LUNA OCULTA " la redención "

8. segunda oportunidad.

En un auto camino a Waterford la luna de Cork, veía con gracia y a la vez con intriga a la nueva Delta, cuando sus ojos se cruzaron, por segundos Brianna no soporto la presión  y decidió hablar, pues ella era mimada y caprichosa pero no era  una maldita arpía.

— ¿Niña por qué el Alfa te odia?— pregunta Brianna a la Delta.

La chica de trenzas en sus cabellos y labios ahora llamativos le ve y niega.

— En realidad no lo se; pero siempre tu esposo ha tenido esta peculiaridad conmigo.— contesta Livana, como si nada.

La luna de Cork ríe sin gracia y luego le contesta.

— jajaja. Peculiaridad, yo diría que fue un maldito desgraciado contigo.— contesta la Luna y las dos ríen...

Ya, pasados los minutos las dos mujeres lobas aunque son de gustos diferentes, hicieron un muy buen primer intento de amistad.

Cuando La luna llega a Waterford se le dibuja una sonrisa a Livana, respiraba libertad al igual que lo hace Brianna; está la custodia por su universidad y luego a casa de sus amigas, así pasaron los días pues Brianna había entablado muy buena amistad con la Delta, Livana.

Pero por la cabeza de Brianna pensaba otra cosa.

—¿ Como harás amiga, le dirás que irás a un club de fiesta, o te le perderas como lo haces siempre.?— preguntaba su fiel amiga Ivonne a Brianna pues tenian planeado ir a un bar a conocer chicos y beber tragos.

Brianna estaba dudosa, sentía confianza de parte de Livana pero la Delta podría traicionarla y esto le causaría una gran discusión con su Alfa, pues Brianna no solo tenía un secreto; e incluso eran varios como que ya no era fiel a su Alfa y tenía encuentros sexuales con Algunos lobos, y para que su Alfa no sospechara pues podría oler el olor de otro macho en su luna, está se aplica  otra poción mágica, cortesía de Emilia la tía de Ivonne.

Brianna niega y le contesta.

— Envíala por algo a la cafetería; nos haremos por atrás.— pues los guardias lobos no podían ingresar en la casa de Ivonne.

Tal y como Livana lo hacia siempre  fue por tortas y hojaldres a la cafetería acompañando de cafés y mokas, pues todos las tardes esta era su labor, Livana solo tardo 30 minutos pues Brianna siempre la mandaba al lado opuesto de la cuidad, pero cuando llegó y entro a la residencia su sonrisa se desfiguró, cuando podía encontrar a su Luna.

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Livana

No sabía que hacer Oscar uno de los guardias y mi primero al mando negaba, ahí entendí, no era la primera vez que sucedía esto, la busque por casi todo Waterford, pero cuando comprendí que había salido de la manada, con mi cara derrotada tuve que volver personalmente a Cork, a informar a mi Alfa, que la Luna Brianna se me había fugado.

Busque el bosque y me transforme en mi loba blanca, y cargue mi pequeña maleta con mi ropa adentro, llegue tan rápido como pude, creo que corrí más rápido de un mismo Alfa, cuando llegue cerca de la casa principal me transformarme nuevamente en humana y vesti, cuando entre;  el Alfa me esperaba y me guío hasta los salones de atrás, sabía que nada bueno vendría.

Respiro profundo y tomo el valor, aunque por mi cara y la suya el ya sabría que había pasado.

No me permitió hablar solo hizo una señal con su mano, de alto.

El está a parado en mi frente, pues su altura sobrepasaba los dos metros, y yo solo llegaba a 1.70, tube que guardar silencio enfrentar a un Alfa furioso, era otro nivel.

— ¿Solo te preguntaré una cosa Livana.?— me dice con voz fuerte, y Zara tiembla, pues lo hace molesto con voz de Alfa, y yo aunque quisiera salir corriendo tuve que quedarme parada en su frente a enfrentar su ira.

— Dónde está mi Luna, dónde está Brianna.— me dice y yo instintivamente niego, pero no espere fue el primer golpe en mi rostro con su mano convertida en garras.

Vole por la habitación abiertamente hasta golpearme nuevamente con la pared y caer al suelo; no tube tiempo de reponerme cuando mi Alfa ya me tomaba del cabello y con mi mirada y rostro ahora sangrado lo veía.

— Segunda oportunidad Livana, Dónde está mi Luna Brianna.— cuando ví que hizo la misma pregunta, supe ahí que estaba perdida, el Alfa me mataría....

No llore o suplique pero;  el Alfa me dió la paliza del año, cuando ya no sentía mi cuerpo, paro luego me vio a mis ojos ensangrentados y mando a llevarme a un calabozo, sin agua ni comida; cuando me trajeron a este horrible lugar pude ver a los guardias guerreros mirándome con lástima, pues el Alfa me había dado una excelente paliza; pero un antiguo compañero de entrenamiento me ve y con su rostro algo triste me dice.

— Tranquila Livi, saldrás de esta, cálmate y pide a tu loba te sane, esto no durará mucho.— siento algo calientito en mi pecho, cuando mi guerreo me da sus palabras de aliento; no lloro y trato de dormir pues Zara está aterrada, por la paliza propinada por nuestro Alfa y lo peor aún mate, pues puedo sentir nuestro vínculo, aunque con mi Manilla no me afecta.

... Tres días después me sacan de este horrible lugar y soy llevada en presencia del Alfa, miro mi ropa llena de sangre y rota por garras en todo mi cuerpo, Zara prácticamente me sano todo a diferencia de uno o tro golpe en mi cuerpo.

Cuando llegó a su presencia Zara tiembla, pero me obligó a ser valiente y si debo enfrentar mi muerte lo haré con honor.

Lo veo directo a sus ojos, cosa que veo le molesta.

— No me veas a los ojos Delta, agradece a la Diosa que tu luna llegó sana y salva, si le hubiese pasado algo tu hubieses corrido peor suerte.— me dice mi Alfa y yo asiento; veo a Declan quien me ve con lastima y volteo la mirada, no quiero lastima de nadie.

— Sube cámbiate y reimcoorporate a tus labores con tu luna.— me dice y yo asiento.

Cuando subo las escaleras a mi habitación me advierte.

— Recuérdalo Delta, lo que le ocurra a tu Luna, lo pagarás con tu vida.— yo asiento y me voy.

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🥲