52. Limpio

668 59 9
                                    

Estoy recostado en mi vieja habitación, mi madre siempre ha sido tan buena conmigo, ahora mismo ella esta en la plata baja preparándome un café caliente y algo de comer. Observo el techo e imagino mi vida siempre, si, así sin tantas personas preocupándose por mi siguiente error, por verme cometer algo indebido y hablar de ello hasta por los codos, pongo mis manos detrás de mi cabeza y me gustaría pasar un día sin ser "alguien" para el resto de las personas.

Mi teléfono esta descargado y conectado a mi cargador, escucho la vibración que hace al prenderse y de inmediato lo tomo observando que tengo varias notificaciones y uno que otro mensaje, al meterme a mi bandeja de entrada veo que papá ha decidido comunicarse conmigo hoy, bueno, desde ayer, también que he abierto un mensaje de Taylor y ni siquiera recuerdo haberlo leído.


— ¿Puedo pasar? —mamá habla del otro lado de la puerta y quito mi mirada de la pantalla.

—Claro que si —mi voz suena tan desgastada, como la de un anciano muy vivido.

—Espero que aun te siga gustando mi sopa de fideos —ella sonríe dejándome el plato caliente y la tasa en mi mesa de noche.

—Es la única que me gusta, lo sabes —ella me mira triste y se sienta en la esquina de mi cama observándome, es como si tuviera tanto sentimiento dentro que quiere explotar ahora mismo.

—Es que has probado medio mundo, que... —alarga soltando un suspiro —A veces tengo un presentimiento malo, cariño, a veces me gustaría que estuvieras aquí y verte crecer como a Gemma, ¿sabes?, estos días han sido tan difíciles para mi —sus ojos comienzan a hundirse en lagrimas de tristeza pero no deja de hablar —Pero en el fondo se que eso es egoísta y que ese siempre fue tu objetivo, hacer lo que haces y me siento orgullosa... solo que te necesito, la impotencia de leer cosas que haces, que te han pasado y no haberlo escuchado de ti primero —mira mi escritorio viejo aun lleno de libretas que jamás volveré a usar —Cada día te vas alejando más y cada día siento que muero un poco.

—Oh, vamos, no digas eso —de inmediato me enderezo y la tomo entre mis brazos, su rostro esta en mi pecho y es ahí cuando ella comienza a mojarme de su tristeza, las lagrimas que sus ojos expulsan me mojan.

— ¿Cómo es que alguien a tu edad puede vivir sin su madre?

—No lo hago, siempre te necesito, te voy a necesitar toda mi vida, basta, por favor —cierro mis ojos sujetándola aun más fuerte.

—Sujetas las manos de otras chicas y ni siquiera sé cuando comenzaste a enamorarte, ¿desde cuando conocer el amor ajeno?, eres aun muy pequeño y...

—Ya no lo soy, tienes que entenderme —tomo sus mejillas húmedas y la obligo a mirarme —No quiero verte así, ni siquiera se si me he enamorado algún día, apenas estoy conociendo el mundo, me faltan caminos por recorrer.

—Hablas igual que tu papá —ella sonríe —Cuando nos dejo eso fue lo último que le escuche decir... "Me faltan caminos por recorrer" —un nudo en mi garganta se forma y sin darme cuenta tengo la mandíbula apretada.

—Mamá, no quise decir eso, me refiero a —las palabras se hacen bolas en mi boca y no digo nada.

—Cuando te vayas no me lo hagas saber, saldré porque sigo yendo al súper a comprar la despensa y te he dejado tu ropa limpia en la secadora.

—No te pongas así.

—Solo avísame hacía donde iras ahora, leí que tienes vacaciones pero también me entere que tienes otros planes.

—No, yo no tengo otros planes —ella acaricia mi mejilla derecha y me mira con sentimiento, sabe que miento y sabe que tengo otros planes ahora y siempre.


Me deja un último suspiro y se pone de pie, sale de mi habitación sin mirar atrás y yo escucho la puerta rechinar.

Le he estado mintiendo a todo el mundo que ahora no se cual es mi verdad, ni siquiera se para donde quiero ir, todo es tan complicado y las ganas de vivir un tiempo solo es la mejor opción, estoy cansado de ellos y de ellas, cada puto día leer algo sobre mis decisiones, sobre mi vida privada, ¿por qué ellos no se conforman con mi lado público?, algunas personas que dicen amarme al final siempre terminan escribiéndome mierda a través de una cuenta de Twitter que ni siquiera tiene su nombre.

Pienso que mis decisiones no las tomo yo, sino ellas y ellos, me orillas a tener que hacerlo sin otra opción, de otro modo seré un maldito bastardo mal agradecido.

Solo quiero estar en lo limpio, salir de este bosque me me come cada día un poco más.










-

Gracias por leer, les quiero x

Sad beautiful tragic ; haylor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora