Little DEVIL|||Mattheo Riddle ꨄ PART 1 [✔️]

Cap 4 (🚬)

-Me iré a clase. -Solté tomando mi varita y uno de mis libros.
-¿Qué?
-Tengo Adivinación.

Abrí la puerta sin tocar y noté el silencio eterno en la aula.

-Lo lamento profesora Trelawney.
-El arte de la adivinación debe de ser tomado con seriedad Riddle, lo dejare pasar por esta vez.

A regañadientes me senté alado de Celia quien me sonrió, tomó mi libro y comenzó a ojearlo en la página donde estaban todos.

-Es aquí.
-Gracias.
-No hay de que. -Susurró con una sonrisa infantil.

En toda la clase no despegue mi mirada alado de mi donde se encontraba Celia prestando atención a la clase.

-No me mires ami, mira tu libro. -Me aconsejó notando la presencia de mi mirada.

Theodore podía ser un loco pero en algo tenía razón, había algo en Celia que ya había visto anteriormente, algo que no la sacaba de mi cabeza y no sabía que.

-La próxima Semana. -Susurre mirándola.
-¿Qué?
-Habrá una Reunión en la sala común de Slytherin, no sé si tú novio Theodore te lo haya mencionado.

soltó una pequeña risa y suspiro al mirarme.

-Lo pensaré, Theodore y yo no somos novios. -negó con la cabeza.
-Bueno, los dos son sorpresivamente irritantes y tercos, pensé que-
-Aunque te sorprenda yo y Theodore no somos novios, no es mi tipo de chico. -Interrumpió.

-¿Y cuál es tu tipo de chico? -Susurre mirándola intensamente.

no respondió, pude notar como Celia intentaba no hacer contacto visual conmigo, solo me miraba de reojo y volvía a mirar a su libro el cual ojeaba.

-¿Te gustan los maniáticos?

Celia me miró y estuvo apunto de contestar pero la profesora Trelawney interrumpió ordenándonos que después de su clase nos reuníamos en el gran comedor para dar a fin el día.

-Te veo en el gran comedor. -Contestó con una sonrisa nerviosa.

recogió sus cosas y comenzó a caminar hasta la salida del aula.

-No me respondiste la pregunta.
-¿Intentas sofocarme?
-Solo pienso que deberías encontrar a un chico que te ame y te defienda con su vida.

Puso los ojos en blanco con una sonrisa y se fue corriendo hacia el gran comedor.

Salí discretamente del aula dirigiéndome a los baños y sacando una pequeña bolsa de coca, hace días no me metía nada pero eso me estaba volviendo loco me mire al espejo y noté una presencia detrás de mi.

-¿Qué quieres Cormac?
-¿Drogandote Riddle?
-No es de tu incumbencia. -Respondí saliendo del baño.
-¿Es cierto que tú Madre escapó de Azkaban y que tú Padre volvió?
-Jódete McLaggen. -Insulte sin dejar de caminar.

-¡Jódete tu Riddle, no sé qué haces aquí, tú no deberías de estar en Hogwarts!

Retrocedí y golpee a Cormac repetidas veces, noté como todos estaban rodeándonos pero no podía dejar de hacerlo él también comenzó a golpearme. Enfurecido le rompí la nariz viendo como el sangraba ya en el piso noqueado.

-¡Mattheo! -Escuche la voz de Draco y Theodore detrás de mi.
-¿Qué hiciste?

-¡Ese Idiota me rompió la nariz! -Exclamó McLaggen con esa voz insoportable que odiaba.

El profesor Snape me tomó de el cabello arrastrándome hasta su despacho.

-¿Qué le sucede?
-No es la primera vez que el-
-No es la primera vez que golpeas a alguien de esa manera. -Añadió el profesor Snape cuestionándome.
-Lo dejare pasar porque escuche gran parte de la conversación y me encargaré que Cormac McLaggen reciba su castigo al igual que usted Riddle.
-Pero-
-Valla a la enfermería.

Fruncí el ceño y salí de su despacho directo a la enfermería sin esperar que ella se encontrara ahí.

Celia me miró decepcionada, me sonrió pero sabía que lo estaba podía leer su mirada, odiaba que ella pensara que era un monstruo al igual que mi padre.

-Trasladaron a McLaggen a San Mungo. -Comentó retrocediendo a mi presencia.
-No vine a que tú igual me cuestiones Diggory, solo dime donde está Madame Promfrey.
-Tuvo que salir a Hogsmeade, pero yo puedo ayudarte con las heridas.

Sugirió con una voz melódica que me hipnotizaba, mientras tomaba de mi mano y se dirigía hasta una camilla.

Celia tomó un botiquín, tomó un pedazo de algodón y se arrodilló frente ami colocando el alcohol en mi nariz.

-¿Tu no me temes? -Pregunte mirándola directo a los ojos.
-¿Porque tendría que tenerte?
-Todos lo hacen.
-Bueno, yo no te temo, eres una persona y debes de ser tratada como tal Riddle.

-¿Porqué eres tan jodidamente Buena? ¿Porqué mierda no me juzgas Diggory? -Pregunte tomando la muñeca con la que desinfectaba mis heridas.

-No soy quien para juzgarte, ninguno de nosotros somos quienes para juzgarte. -Sonrió.

Celia continuaba desinfectando mis heridas y la tenía tan cerca, no pude evitar notar que tan bella era, sus ojos me tenían hipnotizado, al igual que su sonrisa y absolutamente todo de ella.

La detuve nuevamente de la muñeca acercándome más y más a ella, ella retrocedía pero sentía un impulso muy dentro de mi.

Celia parecía disfrutarlo, sus labios eran suaves, sabían tan bien la tome con más intensidad de el cuello y ella rápidamente me alejo.

-¿Qué fue eso? -Pregunto con sorpresa.
-Mala mía, me tengo que ir. -Comenté recogiendo mis cosas y dejándola sola en la enfermería.