Capitulo 2- ¿Eres Natsu?

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Poco a poco Lucy fue abriendo los ojos y observó extrañada donde se encontraba. Era una gran cama en una amplia habitación. Movió los brazos y vió como estaba encadenada a esa cama. Es más, no sentía su poder mágico, así que supuso que era a causa de esas esposas.

El miedo se apoderó de ella. Lo último que recordaba era a Natsu...porque, era el ¿verdad? No sabía porque tenía ese aspecto y como pudo atacar a sus propios nakamas. Un sonido la sacó de su trance.

Levantó su mirada con temor y vió en la puerta a Natsu.

-¿P-Por que has he-hecho esto?-preguntó nerviosa.

-Porque quiero.

-¿Que te ha pasado? Tu no eres asi.

En un instante el estuvo delante de ella y la agarró de las manos.

-Yo siempre he sido asi, así que no te sorprendas tanto. Y ahora tu me perteneces.

De repente Natsu unió sus labios en un beso exigente y apasionado. Se separó de ella tras un momento y la miró fijo a sus ojos asustados.

-Y como me perteneces no me desobedecerás.

-¿Por que te tendría que obedecer?-preguntó ella algo desafiante.

-Porque...a ver...pensemos... si no me obedeces, tendré que volver a ese gremio y destruirlo definitivamente-la amenazó sin ningun remordimiento.

Ella abrió sorprendida y asustada sus ojos. Definitivamente ese no era el Natsu que ella conocía. ¿Donde estaba el Natsu que la invitó a unirse a Fairy Tail? ¿O el Natsu que la defendió a ella y al gremio del ataque de Phantom? En definitiva, ¿donde estaba el Natsu que se preocupaba por sus nakamas?

-Y ¿bien? ¿Que contestas?

-¿Por que me haces esto?-preguntó mientras dos lágrimas salian de sus tristes ojos.

-Yo tengo todo lo que quiero, es asi de simple. Ahora contestame, o me obedeces o iré a destruir a ese gremio, ¿que eliges?

Ella agachó su mirada triste y pensativa. Ella no quería que nadie de su gremio saliera herido, eso no lo permitiría, jamás. Si se tenía que sacrificar a ella por los demás, asumiría la responsabilidad.

-No tengo más remedio.

*En el gremio*

Todos estaban doloridos tras el ataque de Natsu. Como podían se curaban sus heridas.

-¿Ese era Natsu?-preguntó Lissana triste.

-No, almenos no el que todos conocemos-contestó Mackarov- debemos acabar con el.

-Pero maestro, no podemos. Es Natsu- replicó Erza.

-El nos ha atacado, nos ha herido y se a llevado a la fuerza a Lucy, ¿que pretendes que haga?

-Podemos intentar buscar una solución, si mi teoría es cierta, ese Natsu surgió cuando se abrió el libro. Habría que buscar como devolverle a la normalidad- propusó Titania.

-Bueno, pero si no funciona, no habrá más remedio-decidió finalmente Mackarov.

-Yo puedo investigar archivos y a ver si puedo encontrar una solución-propuso Levy.

-Si, Levy empieza cuando puedas y Gajeel ayudala. Luego Erza, Gray, Wendy y Mira, teneis que ir a buscar a Lucy. Los demás arreglaremos el gremio y los buscaremos información- ordenó el maestro.

Todos se pusieron en marcha. Levy y Gajeel se fueron a la biblioteca mientras Erza y compañía salieron en busca de Lucy.

-¿Creeis que encotraremos a Lucy-san?-preguntó Wendy triste.

-Eso tenlo por seguro-afirmó firme Erza.

*Con Lucy*

Natsu se acercó a Lucy y la volvió a besar apasionadamente. Lucy no sabía que hacer. Era verdad que sentía cosas por Natsu, pero ese no era el Natsu que ella conocía. Sabía que no podía hacer lo que quería, que la tenía en la palma de su mano. No quería que sus amigos fueran lastimados así que haría lo que el quisiera.

Natsu comenzó a descender por su cuello dejandole marcas, posesivamente. Cuando llego a su pecho arranco su camiseta junto a su sujetador, dejando expuestos sus grandes pechos. Natsu se deleitó con las vistas antes de coger un pezón con sus dientes y comenzó a succionar.

Entre su dilema emocional, Lucy no podía negar que lo que le estaba haciendo le causaba un placer que no podía describir, pero aun así no se sentía agusto así. Ella quería que eso se lo hiciero su Natsu, no aquella persona que estaba encima suyo ahora.

Natsu se entretuvo con su pecho. Mientras succionaba con su boca un pezón con su mano masajeaba el otro. Se sentía tan bien. El placer que sentía en ese momento era inimaginable. Nunca pensó que esa mujer rubia le daría tanto placer. Y lo que aun le quedaba.

Lucy se retorcía, pero no podía moverse apenas. Esposada en la cama y con el peso de Natsu encima suyo, no le dejaba una gran movilidad.

Natsu descendió por el cuerpo de Lucy y llegó a su zona intima. Le quitó sus pantalones junto a sus bragas y se abalanzó a su intimidad. Lamió su clitoris y lo mordisqueó dandole a Lucy un gran placer, haciendo que gimiera como nunca lo hubiese imaginado.

Se comezó a excitar con cada lamida y siguió hasta que Lucy se corrió en su boca. Relamió todo. Era delicioso. Solo con pensar como se sentiría dentro de ella se excitaba aun más.

Se colocó en posición y la penetró. Lucy sintió dolor pero tambien placer. Era contradictorio. Natsu fue aumentando su ritmo, penetrandola más a fondo cada vez. Con cada estocada se acercaban al clímax. Tras las útimas Natsu se corrió al mismo tiempo que ella en su interior y se desplomó encima suyo.

Lucy respiraba acelerada mientras veía la cabellera rosa. Se sentía mal aun con el placer que sintió. No creía que fuera correcto, y se sintió egoista con sentir ese placer.

De repente la barriga de Lucy sonó demandando comer algo.

-Tienes hambre, ¿verdad?-dijo Natsu algo divertido.

-Mph-masculló ella.

Natsu se levantó y se puso su ropa. Abrió un armario y sacó alguna para Lucy. Se acercó a la cama y la desenganchó de las cadenas dejandole las esposas puestas para que así no pudiera usar su magia. Le dió la ropa y Lucy se vistió.

-Acompañame, iremos al comedor a comer algo-le informó el.

-Vale.

Se adentraron por el pasillo hasta llegar al comedor donde se sentaron y comieronn la comida que se encontraba allí. Ella seguí con la mirada asustada mientras comía. De repente se escuchó la puerta y de allí apareció Zeref, quien al ver a Lucy junto su más fuerte demonio no pudo evitar mirar de manera demandante a Natsu exigiendo una explicación.


Lo que END desea [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora