Del odio al amor hay un solo paso.

Te extrañé - Fin.

En la casa de la hermosa pareja, los chicos seguían aún reunidos hablando y riendo de la más normal, era bonito estar con tus amigos de vez en cuando. Pero una idea se le ocurrió a Juvia... el nombre de su hijo.

-oye Gray...¿que nombre le pondremos a nuestro hijo?- Juvia no podía dejar de pensar en que tenían que escoger un nombre para su pequeño, sentía la necesidad de ya tener todo claro.

-no lo sé Juvia...mejor escogerlo tú, cualquier nombre que puedas escoger me gustará...

-¿no! si es el nombre de nuestro hijo los dos tenemos que escogerlo- pero aquel nombre debían escogerlo los dos.

-bueno bueno...¿que te parece Filip? cuando era pequeño siempre quise llamar así a mi hij...

-no me convence.

-¿y si se llama Pancracio?- interrumpió Sting que se había callado todo este rato. Yukino lo miró con una sonrisa falsa.

-¿amor?

-¿dime cariño?

-cuando tengamos un hijo yo escogeré el nombre...

-¿YASsÉ! ya sé ya sé ya sé ¡YAAAA SÉ!- Juvia se entusiasmó tanto con la idea que tenia en mente que empezó a saltar de la alegría.

-¿cúal es Juvia? 

- ¡ Gray Junior !

-bueno, sigamos buscando nombres...

-bien bien- contestó la chica con una cara de determinación.

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-Oye Gajeel...¿no crees que es bonito andar por el parque? es tan relajante y... es bueno salir de vez en cuando a tomar un aire un poco más puro.

- claro, si, ajam- en realidad, lo único que quería hacer el chico era salir de ese lugar, le parecía tan aburrido..-¿ pero sabes cómo sería mucho más divertido?

-¿có-cómo?

- si lo hiciéramos acá... no sé, sentir la adrenalina de que alguien nos descubra...

-¡claro que no! estas loco... maldito pervertido.

-bueno un pervertido maniático al que amas- juntaron sus labios en un beso que tímidamente fue correspondido por la chica ¿que haría sin él y él sin ella?

-claro que lo amo... bueno, creo que ya debemos irnos- Levy agarró de la mano al pelinegro que se encontraba sentado bajo uno de los árboles de cerezo de aquel lugar y partieron su rumbo.

Caminaron por la bonitas calles que tiene Magnolia, era tan hermoso ver las calles coloridas y que cada una tenga aunque sea un pequeño jardín delantero que pueda mostrar un poco de verde de la naturaleza, pero hubo una casa de la que Levy al percatarse se deprimió rápidamente.

-oye enana...¿esa no es la casa de Lucy?

-si...¿hace cuanto tiempo más o menos se habrá ido? no puedo... evitar extrañarla tanto...

-ahora que mencionas a Lucy y de su partida... acabo de recordar que el rosadito me contó que hoy iría a buscar a Lucy...

-¡¿y recién me cuentas!?

- ge-he, perdón perdón, te dije que recién me acabo de acordar- la chica le dió un pequeño golpe en el pecho con una sonrisa.

- jajaja eres un idiota Gajeel...

-¡Levy-chan!- los ojos de la pequeña se abrieron a más no poder y cuando volteó a la dirección en que la estaban llamando sintió que el corazón casi se le salía y Gajeel no pudo evitar sorprenderse igualmente- parece que llego justo a tiempo para verte... cuanto tiempo- la rubia sonrió.