- Noche 2; 4 -

7.8K 980 166
                                    

Si la mansión de Jongin era grande, la de Wu Yifan era gigantesca. Va abriéndose paso por el salón entre decenas de personas que lo saludan como si lo conocen, o le dirigen miradas interesadas si es que no. El híbrido va atrás, cerca, pegado a él con su cola lo más quieta posible y sus orejas apuntando hacia adelante. La mayoría sabe quién es él, y he ahí además la razón del por qué los ojos se quedan pegados en el chico de distintas formas; varias extrañadas, algunas enternecidas, otras recelosas, unas cuantas fastidiadas. Pero al más alto no le podrían importar menos los otros invitados; por el momento solo le interesa que su chico se encuentre cómodo. Lo cual no está pasando.

Esperan en un lado con menos muchedumbre uno frente al otro, un mayordomo se les acerca ofreciendo comida, pero Jongin la rechaza y Kyungsoo lo imita, aunque cuando el mozo ya se ha ido, solo segundos después Jongin escucha el suave y bajo rugir del estómago de su híbrido.

—¿Por qué no comiste? —inquiere con el ceño fruncido, y el menor deja caer sus orejas y su cabeza.

—Jon-Jongin... —El más alto toma su mejilla y lo mira fijamente a los ojos, transmitiéndole un lo siento por haber parecido más serio de lo que debía; aunque en verdad, si Kyungsoo tenía hambre debió simplemente comer.

Kyungsoo traga duramente y exhala, pero de todas formas el hombre se siente orgulloso de que su hibrido haya dicho su nombre. Jongin le sonríe muy delgadamente, acariciándolo su mejilla con su pulgar, haciendo que los ojos caídos de Kyungsoo se cierren disfrutando. La música en el fondo avanzando parsimoniosamente, a esas alturas ya se han cumplido las 24 horas de estar con aquella pieza de arte que roba y extasía su mente. Se siente como si fuese el fin del séptimo día, pasando de la admiración de la belleza exterior a la adoración de la riqueza sentimental que provoca el híbrido en él.

Amor.

La sombra de un hombre alto y de estructura modelo se acerca a ellos, Kyungsoo abre sus ojos al notar que su amo ha retirado sus cariños.

—Kim Jongin, tanto tiempo de no verte, amigo —saluda el hombre con una voz más profunda que la de Chanyeol, de apariencia fría y seria. Jongin sonríe ampliamente y estrecha la mano que le es tendida con seguridad.

—Wu Yifan —saluda— tienes razón, ha pasado un tiempo ya.

Yifan llama a un mozo con un tronar de sus dedos y de inmediato aparece uno dando pasos largos hasta ellos. Después de pedirle algo para beber, éste se retira presuroso.

—Me alegra que hayas podido venir, Jongin. —Dice ahora con naturalidad, poniendo una mano en su espalda de forma amistosa y su imagen de hombre frio queda reemplaza con una que ve un buen amigo, mientras Kyungsoo solo espera y observa la escena frente a él.

Intercambian palabras sobre novedades del minuto, negocios, tendencias de la gente últimamente, moda y cosas por el estilo, hasta que Yifan posa sus ojos en Kyungsoo y los abre un poco más, con una mirada amigable. Justo en ese instante llega el mozo con copas de vino tinto y cada uno de los hombres toma una –menos Kyungsoo, claramente.

—¿Tuyo? —pregunta bebiendo un sorbo de prueba de su copa.

—Kim Kyungsoo —responde con una sonrisa afectuosa hacia su híbrido, orgulloso, lleno de adoración.

—Vaya, te felicito en verdad —dice Yifan dando unas palmadas en su hombro y con la sinceridad de su felicitación en la profundidad de sus ojos, que no cualquiera podría notar.

No pasa mucho antes de que se acerquen dos mujeres tomadas del brazo con una copa de vino en sus manos libres, ambas atractivas, pero ni siquiera en lo mínimo para Jongin. Una es teñida de color rubio, con su cabello totalmente liso en una melena, usa un vestido blanco ajustado y sedoso, con unos cuantos accesorios dorados que quedan bien con la tonalidad pero son demasiado excedidos, piensa de inmediato, pero reconoce la ropa como las de ese diseñador de nombre similar al suyo; Kim Jongdae. La otra es castaña y lleva el pelo largo con ondas, un vestido más simple y rojizo pero común. Jongin conoce a esas mujeres y no le agradan para nada.

1 Minuto y 3 Noches; KaisooWhere stories live. Discover now