Epílogo

11.1K 567 67
                                    

-Feliz Cumpleaños!

Abrí los ojos espantada y sonreí al ver a mis amigos frente a mí con un pastel lleno de velas.

-Gracias chicos. - susurré levantándome -

-Sopla las velas. - animó Rose y la obedecí -

-Ahora a desayunaaar! - exclamó Luke bajando con el pastel -

Todos lo seguimos riendo y nos sentamos a comer, con todos me refiero a Rose, Luke, Chad y Celeste. Luego de comer mi rico pastel de cumpleaños procedí a ser abrazada por cada uno.

-No puedo creer que ya tengas diecinueve. - lloriqueó Luke -

-Luke, tu también los tienes no dramatices. - me reí abrazándolo con más fuerza -

Luke se ha vuelto mi confidente en estos últimos cuatro meses del año, además de Rose, los tres estábamos en etapa de post depresión, nuestras parejas estaban a kilómetros de distancia y era bastante triste.

-Sólo me siento un poco emotivo hoy. - se encogió de hombros -

-No seas tonto. - besé su mejilla separándome - ¿Quién está listo para un emocionante día de clases?

-Yo no. - gruñó Rose - Tengo que reunirme en la biblioteca con la escoria que tienes al lado para terminar un trabajo.

-¿Me has llamado escoria? - exclamó Luke - Perra.

-Respétame!

-Y TU A MI TAMBIEN. - rodee los ojos divertida -

-Yo tengo que ir al dentista. - bufó Chad - Y Celeste vendrá conmigo.

-No, claro que no. - se rió ella - Tengo que ir a hacer un trabajo Chad, lo sabes.

-Que amigos tengo. - bufé - Me abandonan en mi cumpleaños.

-Tienes a Blake. - señaló Luke parando de discutir con Rose -

Blake era un labrador dorado de seis meses, me lo había regalado Jared para acordarme de él. El cachorro ya no tan grande estaba acostado en la alfombra observándonos con sus grandes ojos cafés.

-¿Quién es el bebé de mami? - comencé arrodillándome frente a él - ¿Quién tiene una mami de diecinueve años? - el perrito meneó su cola levantándose y se lanzó sobre mí - Tu lo eres, ¿Verdad? Tú lo eres. - me reí al sentir sus lamidas en mi cara -

-Iugh, en serio necesitas a Jared. - comentó Luke y lo miré mal - Estoy disponible.

-Me das asco! - chilló Rose empujándolo -

-TU ME DAS MAS ASCO! - gritó él - Iré a alistarme.

Subí con mi pequeño en brazos para también ir a vestirme. Era un verdadero fastidio tener que ir a clases el día de tu cumpleaños. Como en Australia siempre hacia calor opté por un short de jean y una camisa sin mangas de tela transparente, unas lindas sandalias marrones. Tomé mi bolso y bajé las escaleras junto a Rose, los cinco salimos de la casa y subimos a la camioneta de Chad.

Llegamos a la universidad y quise esconderme debajo de la tierra.

-¿Rose podemos volver a casa? - le pregunté a la rubia -

-No. - respondió divertida - Toda esta gente te quiere, y por ellos te felicitará.

-No conozco ni a la mitad. - bufé bajando del carro -

-Aprovecha los regalos y sonríe. - gruñó y comenzamos a avanzar por el estacionamiento -

Quince minutos después, estaba sola, en un mar de gente que no conocía felicitándome.

¿Again?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora