Skinny Jeans ➳ Justin Bieber

Capítulo diecinueve.

❝JUSTIN NO VA A VENIR❞

CASSIE HILL

— ¿Qué tal este?— Miley me mostró un disfraz de enfermera. Fruncí el ceño, ¿Desde cuándo se ponían las enfermeras eso? El disfraz de enfermera consistía en un vestido muy escotado con botones negros.

— No— negué rápidamente.

Me encontraba buscando un disfraz para la fiesta de Halloween, pero hasta ahora no había nada que me gustase. Qué esperabas, es ropa de Miley, habló mi subconsciente.

— Pues no tengo otro Cassie— bufó tirando el ultimo disfraz a mi cama— ya te mostré todos, el de policía, colegiala, conejita, vaquera...

— ¿No tienes algo más tapado? ¿Y más decente?— pregunte cruzándome de brazos.

— ¡Todo lo de acá es decente!— Miley bufó haciéndose la ofendida.

Reí, no era cierto. Todos los disfraces que me había mostrado mi mejor amiga perecían para juegos sexuales en donde las parejas se disfrazan.

— ¿Y ahora qué hago?— bufé, enserio quería ir a esa fiesta para pasar un rato con Justin.

— Pues no lo se— Miley se mordió el labio pensativa— Solo te queda vestirte con los disfraces que te enseñe y si no, pues no vayas— se encogió de hombros mientras guardaba los disfraces en su último cajón.

— Pero yo quiero ir— gemí frustrada.

— ¿Desde cuándo a ti, Cassie Hill, te gustan las fiestas?— frunció el ceño y luego de unos segundos rió dándose cuenta de lo que pasaba— ¡Tú solo quieres ir a la fiesta por Justin!

— Creo que es obvio— baje la cabeza avergonzada de haberlo admitido, pero después de todo era mi mejor amiga.

— ¿Y si te disfrazas Minion?— me miro divertida.

— Puede ser— asentí, yo amaba a los minions y tenía un overol en mi armario.

— Lo decía de broma— la sonrisa de Miley borro.

— Me voy a disfrazar de minion— sonreí, sabía que Miley no le iba a gusta la idea pero era la única opción que se me ocurría en esos momentos.

— No puedes estar hablando enserio Cassie— negó con la cabeza.

— Oh Miley, nunca he hablando más enserio en mi vida— reí pasando por su costado dirigiéndome a mi armario para sacar mi overol.

...

— ¡Miley apúrate!— grité por segunda ver tocando la puerta del baño, había entrado hace más de media hora y ya me estaba comenzando a hartar.

— ¡Es cinco termino!— gritó ella.

Pero sabía que no iba a ser así, ella se demoraría por lo menos veinte minutos más, suspire sonoramente dirigiéndome a mi cama y sentándome en ella. Después de media hora, Miley se digno a salir del baño con un disfraz de... ¿Qué rayos era eso?

— ¿Qué?— me preguntó al ver que la miraba detenidamente— Vamos Cassie, soy la sirenita— dijo como si fuera lo más obvio del mundo.

— ¿Y dónde está tu cola?— reí débilmente.

— ¿Nunca has visto la sirenita dos?— fruncí el ceño— En la dos Ariel se va a vivir con el príncipe y su hija al castillo, se desaparece la cola— agarró su bolso de su cama— bueno, al menos no la mayor parte del tiempo.

Reí, oficialmente mi mejor amiga estaba loca, pero así la quería. Luego de unos minutos salimos de nuestra habitación dirigiéndonos hasta donde quedaba la fiesta. Estaba bastante emocionada y no era precisamente por la fiesta, nunca me gustaron las fiestas y nunca me gustaran, creo que es bastante obvia la razón por la cual quería ir, me mordí el labio, quería verlo ya.

Cuando llegamos mi mirada se posó en el lugar, estaba bastante decorado, habían pegado arañas de plástico en las paredes, el lugar estaba más o menos oscuro y la gente había sido muy creativa a la hora de escoger su disfraz.

— Iré a buscar a Chaz— me dijo Miley alejándose de mi rápidamente.

Mire a mi alrededor, la gente bailando prácticamente ya estaba ebria ¿Tan rápido? Recién había empezado la fiesta y ya había gente ebria.

¿Dónde estás Justin? Me pregunté mentalmente. Mire hacia la entrada y vi a Chaz parado a un costado, se había disfrazado de Príncipe, sonreí, se veía bastante gracioso.

— ¡Chaz!— lo llame, él se volteó y cuando vio que era yo la que lo llamaba se acercó a mí— Hola —salude tímidamente.

— Hey— medio sonrío, fruncí el ceño, estaba algo raro— Lindo disfraz— dijo sarcásticamente.

— ¿Sabes dónde está Justin? No lo encuentro por ningún lado— decidí ignorar su actitud y pregúntale por Justin.

Él suspiró y miro para otro lado.

— No... no lo sé

— Si lo sabes— dije rápidamente. Claro que él sabía, era su mejor amigo, además sabía que me estaba mintiendo. Él no era de ponerse nervioso por cualquier cosa.

— Él... el no va a venir Cassie— me miró nuevamente pero esta vez serio, mi sonrisa se fue desvaneciendo lentamente.

— ¿Qué?