Razas Encontradas. Capitulo 11

128 14 0
                                    

Capitulo 11

Correr o Enfrentarse

Aquella bestia era horrible, sus ojos de color amarillo infundía un miedo impresionante, su pelaje era negro como la mismísima noche con alguna que otras heridas de donde brotaba sangre con un olor terrible, en resumen era la típica pesadilla donde la protagonista corre por su vida pero al final la bestia la alcanza y es ahí donde termina la pesadilla, pero en mi caso esto no era un sueño terrorífico sino que es la vida real donde aquí la bestia te atrapa y hasta ahí llego tu vida. No sabía qué hacer? si enfrentarlo o correr por mi vida aunque ya esta está perdida, mis manos temblaban y mis piernas flaqueaban por el miedo que estaba sintiendo, que hago yy si grito para alertar a los demás de la presencia de esta terrible criatura?, no mejor no porque no quiero que otro ángel salga herido por tratarme de recatar, entonces no me puedo quedar aquí pegada del miedo, tengo que hacer algo.

Y apenas esas palabras pasaron por mi cabeza decidí correr por mi vida sin importarme nada, plan que fallo porque apenas me moví este me atrapa con sus garras y de un golpe me estampa contra el piso, bueno al menos lo intente y hasta aquí llego mi vida, resinada por lo que era inevitable cerré los ojos para esperar aquel golpe que me apagaría la vida, pero antes de aquel ultimo respiro se diera se me ocurrió que todavía tenía la daga en mis manos y aunque no la se utilizar es muy buena para apuñalar, y sin pensarlo mucho como pude tome la daga con las dos manos y se la clave en una de sus patas, de inmediato me suelta y hace un ruido espenuslante que me pone la piel de gallina, aunque no había tiempo de tener miedo tome la daga y salí corriendo de aquel sitio, sé que ese grito alerto a los muchachos pero yo ya empecé a correr y nada me va a parar.

Cuando pensé que ya lo había dejado atrás pare de correr, estaba muy cansa ya no daba para más, pero cuando me iba a sentar para tomar un respiro, un golpe hace que me valla de boca hacia el piso, ya sabía que era la criatura por sus garras que sentía en mi espalda, ahora si este es mi final, hasta aquí llegue, pienso al no ver una solución.

¿?: Hey bestia atácame a mi si es que puede - dijo una voz masculina descosida para mí, pero gracias a él la bestia se levanta con mucha delicadeza, tanto así que pensé que ni siquiera se estaba moviendo - Que te pasa bestia no quieres luchar o eres un cobarde - eso al parecer enfurece a la criatura haciendo que este de un salto se alejara de mí. Cuando me volteo para ver lo que está sucediendo pude ver a una bestia muerta y a un chico alto y por la sombra se veía que era muy fornido

Alejandra: Gracias por salvarme, ¿cómo te llamas? - dije mientras de apoco me iba levantando del suelo

¿?: Mi nombre no importa, y que hace una linda... pero se detuvo - oye tu aroma se me hace conocido, cómo te llamas? - valla le pregunto su nombre y dice que no importa pero sí importa el mío

Alejandra: y si no te lo quiero decir, porque tú tampoco me quisiste decir el tuyo - es la pura verdad yo no estoy obligada a nada

¿?: Ya veo a lo que juegas niña, está bien como tú quieras - dijo mientras echaba una que otra risita

Alejandra: de que te ríes me lo puedes explicar - dije molesta, a este punto ya no me interesaba acercarme para conocer a este burlón.

¿?: De nada preciosa - dio una pausa - mmm quieres hacer un...

Cristofer: Alejandra dónde estás? - pude escuchar a lo lejos a Cristofer que me estaba llamando

Alejandra: Aquí estoy Cristofer - grite para que me pudiese escuchar

¿?: Que lastima preciosa que nos interrumpieran de esa forma, pero sabes que nos volveremos a ver - y dicho esto se fue

Dominic: aquí esta Alejandra, que paso?, que fue ese espantoso ruido? - pregunta Dominic mientras se iba acercando a mí, pero yo aún no despegaba mi mirada por donde se fue el chisco misterioso

Trilogia de RazasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora