Natasha pidiéndole ayuda con los ojos pero ella sólo sonrió un poco.

–Tiene trabajo Capitán, lo veré luego, supongo. –Dijo encogiéndose de hombros.

Él soltó un suspiro y le contestó: –Supones bien. Te enviaré un mensaje, –sonrió orgulloso.

Natasha no pudo aguantar y soltó una carcajada. – ¿Manejas un celular? –Preguntó colocando su mano en su hombro aun sabiendo quién se encontraba mirando.

–Estoy en eso... –Se rascó la nuca.

–Capitán. –Sharon volvió a interrumpirlos.

–Ve. –Se alejó de él para comenzar a caminar, pero de un momento a otro paró y volvió hacia él, se acercó a su rostro y besó la comisura de sus labios por unos segundos. Se alejó y le guiñó un ojo para luego perderse por los pasillos del lugar.

Los puños de Steve golpeaban fuertemente la bolsa de boxeo causando sonidos al impactar; su mirada estaba perdida en algún lugar del gimnasio y el ceño fruncido. Su cabeza estaba lejos torturándolo con los recuerdos de él junto con ella. Con su pelirroja favorita.