Capítulo 19: Primera noche del nuevo curso.

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Alessia casi tuvo que correr para poder sacar su uniforme, cambiarse y volver al compartimiento con sus dos amigos. De hecho casi llegaban a Hogwarts cuando llegó con ellos. Al detenerse como siempre, todos salieron con sumo entusiasmo de comenzar las clases, las cuales Alex esperaba que no fueran tan aburridas como el año pasado...

Al contrario de los demás años, no fue Hagrid quien llevó a los de primer año a través de los botes, sino la profesora Grubbly - Plank, la misma que el año pasado había reemplazado temporalmente al semigigante. El resto de los estudiantes subieron a los carruajes que eran conducidos hasta los estudiantes sabía, por magia...

Como era de esperarse, Malfoy y Nott, al subir a su carruaje, no dejaron que nadie más que Alessia subiera, por lo que ella solo negó mientras subía...

Cuando al fin llegaron al colegio, todos fueron directamente al comedor para escuchar el discurso del director y luego comer su cena, dando inicio al nuevo año escolar. Al igual que los demás años, antes que todo, el sombrero seleccionador cantó una nueva canción, a la cual Alessia no prestó mucha atención. Sus ojos estaban encima de una señora rechoncha vestida de rosa, que estaba sentada con los demás profesores, lo cual le hacía preguntarse, si aquella era una nueva profesora, y que asignatura dará...

- ¿Quién es ella? -le preguntó a sus dos amigos, quienes estaban cada lado de ella.

- La profesora Umbridge, es la nueva profesora de artes oscuras, trabaja para el ministerio- le respondió Malfoy sonriendo como si aquello le parecía bien.

- ¿Por qué alguien del ministerio estaría aquí? -preguntó retóricamente sin apartar la vista de la mujer con cara de sapo.

- Para vigilar a Dumbledore, luego de lo del año pasado, han tenido que intervenir- respondió el rubio llamando la atención por completo de Alex.

- ¿Después de que?, ¿del torneo de los tres magos? -preguntó algo molesta-. No creo que el colegio encuentre nunca un mejor director que Dumbledore- soltó con suma frialdad, sorprendiendo a sus dos amigos. E iban a decir algo, cuando el último chico de primer año fue a su mesa, y por lo tanto el director comenzó su discurso...

-A los nuevos -dijo Dumbledore con voz sonora, los brazos abiertos y extendidos y una radiante sonrisa en los labios- os digo: ¡bienvenidos! Y a los que no sois nuevos os repito: ¡bienvenidos otra vez! En toda reunión hay un momento adecuado para los discursos, y como éste no lo es, ¡al ataque! -apenas terminó las mesas se llenaron de comida.

- ¿Por qué defiendes a Dumbledore? -preguntó Nott esta vez-. ¿Acaso no has leído el profeta?, todos saben que está algo deschavetado y que Potter es un mentiroso...-soltó sorprendiendo a la chica por completo. Por supuesto que había leído aquel estúpido periódico mágico, pero nunca le prestó atención.

- Si van a decir algo malo de Dumbledore delante de mí, mejor resérvenselo- soltó ella molesta antes de comer en silencio. En cada intento que cualquiera de los dos tenía de decirle algo, ella simplemente los ignoraba, por lo que no pudieron defenderse antes de que Albus siguiera su discurso.

Cuando todos los alumnos terminaron de comer y el nivel de ruido del Gran Comedor empezó a subir de nuevo, Dumbledore se puso una vez más en pie. Las conversaciones se interrumpieron al instante y todos giraron la cabeza para mirar al director.

-Bueno, ahora que estamos digiriendo otro magnífico banquete, os pido un instante de atención para los habituales avisos de principio de curso -anunció Dumbledore-. Los de primer año deben saber que los alumnos tienen prohibido entrar en los bosques de los terrenos del castillo, y algunos de nuestros antiguos alumnos también deberían recordarlo. El señor Filch, el conserje, me ha pedido, y según dice ya van cuatrocientas sesenta y dos veces, que os recuerde a todos que no está permitido hacer magia en los pasillos entre clase y clase, así como unas cuantas cosas más que podéis revisar en la larga lista que hay colgada en la puerta de su despacho.

Mi igual (Draco Malfoy)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant