Almost Married. |z.m|

Capítulo 38.

  Nadelyn.

 Creía en Zayn, lo amaba con todo mi ser. Me propuso matrimonio y no pude negarme, él era el tipo de chico con el que siempre había soñado.

— ¿No somos muy jóvenes aún? — le cuestione mirándolo a los ojos
— Sí, lo somos —sonrió—. Pero no será tan pronto, una buena fecha sería el día que cumplas la mayoría de edad ¿no crees? — tomó mi mano y me miro con una sonrisa.
— Eso sería lindo — le respondí sonriendo.
— Y para entonces estarás recuperada y podrás caminar hacia el altar — besó mi frente.

Nos acurrucamos en la cama, estuvimos abrazados, acariciándonos y besándonos un largo rato. Me encantaba sentirlo cerca de mi, y si no era así... Me sentía incompleta. Un tiempo después Liam entró en la habitación, Zayn se sentó a la orilla de la cama y me ayudó a sentarme.

— Veo que todo está bien — Liam sonrió mientras se recargaba en el marco de la puerta.
— Perfecto — Zayn me miró, acaricio mi mejilla y sonrió.
— Me alegra que estén juntos de nuevo — se acercó y se sentó a mi lado.
— Vamos a casarnos — Soltó Zayn la noticia y tomó mi mano.
— ¡¿Qué?! — expreso Liam sorprendido.
— Es lo que queremos, Liam — le sonreí.
— Pues...— Liam trataba de decir algo, pero no le salían las palabras.
— Amigo... —Zayn miro a Liam y empezó a decir—. Amo a tu hermana como un loco, la amo sonrió.
— Hablarán con mi padre ¿cierto? — Liam arqueó una ceja.
—Sí, y no creo que se niegue — dije convencida y mostré una sonrisa.
— Espero que sean felices —Liam comentó y nos dedico una sonrisa.— Si lo que quieren es casarse... —suspiro.— Los apoyo — sonrió.

Liam salió de la habitación y Zayn me ayudó a ir en la silla hasta la oficina de mi padre. Él estaba dispuesto a pedirle formalmente mi mano a mi padre. Pero me sentía nerviosa, de una forma extraña.

Tocamos la puerta un par de veces hasta que mi papá nos abrió, hizo un gesto de confusión al vernos juntos y luego nos invitó a entrar. Nos sentamos frente a él.

— ¿Qué te trae por aquí, Zayn? — lo miró un poco confundido.
— Viene a ver a Nadelyn — respondió y note que esta un poco nervioso.
— Pensé que ustedes...—mi padre alargo.— Seguían peleados — me miró
— Ya no más — aclaré y sonreí.
— Señor Payne... —Zayn comenzó a hablar.— Sé que yo lo que menos quería era estar cerca de su hija, sé que le pedí que rompiera el compromiso entre nosotros dos y que me negaba a creer en el amor. Pero durante este tiempo que he pasado con Nadelyn he aprendido muchas cosas, cosas que ignoraba y que ahora me han cambiado —suspiro.— Señor Payne yo... —se lamió los labios—. Yo amo a su hija, la amo como un loco —rio nervioso—. Ella es mi todo —me miró y sonrió—. La amo con todas mis fuerzas, la amo a pesar de todo, la amo como ya no se ama... La amo como nadie más la amaría —volvió a mirar a mi padre—. No me importa el dinero... Con Nadelyn tengo una fortuna, tengo todo lo que siempre he querido. Mi madre me enseñó algo muy importante: "Escucha siempre a tu corazón"... Y mi corazón me dice que debo estar al lado de Nadelyn el resto de mi vida. Es por eso que estoy aquí, señor. Yo... Yo quiero pedirle su permiso para casarme con Nadelyn.

Lo miré y sonreí, Zayn me tomó de la mano. Mi padre no decía nada, nos miraba a ambos... Supuse que estaba buscando las palabras correctas para decir: "Si".

Mi padre nos miró una vez más, sonreímos esperando su respuesta y él se llevó las manos a la cara, suspiró y pasó saliva.

— ¿Hay algún problema señor Payne?, porque pensé que se alegraría — Zayn frunció el ceño.
— No es sólo un problema... —respondió mi padre.— Son muchos — nos miró serio.
— No entiendo...— dije muy confundida.— Hace algunos meses estabas dispuesto a casarnos a la fuerza y ahora... ¿Ahora no nos quieres juntos? — fruncí el ceño.
— Zayn...— mi padre miró a Zayn—. Deberías hablar con tu padre, no creo ser la persona indicada para decirte esto.
— Si habla de la situación en la que se encuentra mi familia...—suspiro.— Estoy al tanto de ello
— ¿Situación? —miré a Zayn confundida.— ¿Cuál situación?
— Mi padre declaró a su empresa en bancarrota — pasó saliva
— ¿Qué? ¿Por qué no me habías dicho? — le miré esperando una respuesta.
— No quería que te preocuparas, pecosa — acarició mis mejillas.
— ¿Y es por eso que no permites que nos casemos? — miré a mi padre totalmente incrédula.
—Sí —confirmo.— Incluso impediré el matrimonio de tu hermano. Al casarte con Zayn, o Liam con Waliyha... Sus problemas serán también tuyos, y declararse en bancarrota no es cosa simple.

Fruncí el ceño, apreté fuerte la mandíbula y antes de que pudiera hablar... Zayn lo hizo.

— No me interesa su dinero, señor Payne — frunció el ceño.
— Pero no puedo permitir que mi hija se case con alguien...—miró a Zayn.— Con alguien de clase social baja — no podía estar creyendo lo que mi padre decía.

No podía estar más enojada... ¡¿Es que acaso mi vida no me pertenecía?!

Miré a mi padre tan furiosa que Zayn me tomó de la mano para calmarme, si no me puse de pie fue por mi condición. Pero eso no significaba que me quedaría con los brazos cruzados.

— Papá...—respire y dije: —¡Estoy harta de que quieras controlar mi vida! — le grité furiosa.
— ¿Sabes qué quieres hacer con ella?—respondio—.  ¡NO! No sabes ni quién eres — me miro frunciendo el ceño.
— Sí lo sé. Soy Nadelyn Payne y quiero terminar de estudiar para casarme con el chico que amo — respondí conteniendo la mirada con mi padre—. ¡Eso quiero y no lo vas a impedir! —volví a gritar.
— Señor Payne, con todo respeto...—comenzó a hablar Zayn—. No creo que lo que haga sea lo correcto.
—Es a ti a quien solo le interesa el dinero, padre — fruncí el ceño.
— ¿Disculpa? —alzó las cejas incrédulo por lo que había dicho. Sus verdades.
— Sacrificas la felicidad de tus hijos —empecé—. Por un montón de sucios y estúpidos billetes. ¿Qué clase de padre eres? — lo mire con cara de pocos amigos.
— Nadelyn...— Zayn trataba de calmarme.
— No quiero estar más aquí, no teniendo un padre como tú — lo miré frunciendo  el ceño.

Le di la vuelta a la silla de ruedas y Zayn se puso de pie para ayudarme, mi padre se paró frente a mi.

— Estás acostumbrada a los lujos, Nadelyn. —me dijo mirándome—.  ¿Estás dispuesta a renunciar a todo esto por alguien como Zayn? —frunció el ceño 
—Zayn vale mucho más que todo esto y que tu estúpida empresa
— ¡Entonces vete! ¡Pero no vuelvas cuando seas una muerta de hambre! —me gritó.
—Le aseguro que ella estará mejor conmigo — Zayn le respondió mirándolo a los ojos. 

***
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