M'aimer pour qui je suis "AMAME CÓMO SOY"

El callejon del beso

— y dime, te ha gustado Guanajuato?
— ho si es muy hermoso, su gente es muy alegre y fiestera por lo que se ve, jejejeje.
— ho si, es muy tradicional, realmente somos muy de costumbres religiosas y tradiciones.

Mientras pasábamos no pude notar ver que en un estrecho callejón muchas personas se besaban y tomaban fotos, a lo cual pregunte a Mariana de que se trataba.

— veraz, ese callejón es una leyenda mexicana, tiene una bella historia de contar, quieres escucharla?
— claro, soy todo oídos, dime de qué se trata?

— bien, como vez, Guanajuato parece sacada de un cuento de hadas donde no pasa el tiempo. Es una casa mágica rodeada de sierras y montañas, bajo un cielo azul y con una arquitectura de lo más extraña, debido a que está asentada sobre una cañada.

— interesante— le dije mientras ella me miraba a los ojos, esos ojos que volverían locos a cualquiera.

— así es, Sin embargo, uno de los mayores atractivos de esta Ciudad Patrimonio del Bajío son las leyendas que habitan en sus callejones, estrechos y empinados. La suscitada en el conocido como el Callejón del Beso es una de las más famosas y de mayor tradición, narrada miles de veces por sus habitantes y por las alegres estudiantinas. Esta tiene como escenario un espacio muy reducido, donde apenas caben dos personas; sin duda, el tamaño exacto para proporcionar una historia que perdura hasta nuestros días. Relata la historia de unos amantes que tuvieron un fin devastador, y la historia comienza así:

"Carmen era hija única de un hombre intransigente y violento, pero como suele suceder, el amor triunfa a pesar de todo. Carmen era cortejada por Luis, un pobre minero de un pueblo cercano. Al descubrir su amor, su padre la encerró y la amenazó con internarla en un convento. Según él, su joven prole debía casarse en España con un viejo rico y noble, con lo cual acrecentarían considerablemente sus riquezas.

La bella y sumisa criatura y su dama de compañía, Brígida, lloraron e imploraron juntas y resolvieron que la dama de compañía le llevara una misiva a don Luis con las malas noticias. Ante ese hecho, Luis decidió irse a vivir a la casa de enfrente de la de su amada, que adquirió a precio de oro. El edificio tenía un balcón que daba a un callejón tan angosto que se podía tocar con la mano la pared del vecino.

Un día se encontraban los enamorados platicando de balcón a balcón, y cuando más abstraídos estaban, del fondo de la pieza se escucharon frases violentas. Era el padre de doña Carmen increpando a Brígida, quien se jugaba la vida al tratar de impedir que el amo entrara a la alcoba de su señora. Finalmente, el padre logró introducirse, y con una daga que llevaba en la mano dio un solo golpe, clavándola en el pecho de su hija.

Doña Carmen yacía muerta mientras una de sus manos seguía siendo posesión de la mano de don Luis, quien ante lo inevitable sólo dejó un tierno beso sobre la palma".

Esta trágica leyenda da cuenta también de las costumbres de la época. En los siglos XVI y XVII no se podía dar el casamiento de ciertas clases sociales con otras de inferior categoría, y que tener una hija significaba poder obtener una jerarquía mayor dentro de la escala social,  por aquellos tiempos no existía una división tan tajante en la disposición urbana, con esto quiero decir que las clases sociales no se distinguían por zonas habitacionales, sino en los espacios públicos. Los amores tendían a realizarse a escondidas, pues los padres no aceptaban la relación si el muchacho no llenaba los requisitos de abolengo y de riqueza.

Hoy en día, este rincón es uno de los sitios más populares de la ciudad de Guanajuato. Todos los días decenas de amantes lo visitan para escuchar la triste historia de Luis y Carmen, así como para besarse en un escalón rindiendo homenaje a este amor imposible.
 
— y es por eso que en honor a Luis y Carmen le pusieron el callejón del beso ¿qué opinas?

No supe qué decir, solo la tome del brazo y la bese, la bese como nunca antes había besado a nadie más, podía sentir sus dulces y cálidos besos y la forma el la que ella también correspondía al beso. Nos separamos a falta de aire y en ese preciso momento solo me dieron ganas de abrazarla fuertemente, y no soltarla jamás.

— Mariana, tal vez fui un completo idiota al inicio pero, quiero que sepas que jamás he sentido nada por nadie como lo estoy sintiendo por ti, haces que mi corazón se acelere con solo tener tu presencia y si no me crees compruébalo tú misma, puse su mano en mi pecho y se sorprendió cuando sintió como mis latidos se acelere an más y más.

— no quiero nada que no seas tú, entiendes, no me importa dejar todo o perderlo solo me importas tú, he aprendido a mirarte no sólo por fuera sino por dentro y cada día me sorprenderé de conocerte, eres perfecta, no eres ni demasiado sino lo necesario que yo quiero para poder vivir.

—¿qué estás diciendo Alonzo ?
— estoy diciendo que te amo, que eres mi complemento, la mujer que quiero para esta y todas las vidas que tenga, la madre de mis hijos, mi esposa, mi amiga y compañera, no quiero mi vida si no estás en ella.

— hooo por dios! Lo dices en serio Alonzo ?

— si, Mariana no sé cuánto me lleve el volver a enamorarte o que tu confíes en mí, pero estoy dispuesto a luchar, cambiar y poner de mi parte para que me des una oportunidad más de ser novios y poder iniciar algo formal a tu lado.
Así que ¿tú qué opinas, estás dispuesta a intentarlo?

— Alonzo, jamás imaginé que sintieras todo eso, y pues claro que si, digo no será fácil volver a confiar en alguien que me lastimo, pero si ambos ponemos de nuestra parte, estoy dispuesta a intentarlo una vez más, pero todo con calma y a su tiempo, sin apresurar las cosas, ¿estás de acuerdo?

— Mariana por su puesto que si, me haces muy feliz, claro que si pondré de mi parte y veraz que todo será distinto.

Esa misma noche dormí tan profundamente y feliz, Mariana me daría una segunda oportunidad y aprovechando el viaje pedí permiso a sus padres, como es tradicional en México de poder andar con ella y que ellos me conocieran, cosa que al inicio su padre no estaba muy contento pero al final logre convencerlo cuando platicando a solas le dije y exprese lo que Mariana había hecho en mi y como cambio mi vida sin imaginarlo y a lo cual estaba dispuesto a luchar por ella, así que recibí un gran abrazo y tuve la autorización por parte de su padre, no sin antes planear juntos una sorpresa al estilo mexicana, que antiguamente los hombres le daban a las mujeres cuando pedían permiso para enamorarlas, la idea me encanto y salimos en busca de la sorpresa, no cabe duda que Mariana le va a encantar.

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Espero que les esté gustando la historia y solo para agradecer sus votos y que lean mi historia, gracias chicas y chicos !!!!