4. Primer día en el Trabajo

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Pontiac, Illinois

Llegamos a un motel, el nombre de este era Galaxy, entramos a la recepción, en donde una chica como de unos veintitantos estaba detrás de la recepción.

–Buenas noches– saludo amablemente la chica

–Hola linda– sonrió Dean muy coquetamente –Queremos una habitación con tres camas por favor–

–Lo lamento chicos, pero solo nos queda una habitación, y este tiene solamente dos camas– respondió con la misma sonrisa mirando a Dean

–La tomaremos– dijo Sam

Yo salí de allí y me dirigí al Impala, en donde me recargue, no quería ver como Dean ligaba y esa chica le respondía violándolo con la mirada, me enfermaban.

Minutos después salió Sam y se dirigió hacia mi.

–Lo lamento ___, pero tendrás que soportarnos– sonrió el tiernamente

–Descuida, debo acostumbrarme ¿O no? – una media sonrisa apareció en su rostro

El asintió. – ¿Entramos a la habitación? – me pregunto

Yo asentí. –

Minutos después de que entráramos y dejáramos nuestras cosas sobre la cama, Dean entro con una sonrisa.

–Tengo el numero de esa linda chica– sonrió orgulloso

–¿A quien le importa? – le dije tomando mi toalla y algo de ropa para darme una refrescante ducha.

Minutos después, Sam y yo estábamos investigando sobre el caso, mientras que Dean había ido por la cena. Al parecer según Sam lo que buscábamos eran vampiros, al principio me reí ya que me imagine a un Edward Cullen o a un guapo y sexy Damon Salvatore, pero no eran así, Sam me explico mas sobre estos, como eran, que hacían, y lo mas importante, como matarlos.

–Entonces... ¿Mañana iremos a la morgue a ver los cuerpos? – pregunte

–Así es, fingiremos ser del FBI, como siempre lo hacemos–

–¿Y yo? – pregunte

–Vendrás con nosotros– me sonrió

–¿Y como se supone que hare eso? –

–Ten– me dijo Sam dándome una placa del FBI –Te hice una mientras dormías en el auto–

–Gracias Sam– le dije tomando la placa, que tenia una foto mía

–¿De donde sacaste la foto? – le pregunte

El se encogió de hombros. – Tenias muchas cosas en tu casa–

De pronto la puerta se abrió, Dean venia con dos bolsas blancas en las manos.

–Llego la cena– dijo feliz

El dejo las bolsas sobre la mesa que allí había, saco su hamburguesa y le dio una gran mordida.

–¿Qué trajiste? – pregunto Sam

–Les traje un par de ensaladas, ya que a Sammy le gustan– respondió

–¿Y porque a mi me trajiste una? – le pregunte cruzándome de brazos

–Pues... porque las chicas les gusta cuidar su figura ¿No? –

Yo negué. – No soy como las chicas que te tiras cada noche Dean, yo quería una hamburguesa– dije haciendo pucheros –Así que... con permiso–

Camine hasta donde Dean se encontraba y le arrebate la hamburguesa que estaba comiendo, por suerte, solo le había dado una mordida.

–¡Hey! ¿Acaso estas loca? – me dijo algo molesto

Mi Salvación [Dean & ____] (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora