El acenso de Milk. Parte IV

De vuelta al templo.

Después de la fiesta de Ox Satan por el bebe de Videl, Milk y Goku decidieron emplear nuevamente su entrenamientos con el senor Wiss al templo. Solo que estaba vez Bulma los acompanaria al igual que Trunks y Goten. Milk queria entrenar a su hijo y sacarle un mayor potencial. Wiss acedio encantado ya que Milk le prometio un banquete solo para el. Bills aun seguia en su sueno sumergido, mientras que Wiss se encargaba de entrenar a los tres guerreros. Bulma se quedo facinada por el lugar viendo como sus amigos entrenaban. Milk entrenaba con Goku mientras Wiss le dedicaba tiempo a Vegeta.

Cada vez que el sayayin entrenaba con su esposa se sentía extasiado. Disfrutaba cada golpe que Milk le propinaba terminando acoralando a su esposa en sus brasos. Al verlos Bulma no podia evitar reirse al igual que sus hijos. Cada vez que Goku lograba sujetar a su esposa o deterner algun golpe le robaba un beso haciendola enfurecer.

-Goku deja los juegos y entrenemos.- decia la guerrera agitada atrapada entre los brazos de Goku.

-No puedo evitarlo Milk.- le contestaba Goku riendo viendo a su esposa enojada.

Luego de eso Milk se dedico a entrenar a Goten ensenandole tecnicas que ella misma habia creado para aumentar su rapidez. Goku se sentaba debajo de un arbol en el valle viendo como su esposa de cabello rubio entrenaba a su hijo sin evitar sonreir. Milk se habia convertido en una gran guerrera, podiendo controlar poco a poco mas sus poderes. Vegeta entrenaba a Trunks de la misma manera, ensenandole tecnicas para mejorar su velocidad.

Luego de comer en abundancia en el comedor del gran templo. Bulma se hacerco a Milk algo sonrojada mientras ella recogia los platos.

-Milk...- comenzo la peli azul algo apenada.

-¿Qué susede Bulma?- pregunto Milk sin entender.

-Queria pedirte un favor.- comenso Bulma muy nerviosa.

-Si claro lo que sea.-

-Quiero...quiero que me ensenes a cocinar.- dijo esta sin mirarla a la cara.

Milk sonrio ante la petición de su amiga. Imaginaba que lo hacia para agradarle mas a Vegeta. No pudo evitar reir y asentir con la cabeza.

-Claro que si te ayudare.- afirmo Milk muy feliz de poder ayudar a su amiga.

-Hay...hay otra cosa se que jamas sere tan fuerte como tu pero me gustaria aprender a defenderme.- pidio Bulma aun mas sonrojada.

-Eso es excelente Bulma. Te entrenare.- dijo Milk sonriendo aun mas.

-Gracias amiga.- dijo Bulma sonriendole al mismo tiempo ayudandole con los platos.

Luego de recoger los platos y despedirse de su amiga Milk se quedo sola en el comedor recogiendo lo que faltaba. La verdad no le gustaba ver nada fuera de su lugar y sabia Wiss merecia al menos que ella lo ayudara por el gran favor que les hacia. Todos habian ido a sus habitaciones menos ella. Al igual que su hijo que se quedaba una aparte junto con Trunks. La idea de traer a su hijo le encanto tanto que le de agradecimiento le preparo a Wiss una tarta de chocolate. No queria estar lejos de su hijo ni mucho menos si tenia la portunidad de entrenarlo.

En ese momento cuando comiensa a poner las sillas en su lugar siente un ki muy conocido en la puerta de la entrada del comedor.

-Viniste a ayudarme Vegeta.- le dijo la guerrera sin mirarlo.

Vegeta salio de la oscuridad curvando una sonrisa mirando a Milk. Aun no podia creer el gran acenso de esta. Con su cabello rubio suelto entre dorado y blanco, esos ojos verdes intensos. Esa fuerza que emanaba de ella que casi le entraba por los poros al sayayin orgulloso. Y hay estaba frente de el a solas siendo presa facil para el.