Capitulo 5

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En un principio Sango no se tomo muy bien lo que le había dicho su amiga, ya que al ser una exterminadora no confiaba plenamente en Sesshomaru, pero a fin de cuentas tuvo que aceptar la decisión de su amiga, pero por alguna razón, Sango tenía un presentimiento de que se lo venía venir. Dos semanas han pasado desde aquello y el grupo ya se encontraba nuevamente en marcha en busca de mas fragmentos y del bastardo de Naraku, en estos últimos días la presencia de Naraku se ha hecho más fuerte pero aun así no han conseguido dar con el y menos hoy, ya que es luna nueva.

-¡Maldita sea tenía que ser justo hoy! -grito Inuyasha molesto mientras pateaba el tronco de un árbol. -¡Estúpida luna!

-Calma Inuyasha, solo será por una noche ¿Qué tal si mejor buscamos un lugar para poder pasar la noche? -Sugirió Miroku mientras miraba a los del grupo.

-Inuyasha, el monje tiene razón. Será mejor que busquemos un lugar para poder pasar la noche, tenemos que aprovechar el hecho de que todavía hay luz -dijo Kikyo acercándose a él -¿Sabes donde está la aldea más cercana?

-¡La aldea más cercana está a dos días de aquí!

-Tendremos que pasar la noche en el bosque entonces...

-¿Qué tal si buscamos alguna cueva o algo? –sugirió Kagome, todos asistieron. Todavía quedaba un par de horas para que el cielo se volviera oscuro, con el débil olfato que tenía Inuyasha lograron localizar una cueva que se encontraba cerca de un lago. Kagome dejo su mochila dentro de la cueva, al igual que el hiraikotsu de Sango y el bastón de Miroku. Mientras que Kikyo e Inuyasha prefirieron seguir portando sus armas. Poco después el grupo entero se dedico a buscar ramas y piedras para poder así prender una fogata e iluminar el interior de la cueva. Aun que estuvieran en plena primavera aquello no quitaba el hecho de que en la noche hiciera frio, uno nunca sabe que clima les puede tocar en esta época y menos en la era feudal. Ya cuando la oscuridad reinaba todos ya habían entrado en la cueva, Kagome se dispuso a desempacar la comida de la noche.

-Creo que fue buena idea traer comida instantánea.

-¡Yo pido el de carne!- dijo Inuyasha con una sonrisa

-No perro tonto, esta vez es mi turno. La última vez tú te lo comiste y me tuve que comer el de verduras. –se quejo Shippo

-¿Que dijiste enano? –Inuyasha se acerco a él con la intención de golpearlo, pero Kagome se adelanto usando el encantamiento.

-¿Kagome por qué hiciste eso? –Se quejo mientras se levantaba del piso –Sabes que siendo humano duele más.

-Perdón Inuyasha, pero no quería que golpearas a Shippo. Además no es necesario que peleen por el sabor de la comida, ya que esta vez toda son de carne. –Kagome saco de su mochila un poleron y se puso de pie –Saldré por agua y vuelvo –Por último tomo un arco junto con un par de flechas más una olla.

-Deja que te acompañe –Sugirió Inuyasha mientras se ponía de pie.

-No es necesario, llevo mi arco además, no creo que puedas hacer nada con tu forma humana...sin ofender.

-Vuelvo en unos minutos no se preocupen –antes de salir Kagome abrió nuevamente su mochila y saco una linterna –Con esto podre ver el camino, ya vuelo. –Kagome salió de la cueva y una ola de viento la golpeo –'Esta noche sí que hace frio' –pensó. Mientras se adentraba más en el bosque pudo sentir la presencia de un demonio, pero no cualquiera. –'Señor Sesshomaru' –camino más deprisa en la dirección de donde provenía el youki del demonio, su corazón latía agitadamente, tenía unas grandes ganas de verlo. Al llegar al lugar tan esperado se detuvo, él ya mantenía su vista en ella. Kagome no pudo evitar colocarse un poco roja, pero aun así estaba contenta de poder verlo.

-Hola...que sorpresa encontrarte por aquí –dijo caminando hacia él.

