BLINDNESS

Capítulo 9

-Dayaneris, Dayaneris despierta -fui abriendo los párpados poco a poco y distinguí la voz de Jacob, no sabía que había pasado y ni donde estaba.

-Que ha pasado -pregunté con voz ronca, estaba muy confusa, lo único que recuerdo era haber estado con Gabriel.

-Te desmayaste y te traje al hospital,estaba muy preocupado -oí como decía Jacob sollozando,espera Jacob preocupado y sollozando, esto debe ser una broma, seguro que era por el trabajo, estaría preocupado parque creería que lo iba a perder.

-Jacob deja de burlarte de mí,se que te preocupaste por tu trabajo, no por mí-dije con mi habitual tono tosco.

-Por que no me puedes creer por una vez, es que no ves que me vuelves loco, casi mato a Gabriel porque creía que te había hecho algo -dijo él con voz cansina, y yo no paraba de abrir y cerrar la boca, no sabía que decir. Deje de pensar al sentir unos carnosos labios sobre los míos, y no dude en corresponder al beso, se sentía tan bien, eran como pequeños escalofríos que se esparcian alrededor de mi cuerpo, nunca había sentido algo así, pero me gustaba y mucho.

-Dayaneris -oí como me llamaba Patrick y me separé rápidamente de Jacob, dándome cuenta del error que había cometido, no podía dejar que esto volviese a pasar me reusaba a meter a alguien nuevo en mi vida me daba miedo que me volvieran a hacer daño, si mi madre me lo hizo porque no lo haría otra persona. Definitivamente no estaba preparada para amar, y menos para mezclar lo profesional con lo sentimental.

-Hola Patrick -dije yo amable, aunque en verdad estaba un poco molesta con él ya que no fue él quién me trajo, sé que sonará mal después de haber besado a Jacob, pero por primera vez empezaba a confiar en alguien, pero como siempre me equivoqué.

Mi relación con Patrick cambiaría, desde ahora solo seremos socios no amigos, se que la decisión parece un poco drástica, pero si fuese un buen amigo hubiese sido el primero en estar aquí o por lo menos me hubiese traído. Ser ciego no servía de escusa, él también tenía un guardaespaldas que lo acompañaba a todas partes y perfectamente podría haberle llamado al sentir que me había desmayado, pero no, tuvo que subir Jacob y por primera vez agradezco tenerlo como guardaespaldas.

-Que tal estas, lamento no haber podido venir antes -acaba de burlarse de mí, quien se cree que soy. Sé que tiene el tiempo suficiente para estar aquí aunque sea unos míseros minutos. Por dios somos socios, yo más que nadie se cuales son sus horarios de trabajo y también, por lo que me ha comentado no tiene familia.

-Bien, y no te preocupes no pasa nada-dije yo en el mayor intento de que mi voz sonara serena, estaba a muy poco de perder los estribos -Patrick por favor, si no es molestia me gustaría descansar -dije yo, lo único que escuché fue como cerraban la puerta, encima se enfada.

-Dayaneris si quieres podemos irnos hoy -dijo Jacob, y desconozco la razón pero lo besé, lo besé y no me arrepentí de ello. Me daba igual lo que pasaría después de esto, me daba igual si me estaba contradiciendo a mi misma, lo único que quería era sentir sus carnosos labios sobre los míos, sentir eso escalofríos en todo mi cuerpo que sin duda alguna se habían convertido en la mejor sensación del mundo.

-Y-yo...-por primera vez en mi vida no sabía que decir, nunca había estado en esta situación, así que no sabía qué hacer, pero dejé de pensar al sentir sus labios presionando losiento míos.

-Me encantas -susurró en mis labios, y no sé el porqué, pero mi corazón latía rápido. Definitivamente me gustaba Jacob, eso me preocupaba y mucho.