Al día siguiente...

982 111 21
                                    

―¿Y bien? ―preguntó un animado Tae Hyung, mientras los cuatro chicos caminaban por la calle, camino a sus respectivos hogares―. ¿Quieren hacer algo hoy? ―Su mano seguía entrelazada fuertemente con la de Kaori.

La pareja a su costado permanecía en silencio; parecían ignorarlo desde que despertaron ese día. Momo y Jimin se encontraban absortos en su pequeña burbuja, siendo incapaces de prestar atención a su alrededor.

―¡Hey! ¡Momo! ―la llamó suavemente Kaori. La chica reaccionó y la enfrentó―. ¿Quieren que hagamos algo hoy? ¿Los cuatro? ―Hizo una pequeña pausa―. ¿Juntos?

Jimin solo observó a Momo fijamente; una gran sonrisa se extendía por todo su rostro. Momo le sonrió de vuelta y asintió fuertemente en dirección a su amiga.

―Nos encantaría ―pronunció finalmente.

―De acuerdo. Así que... ―murmuró Tae Hyung, dirigiéndole una mirada de soslayo a su amigo. Este lo miró de vuelta, y ambos sonrieron de inmediato. El par de chicas a su lado observaba la escena con desconfianza.

―¡Tengo una idea! ―Mencionó Jimin repentinamente. Tres pares de ojos se posaron sobre él. Con extrema delicadeza, el chico presionó suavemente la mano de Momo, que se encontraba entrelazada con la suya. La chica sonrió ante este gesto.

―¿Cuál es? ―Se apresuró a preguntar Kaori. El chico hizo una pausa antes de responder.

―¿Verdad o reto?

―¡Oh, vamos! ―se quejaron ambas chicas al instante.

―Nada de retos por hoy, señor ―susurró Momo en sus labios, mientras se acercaba tímidamente a él y lo besaba con ternura. Jimin sujetó su mentón con firmeza para atraerla en otro dulce beso.

―Así es. Nada de retos por hoy. ¿No es así, Tae? ―cuestionó Kaori, siendo atraída por un travieso Tae Hyung que le hizo cosquillas en el cuello, provocando una gran carcajada por parte de la chica.

―¡Hey! Hagan silencio, chicos. ¿Qué no ven que estamos en un lugar público? ―Les recordó Jimin.

―Mira quién habla ―sentenció Tae Hyung, mientras retomaba su paso por la acera―. El chico que hace más ruido que nadie mientras duerme.

―¡Oye! Si te refieres a mis ronquidos, yo... ―De repente, una pequeña mano se posó sobre el antebrazo del castaño, capturando su atención. Observó fijamente a la chica que tenía al frente, y sonrió avergonzado―. ¿Son demasiado fuertes? ―preguntó tímidamente, mientras rascaba su nuca con torpeza.

―Solo un poco ―susurró Momo en respuesta.

―¡Vamos! Hay que hacer algo. Después de todo, tenemos todo el fin de semana para nosotros ―señaló Kaori.

―¿Qué opinan de ir a Starbucks? ―pronunció Jimin, mientras el cuarteto seguía su rumbo a través de las solitarias calles matinales de la ciudad de Seúl, tras haber experimentado una de las más apasionantes e increíbles noches de toda su vida.

Sin duda alguna, esa sería una noche que jamás olvidarían.

A night to remember © ➳ Park Jimin & Kim Tae Hyung || ANTR #1Where stories live. Discover now