Sobrenatural II: Proyecto omega

Capítulo 20: El niño perdido

Aparecieron en medio de los árboles, en frente del psiquiátrico que servía de base a la Organización.

- Me has engañado, es una trampa - Eric mandó a Axel contra un árbol usando su don.

- No, espera - Axel estaba oprimido contra la corteza robusta - No hay nadie.

- ¿Qué? - Eric dejo de usar su telequinesis.

- Que no hay nadie, se han ido - repitió Axel.

Eric miró de nuevo al psiquiátrico, otra vez estaba allí. Pero era verdad que parecía vacío.

- Vamos - le dijo Axel - tenemos que entrar.

Una vez dentro empezaron a pasar por los solitarios pasillos y ha observar las habitaciones blancas vacías, todo les provocaba un sensación escalofriante. 

- ¿Dónde han ido? - preguntó Eric.

- Me temo que no lo sé - respondió Axel.

- Mierda - Eric soltó una maldición y le dio un golpe a la pared.

- Calma, arriba hay cosas - Axel les teletransportó hasta el último piso, Eric recordó el lugar - han dejado algunas carpetas por aquí.

- ¿Y qué? Seguro que nada nos será útil.

- Mejor esto que nada - Axel cogió unas cuantas carpetas que había en el suelo y las empezó a ojear - Soy informes sobre más niños con poderes, creo que la Organización no los ha encontrado aún.

- Aquí hay más - dijo Eric mientras elevó por el aire otras carpetas hacia él - se lo daremos al señor Ross, encontrarán a los niños.

- ¿De verdad lo crees?

- Sí, ya han salvado a muchos otros - Eric perdió su mirada durante unos segundos - pero, aún así, no sabemos nada del paradero de la Organización.

Eric perdió de vista a Axel. Lo encontró en una esquina.

- ¿Qué te ocurre?

- Es este lugar - respondió Axel, se teletransportaron unos pisos más abajo, hasta unas habitaciones distintas a las que Eric había visto allí - supongo que nunca estuviste por esta zona.

- No

- Esta es mi habitación - los dos entraron y se notó la diferencia.

- Aquí hay color - Eric se sorprendió - ¿por qué yo no pude tener esta habitación?

- También era blanca hasta que comencé a pintar cada rincón de azul, me gustó más - Axel se quedó mirando la pared.

- ¿Por qué les ayudabas? - Eric se acercó a él - ¿Por qué ayudabas a la Organización si no te gustaba?

- Porque no vi otra opción - Axel se sentó sobre un pequeño sillón - Me abandonaron Eric.

- ¿Qué?

- Mis padres me abandonaron - explicó - cuando se desarolló mi don me ocultaron como si fuera una aberración del mundo, me miraban con unos ojos de desprecio que me han marcado de por vida.

- Lo siento mucho.

- No tienes porqué - Axel le retiró la mirada - Llegó un día en que me teletransporté lejos de casa para fugarme, apenas controlaba bien mi poder así que no llegué muy lejos - su mirada se endureció - y me encontraron, me hicieron creer que volvíamos a casa pero me dejaron en una casa de acogida, se deshicieron de mí como si no fuera su hijo.

- Entonces no puedes considerarlos tus padres - Eric sintió que podía confiar plenamente en Axel, le estaba siendo completamente sincero - Te había juzgado mal, Axel.

- No me extraña, tenías razones para ello - agachó su mirada - y siento haber dejado a tu amigo que muriera.

El recuerdo de Tom invadió la mente de Eric.

- ¿Cómo te encontró la Organización?

- Mas bien yo les encontré - respondió - no estaba dispuesto a quedarme en la casa de acogida por lo que no dude ni un instante en teletransportarme lejos, por primera vez controlé mi poder, por primera vez me sentí bien conmigo mismo, sin ataduras - Axel sonrió - disfrute de todo lo que me había perdido durante el tiempo que  mis padres me tuvieron ocultado y lleué a una pequeña ciudad, no tenía ningún rumbo fijo y conocí a Fox.

- ¿Te hizo algo?

- No - se rió - Fox ha cambiado mucho, demasiado, desde entonces.

- ¿De verdad? - Eric se imagino a un Fox menos odiable, algo imposible.

- Al menos a mí me lo parece porque me ayudo cuando un grupo de chicos me querían pegar, estaba claro que nadie se enfrentaría a un chico que controlaba el fuego, me encontró cuando estaba perdido en la vida y me llevó con la Organización, a la que consideré como una nueva familia - Axel estuvo pensativo unos segundos - no me imaginé que llegasen a tener ningún plan malvado, y cuando me di cuenta de mi erro ya era tarde, si me hubiera revelado sin saber que contaría con la ayuda de alguien después habría sido un suicidio.

- Sí, pero aún así te arriesgaste - le dijo Eric - podríamos no haberte aceptado.

- No podía seguir aquí.

- Si nos sigues ayudando todos acabaran confiando en ti - Eric apoyó su mano en el hombro de Axel.

- Siento haberme desahogado contigo de pronto - dijo él - pero necesitaba sacar todo el rencor fuera.

- No importa, tienes suerte de que sepa escuchar - sonrió, pero entonces pensó en algo - Mis padres...

- ¿No los recuerdas todavía?

- Sí, bueno...a medias pero me acabo de dar cuenta de que no me he parado a pensar en ellos.

- Tampoco habrías podido, estabas preocupado por tu hermana - le dijo - Seguro que ahora la Organización está llevando acabo el proyecto omega - Axel vio la cara de interés de Eric - apenas sé más que tú.

- Mi hermana es importante para ese proyecto.

- Sí - afirmó Axel.

- Tenemos que volver Axel, mi hermana corre peligro - Eric comenzó a preocuparse - No puedo permitir que se la lleven de nuevo.

Axel se puso en pie y no tardo en hacer que se desvanecieran de aquel lugar.