-Te sentí correr hacia aquí

Kagome se avergonzó y se sonrojo aun mas al escucharlo decir eso. –Pero aun así, jamás pensé que te vería por aquí...-dio una risa nerviosa. Ya junto a él Kagome se dispuso a no mirarlo a la cara, de su muñeca saco una liga y se hizo una cola de caballo alta, luego miro atentamente hacia el oscuro cielo, las estrellas siempre fueron su perdición. Sesshomaru la observaba atentamente, más que nada por la vestimenta que llevaba. Anteriormente la había visto vestida de forma "extraña" varías veces, pero esta vez su vestimenta le había llamado más que nunca la atención, sus largas y delgadas piernas estaban a la vista, no podía evitar no mirarlas. Algo latió dentro de él, su mirada ahora se posaba en su rostro, a pesar de ya conocerse desde hace algún tiempo era su primera vez viéndola con el cabello recogido.

-Ahora que lo pienso...-Lentamente Kagome giro su cabeza, algo latió dentro de ella al encontrarse con la mirada del demonio. Sesshomaru al ser un demonio claramente puso escuchar como el latino de la joven había cambiado, aprovechando el hecho de que ni Rin y Jaken se encontraban cerca extendió su mano y tomo la de Kagome. Ella observaba atentamente cada movimiento con él hacía, al sentir como él se disponía a tomar su mano su corazón nuevamente latió ferozmente y sus mejillas se tornaron rojas. Sesshomaru con la única mano que tenía jugueteo con su sus dedos, Kagome observaba atentamente cada movimiento que él hacía con su mano,

-¿Q-Qué haces? –pregunto temblorosa.

-¿Te molesta? –Sesshomaru dejo de jugar con sus dedos, esta vez se dedico a entrelazar los de él con los de ella. Ambarino y celeste chocaron, Kagome no pudo evitar ponerse más nerviosa de lo que ya estaba, por lo tanto aparto su mirada mirando hacia abajo. Con su pie movió un poco de tierra y luego meneo su cabeza, donde luego dijo casi en un susurro;

-No...no me molesta

-Hnn...

Ambos se quedaron en silencio, pero no era un silencio incomodo sino uno acogedor. Sesshomaru jalo de ella y la acerco más a él, ahora el rostro de Kagome se encontraba a un par de centímetros de su armadura. Sesshomaru poso su quijada sobre la cabeza de ella y resoplo.

-Debes volver, ya han pasado varios minutos de que te alejaste de tu grupo.

-¡Verdad! –Kagome se separo de él a toda prisa y recogió la olla –Tengo que llevar el agua o si no, no podremos comer –Señor Sesshomaru ¿Sabe por dónde queda el lago?

-Ven –Sesshomaru tomo nuevamente su mano y la guio en cierta dirección.

-Señor Sesshomaru olvide mi linterna...con ella no podre ver el camino a la vuelta

-Yo te llevare

Un par de minutos después ya habían llegado al destino, Kagome se acerco al lago y sumergió la olla en el.

-Bien, con esto podemos irnos...pero Señor Sesshomaru, tendré que caminar despacio para no derramar agua ¿Le molesta?

-Te cargare, así iremos más rápido. –de un segundo a otro Kagome ya no tocaba el suelo, Sesshomaru la cargaba con su único brazo donde luego la acerco un poco más a su pecho, finalmente emprendió vuelo.

-Por cierto...Señor Sesshomaru olvide-

-Sesshomaru

-¿Eh? –Kagome lo miro confundida.

-Puedes llamarme Sesshomaru, no permitiré que sigas usando honoríficos hacia mí.

-Oh...bueno –volvió a sentirse nerviosa –En ese caso puedes llamarme Kagome.

-No

-¿Por qué no? ¿Tanto te cuesta pronunciar mi nombre? –dijo hablando en un tono más informal.

-Con "miko" me es suficiente

-Uhg...

-Miko ¿Qué era lo que querías preguntarme?

-Quería preguntarte el porqué no estás con Rin o con Jaken

-Hnn –Sesshomaru no dijo nada, más bien no sabía que responderle. No le iba a decir que se había separado de su grupo al sentir que ella se encontraba en el área y que quería estar a solas con ella.

-¿Sesshomaru?

-Ellos...están por ahí

-¿Pero por qué no estabas con ello?

-Porque no

-Ah...bueno...


Abriendote mi corazón (EDITANDO)Where stories live. Discover now