Volvimos a entrar en el restaurante.
- Bien, haremos 4 grupos de 2 personas para buscar a Roberto. Los grupos serán Pedro con Lucía, Cristina con Noelia, Kai con Marcos y yo con el mayordomo.
- Esto...So, ¿Podemos hablar un momento a solas? Por favor - me súplica Kai.
- Claro.
Salimos del restaurante y nos quedamos en frente de la puerta.
- ¿Por qué no quieres ir conmigo? - me pregunta molesto.
- No es que no quiera ir contigo sino que, averiguaremos más cosas por separado ya que tu eres listo y yo también, además quiero que mantengas ocupado a Marcos - le digo seria.
- ¿A Marcos? ¿Por qué? - me pregunta extrañado.
- Porque es muy misterioso, no sabemos nada de él, es muy calladito y además su rostro no muestra emoción alguna. Por eso quiero que lo investigues un poco si puedes, sino yo ya tengo algo planeado.
- Esta bien, ten mucho cuidado y no hagas nada muy arriesgado - me dice dándome un beso en la frente.
- Claro, no tienes porque preocuparte por mí, más bien yo me preocuparía por ti.. - digo bajando la cabeza.
- ¿Por mí? - me levanta la cabeza para que lo mire - Estaré bien, venga vámonos - se dispone a caminar hacia el restaurante.
- No, espera - le cojo de la mano.
Se gira hacía mí - ¿Qué ocurre? - me pregunta preocupado.
Sin decir nada me puse de puntillas y junte sus labios con los míos. Era un beso suave y tierno, diferente a todos los besos que nos dimos asta ahora. Y poco a poco a falta de aire nos separamos del beso.
Nos quedamos unos minutos mirándonos.
- Me quedaría mirándote eternamente, pero nos están esperando hay que ir y tranquila, no tienes porque preocuparte por mí - me dice Kai cariñosamente.
- Sí, vámonos.
Entramos al restaurante y vimos que todos estaban muy tranquilos y asustados.
- Ahora nos queda decir donde busca cada pareja - dice Kai.
- Yo y el mayordomo nos pedimos las habitaciones - digo rápidamente.
- Vale, entonces.. Pedro y Lucía mirad todas las afueras del crucero. Cristina y Noelia mirad en tiendas. Yo y Marcos miráremos las bodegas - dice Kai decidido.
- Vale, empecemos la búsqueda - digo yo.
Todos ya se iban con su pareja y Kai antes de irse con Marcos me guiño un ojo.
Yo le dedique una sonrisa.
- Y bien señorita detective, ¿Dónde vamos primero?
- Empezaremos por la habitación de Roberto, por cierto ¿Cómo te llamas?
- Javier Maíz, un placer conocerla señorita...
- Sora, sólo Sora mi apellido lo quiero olvidar..
- De acuerdo, ¿Entonces nos vamos?
- Nos vamos.
En tan sólo unos minutos, ya estábamos en la habitación de Roberto y sinceramente no me pareció ver nada fuera de lo común.
- No parecé que este aquí - dice Javier.
- Ya.. - digo mirando los cajones de un armario que había.
- Usted no sólo busca al señor Roberto ¿verdad? - me pregunta discretamente.
- Vaya me pillaste.. - le digo con una sonrisa - tienes razón, también estoy buscando pruebas concretas y el arma del crimen.
YOU ARE READING
Un día imprevisto
VampireTrata sobre una chica llamada Sora que tiene 14 años. Un día pasa algo totalmente imprevisto y eso llega a cambiar toda su vida.