Capitulo 31

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-Jared apúrate – rogué por como quinta vez a mi novio –

-Ya estoy listo – rodo los ojos mientras yo me veía en el espejo – Te ves preciosa

Llevaba puesto un vestido negro ceñido a mi cuerpo y unos zapatos de tacón negros, mi pelo amarrado en una cola alta perfectamente arreglada, poco maquillaje y todo lo combine con unos collares, pulseras y zarcillos plateados.  Jared, como siempre hermoso, llevaba una camisa de botones negra, arremangada en los codos, vaqueros oscuros y zapatos negros, su pelo arreglado de forma desordenada y oliendo a su deliciosa loción.

-Gracias – respondí sonriente girándome hacía él – Vamos, Vanessa nos espera

-Me arrepiento el día en que tu y mi hermana se hicieron amigas íntimas – reí mientras lo tomaba de la mano y lo arrastraba fuera de la habitación, mientras caminábamos por el pasillo deslizo su mano por mi espalda hasta mi trasero y lo apretó, por lo que me pare en seco –

-¿Algún día dejaras mi trasero en paz? – susurré golpeándolo en el pecho –

-Lo dudo, es muy esponjoso – me reí mientras me acercaba a él y me besaba suavemente –

-Idiota – me sonrió y tomo mi mano para jalarme por las escaleras hasta la sala, donde su madre y padrasto estaban sentados en el sofá, me sonrieron –

-Hanna estas preciosa – me alagó Sara, la mamá de Jar – Tu te ves bien Jared

-¿Qué? – chilló mi novio - ¿Solo bien? Si me veo mejor que ella – me reí ante sus pucheros –

-Es la verdad hijo – respondió David, su padrastro – Te ves bien, pero claramente, ella te sobre pasa

-Pff, envidiosos – susurró y reí más fuerte – Cállate

-Jar, ya – sonreí hacía él y me devolvió el gesto –

-Que bellos son – murmuro su madre sonriendo –

-Hanna! – chilló Vanessa saliendo de la cocina seguida por Greg – Que bella te ves

-Gracias, tú también te ves preciosa

-Tu Jar, te ves bien – dijo su hermana –

-¿Qué? Ustedes todos están en mi contra, es eso – declaró cruzándose de brazos –

-Sí, seguro que es eso – se burló Greg - ¿Nos vamos?

-Claro – sonreí y nos dirigimos a la puerta después de despedirnos –

-¿De verdad sólo me veo bien? – murmuro Jared a mi lado –

-No bebé, te ves precioso – sonrió cuando lo bese y me jalo al auto -

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-Jar, paremos, quiero tomar algo

-Está bien Ángel, yo me sentare un rato – asentí y camine con cuidado entre la masa de cuerpos hasta el bar, le sonreí al chico y le pedí un agua y cuando voltee tenía a un castaño besándome.

Me separé rápidamente mirándolo sorprendida a lo que él me sonrió y me acorralo contra el bar.

-¿Estás loco? – chillé mientras lo golpeaba con fuerza hasta quitármelo de encima, se encogió de hombros y se perdió entre la gente, gire mi cabeza para encontrarme a Jared de brazos cruzados mirándome furioso – Jar…

-¿Me dirás de nuevo que no es verdad? Porque esta vez sí lo vi – se dio vuelta y comenzó a caminar lejos -

-Pero es mentira, yo jamás te engañaría – exclame mientras lo seguía fuera del lugar –

¿Again?Where stories live. Discover now