Capítulo 13

110 17 6
                                    


- ¡___!

- Cállate y vete, no te quiero ni ver.

- Escúchame - insiste.

- ¡No Kai! Como no te vayas llamaré a la policía.

- Pero...

- Fuera - digo señalando la puerta.

Kai obedece y yo me quedo mirando al suelo. Por supuesto que no llamaría a la policía, pero no quiero saber nada de él, al menos por ahora.

Las lágrimas ahora caen por mis mejillas, me siento sobre la cama y me desahogo entre mis manos. Al levantar la vista, miro hacia mi almohada, y veo que hay un sobre azul.

Lo abro y...

"Cómo no quieres ni verme te dejo esta carta, mi niña.

Antes de explicarte todo este malentendido, ____, yo... No sé como empezar esto; las manos me tiemblan de los nervios que siento ahora mismo, el corazón me late a una velocidad anormal. Intentaré ser lo más honesto posible, es lo mínimo que puedo hacer...

Nuestra historia, tan corta pero tan bonita ante mis ojos...

Todo comenzó cuando mis padres me anunciaron que tendríamos nuevos vecinos; la idea no me agradó, pues me gustaba la soledad: ser hombre lobo no es fácil. Pero cuando me dijeron que en ella viviría una chica, me interesó más la idea. Sé lo que estarás pensando; pero espérate, sabes que no soy un don Juan. Yo solo tengo ojos para ti, aunque pienses que no, mi corazón no miente. Eres la única por la que mi temperatura se pone por las nubes.

Cuando el día tan esperado llegó, algo nervioso fui hacia tu casa: presentía que algo iba a pasar. Y vaya si pasó, el amor de mi vida se presentó ante mis ojos. No sólo eres guapa ____, eres gentil, divertida, tus labios son tan deliciosos... Dios, necesito céntrarme o jamás acabaré esta carta.

Los días pasaron, y cada vez tus besos se me hacían tan necesarios como el aire, tus caricias eran el único tacto que necesitaba mi corazón para latir, tu sonrisa era mi felicidad... _____, eres la razón por la que quiero vivir.

Entiendo que no me quieras hablar, nisiquiera ver... pero me duele tanto, no hay día desde lo ocurrido que no llore. Me duele tanto verte así por mi culpa, me siento una escoria, un imbécil: he hecho llorar a mi princesa, la única que roba todos mis pensamientos y suspiros. Te amo tanto, tanto, taaaaanto...sin ti siento que pierdo las ganas de todo. Te mentiría si te dijera que no he hecho tonterías, pero de la que más me arrepiento es de habarte echo sufrir; pero lo que viste no es lo que en verdad piensas. Tienes que creerme, confiar en mi, pequeña.

Fuiste la única que en ningún momento me miró raro por lo que soy, la que me amó sin condiciones. Quiero pensar que todo esto no ha acabado... que lo nuestro... sigue vivo.

Por favor, si quieres saberlo todo y confiar en mí... ven a mi casa. Prefiero contártelo en persona, te estaré esperando. Si no vienes, entenderé que no quieras saber nada de mí, aun así no me detendré: eso tenlo por seguro."

Las hermosas palabras de Kai se repiten en mi mente una y otra vez. Cada frase, cada palabra...: Eres la única razón por la que quiero vivir.

¿Y sí era verdad?

Pensaba que después de leer esta carta no tendría ganas de verle, y mucho menos de ir a su casa. Pero aquí estoy, ante el espejo recogiéndome el cabello, dispuesta a salir por esa puerta.

Es inevitable lo que siento por este chico, lo quiero, lo quiero mucho, y necesito tenerlo en mi vida.

...

Creo que llevo como 5 minutos frente la casa de Kai, jugando con mi vestido mientras intento parar de llorar, para que Kai no me vea así.

Ya está, sin pensarlo, pulso el timbre.. Y a los pocos segundos, me encuentro con el rostro de el chico que más amo.

Sin poder contenerme más, aprieto mis ojos y las lágrimas salen sin pensar.

Kai corre a abrazarme y yo me aferro a él como nunca.

- Lo siento pequeña, lo siento de verdad, te amo, te amo, perdóname, perdóname.

- Kai..

- Perdóname porfavor ___, perdóname.

-Kai..

- Lo siento de verdad, te quiero, te quiero.

- Kai escúchame..

Le aparto y veo como sus mejillas se inundan de lágrimas.

Ya está, no puedo más.

Tiro de sus brazos y pego mis labios a los suyos. Callando sus súplicas para que le perdone.

Amo a este chico, lo necesito en mi vida. ÉL es mi vida.

Al separarnos, él me agarra la cara por mis mejillas y se limita a besarme cada lágrima que baja por ellas.

- ___, te amo.

Por primera vez desde que ví el rostro de Kai, miro a mi alrededor y me doy cuenta de que aún estamos en plena calle frente a su casa.

Kai se dá cuenta y me coge de la mano para luego llevarme al interior de su casa.

Él está guapísimo, lleva un smoking negro,combinado por una preciosa corbata.

...

Me lleva de la mano por el vestíbulo y me conduce hacia al patio.

Está adornado con farolillos y hay una mesa roja perfectamente decorada en el centro.

Kai me lleva hacia ella y me separa la silla para que a continuación pueda sentarme. El olor de las velas inunda mis fosas nasales y es perfecto.

- Porfavor, aunque te cueste, olvida todo lo que ha pasado por esta noche, solo esta noche.

- De acuerdo.




Un chico misterioso (KAI & TÚ)Where stories live. Discover now