Me seco el pelo lo más rápido que puedo y me hago unos suaves rizos en las puntas. No me maquillo y no me pongo calzado de calle, sigo con las de andar por casa. Unas zapatillas de los Minions. Que monas.

Bajo las escaleras con pequeños saltos. Estoy muy contenta, es Navidad.

Cuando mi hermano vino a visitarme quedamos en que pasaríamos las navidades juntos en un pueblecito que no me acuerdo como se llama. Estoy súper emocionada y todavía más cuando al llegar abajo me encuentro a los chicos con el espumillón rodeando sus cuellos como si fueran boas.

Lo que más me sorprende es ver cómo están haciendo un desfile en calzoncillos andando de una forma exagerada.

-Lo hacen así- dice Eddie moviendo todo su cuerpo al andar.

-¡Que va!- oigo que dice Ryan y ahora es él, el que se dispone a desfilar.

-¿Qué hacéis?- les pregunto riendo. Ellos me miran y no muestran ningún signo de vergüenza.

-Estamos discutiendo sobre cómo andan las modelos de Victoria Secret- me dice Josh serio.

-Quizás no os decidís porque os falta un complemento.- ellos me miran esperando la palabra que los sacara de dudas.- Un sujetador.

Los chicos se miran entre si y rápidamente corren subiendo las escaleras. Imagino que entraran en mi cuarto y cogerán un sujetador. Ay señor, estos chicos son especiales.

Con la misma velocidad con la que suben, bajan, solo que ahora con un sujetador de color. Se empujan entre ellos y cuando llegan al salón hacen una fila. Ryan se me acerca con algo en las manos.

-Si nosotros lo hacemos, tú también.- y deja en mi mano lo que puedo imaginar que es un conjunto de ropa interior.

Posiblemente, los primeros días me sentiría avergonzada pero tras meses con ellos, lo más normal es vernos entre nosotros medio desnudos. Sin pudor.

Me rio y acepto el reto de convertirme en modelo de victoria secret por unos minutos. Voy al baño y me cambio. Cuando me veo en el espejo veo que Ryan ha elegido el último conjunto de la sesión de fotos. Ese que provoco que Ryan me enviase descargas eléctricas con sus caricias. Me sonrojo un poco porque sé que lo ha hecho aposta.

Salgo del baño y voy al salón, pero antes de ponerme en la fila, cojo un espumillón rojo que combina perfectamente con mi conjunto negro. Voy a la fila bajo la mirada de los chicos. Dos de ellos destacan. Ryan me sonríe y me guiña un ojo mientras que Dylan me mira frunciendo el ceño. Hago que no me doy cuenta y voy al final de la fila.

Los chicos andan de una manera súper exagerada, incluso llego a pensar que a Leeroy se le va a salir la cadera con esos movimientos. Josh se toca las copas del sujetador y saca la lengua. ¿No será el más sexy?

Es mi turno y hago los mismos movimientos, menos forzados y con una rápida vuelta al final. No es por creérmelo, pero que genial ha quedado. Los chicos me aplauden y yo me rio. De repente noto algo pegado a mi espalda. Ryan

-Eres una gran modelo.- me dice dándome un beso detrás de la oreja.

-tú no te quedas atrás.- le digo. Él se despega de mí y se pone enfrente de mí.

-Ese conjunto me trae muy buenos recuerdos.- me dice mientras se muerde el labio. Yo me rio y me pongo en su espalda, pego un salto y me subo al a caballito.

-Vamos querido, sube a mi habitación.- le digo mientras le doy un azote en el culo.

-Giiiii!- dice el imitando a un caballo. Idiota.

Me vuelvo a vestir con la ropa anterior. Al mirarme en el espejo veo mi sonrojo y sé que es porque Ryan esta en mi habitación viendo como me visto.

Fraternidad mixta...¡UNA MIERDA!Where stories live. Discover now