Imaginas de 5sos

Another Guy - Michael

HOLIS

Gracias por entender que tener un bebé en casa y estudiar extra en vacaciones al mismo tiempo (aunque eso no lo dije en la nota), no es fácil. De todas maneras, pensé muchísimo una idea wow para hacer un imagina y creo que fue esta.

Además, gracias por leerme y votarme y hacerme feliz. Aunque ahora tenga una peste de las más hija de puta.

Los amo, chao.

''Another Guy'' 

Ambos estábamos acostados y mirándonos fijamente a los ojos, él en su traje de gala y yo en mi vestido de novia. Sus ojos lucían mucho más claros de lo normal y su cabello negro ya estaba un poco revuelto, supongo que gracias a mi. Me acerqué lentamente a Michael y me refugie en el pecho mientras el sentimiento de nostalgia hacia que derramaran algunas lágrimas.

- Hey, no llores. Se te va a correr el maquillaje.

Su voz sonó suave, como si también estuviera a punto de llorar y reí, Michael era tan malditamente peculiar.

- Estoy llorando pero lo único que te importa es que no se me corra el maquillaje

Se unió a otra de mis carcajadas y me alejé un poco para poder ver su cara. Tenía lágrimas en sus ojos que aún no se habían decidido por caer y sus labios estaban un poco rojos.

Sonrió casi forzadamente y dio un beso en mi frente. No quería estar triste en lo que nos quedaba de tiempo así que me trepe con mucha dificultad sobre él y doble mis piernas a cada lado de las suyas. Él sonrío, esta vez sinceramente, y empezó a hacerme cosquillas hasta tenerme casi llorando de risa.

- ¿Recuerdas cuando teníamos 17 años y tú vestías esas mallas rotas sólo para hacerme creer que eras punk rock?

Hablo de repente y tranquilice mi respiración para poder responderle.

- Cállate, las usaba porque me gustaban

- Claro que no, querías llamar mi atención...y valla que la llamaste

A veces estaba tan acostumbrada a la actitud de conquista de Michael que no podía sonrojarme más, por más que lo intentara. Aunque posiblemente, el sonrojo ya se había apoderado de mis mejillas y siempre lucía de tal modo.

- De todas maneras, te quedaban hermosas. Y apuesto a que si te las pruebas ahora, te deben quedar aún más bonitas

- Michael...

- Ya lo sé, ya lo sé -sus manos subieron a la altura de sus hombros, demostrando inocencia- pero es un buen momento para decirlo

- Entonces, si es así, el piercing en tu ceja te quedaba más que bien

Se sentó con dificultad (pues mi vestido era enormemente estorboso) y sonrío tristemente, después de soltar un sonoro suspiro.

- Ya lo sé, conquistaba a muchas chicas con él. Creo que me lo volveré a abrir.

Lo empuje en forma de reclamo y cayó nuevamente hacía atrás. Lo ví pensativo, con ganas de lanzar algunas palabras pero el sonido de mi celular nos percató de que ya era hora.

Me acerqué a su pecho, mientras sentía como este se movía pausadamente, como si Michael estuviera llorando.

Levanté un poco mi cabeza y ví algunas lágrimas queriendo caer por sus mejillas, me acerqué a su boca y lo bese dulcemente. Probablemente el beso más dulce y al mismo tiempo doloroso que le había dado en toda mi vida.

Me paré, y cuando tome mis cosas y estaba a punto de salir de la habitación, escuché la ronca voz de Michael.

- No me lo abriré otra vez, porqué yo sólo quiero conquistarte a ti.

Y salí de la habitación con un gran dolor en el pecho y miles de recuerdos atropellándose en mi mente.

Ya no importaban mis viejas mallas rotas o su piercing en la ceja, en estos momentos estaba llendo al encuentro con él que sería mi futuro esposo y dejaría atrás a Michael, el único hombre del que probablemente estuve enamorada.