— Max puedes dejar de dar vueltas por favor, me duele la cabeza
— Silencio Kelly
Desde hace un rato estaba teniendo una severa crisis, era un debate interno y no sabía que hacer.
— Por Dios Max, llevas mas de quince minutos con esa playera de Red Bull haciéndola bolita, ¿Qué es lo que te sucede?
— Si una compañera de trabajo te presta algo, tú, ¿Tú se lo llevarías hasta su casa?
— Mmmm depende el contexto
— Sólo responde si o no
— No, no se la llevaría, ¿Porque?
— Está bien, en el refri hay algunas botanas por si le quieres dar a P helado o yogurt, regreso en un momento
Tomé las llaves de mí auto y salí de mi casa, no le quise dar mas vueltas al asunto, aventé la playera en el asiento del copiloto y conduje hasta llegar a cierto lugar.
No iba a mentir, realmente me sentía nervioso, la última vez que lo ví no había sido el mejor encuentro me había hablado mal pero aún así no me sentía molestó con él.
Llegué al lugar y salude a cierta recepcionista que como bien me habían dicho me saludo con coquetería pero yo simplemente lo ignore, subí el elevador, Checo se hospedaba en el piso once, el penúltimo, al llegar salí del elevador caminé y ahora me encontraba enfrente de su puerta, me sentía nervioso, ésto realmente se estaba volviendo extraño, más o menos sabía por dónde iban las cosas y porque me sentía así pero no lo iba a aceptar, no debía.
Tomé un largo respiro y toqué la puerta, la única respuesta que recibí fué el ladrido de Lucas, pasó un momento pero nadie abrió, me estaba poniendo mas nervioso y no podía controlarme, tomé otro largo suspiro y volví a tocar, está vez volví a escuchar el ladrido de Lucas junto a un chillido proveniente de él, después de un rato Lucas comenzó a rascar la puerta pero no recibía respuesta de Checo, por última vez toque la puerta y entonces escuché su voz.
En cuanto se abrió la puerta mi mente se quedó en blanco, mis nervios aumentaron y mi corazón latía demasiado rápido, las palabras no salían de mi boca, simplemente me quedé parado observando.
— Hola Max, ¿Qué te trae por aquí?, pasá
Checo estaba en la puerta con el cabello mojado, una toalla enredada en su cintura y su torso estaba desnudo algunas gotas de agua escurrían por su pecho y su apenas marcado abdomen.
— Ah, yo, yo sólo venía a regresarte ésto pero ya, ya me voy
Extendí mi mano para entregarle la playera pero recibí un fuerte jalón, Checo me había metido a su departamento.
— Quiero hablar contigo y no voy a dejar que te vayas hasta que me escuches, toma asiento ire a cambiarme
Al menos agradecía que se fuera a cambiar, mi mente seguía dando vueltas, no podía sacarme de la cabeza la imagen de Checo y eso me asustaba, ¿Que demonios estaba sintiendo?.
Al rededor de unos cinco minutos regreso Checo y sin decir nada se sentó al lado de mí.
— Lo siento
Fue lo único que salió de sus labios mientras jugaba nerviosamente con sus dedos.
— ¿Por qué?
— Por cómo te hablé, sabes, realmente me fruste demasiado y en mi enojo me desquite contigo, tú que no tenías nada que ver en mi accidente con Lawson, de verdad lo siento
— Te entiendo, creeme que lo hago, yo también tuve el mismo comportamiento que tú incluso un poco peor pero al final del día sólo queda sacar lo mejor de nosotros
^^ Después de la carrera ^^
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