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Lyon aún no podía salir de su impresión, incluso después que la clase había comenzado, Ashary había pasado simplemente por su lado... ignorándolo... y sentándose tres pisos atrás, justo donde estaban los asientos vacíos y donde estaban los que no atendían a la clase.

Estaba loco. Con razón allá atrás había miles de murmullos. Ya lo tenían en la mira.

-Oye, cálmate, no sabes la cara que tienes ahora- Charles se había inclinado hacia él susurrándole en el oído- todo el mundo se va a dar cuenta que tienes una enemistad o como tú digas con Ashary.

-Qué enemistad ni qué demoni...-

-Lyonhart- el nombre de él resonó por parte del profesor. No se había dado cuenta que había alzado la voz.

Lyon chasqueó la lengua.

-Lo siento- dijo apretando las manos tan fuertes que sus nudillos se pusieron blancos.

-Que no se vuelva a repetir- dijo el hombre girándose de nuevo y siguió escribiendo.

Lyon puso sus labios en una fina línea avergonzado por la humillación y miró por encima de su hombro con disimulo al causante de que hubiera reaccionado así para casi sobresaltarse. La mirada afilada de Ashary estaba sobre él y lo estremeció.

¿Desde cuándo sus ojos eran tan fríos... y calculadores?

Tuvo que tragar en seco y al girarse hacia adelante juró que había una gota de sudor frío corriendo por su espalda. Ese... no era el mismo Ashary que conocía.

Entonces recordó el comentario de Charles y los rumores que había en torno al alumno nuevo... y Asha era el nuevo. ¿Eso tendría que ver? Acaso ahora él se acostaba con cualquiera...

Casi se golpeó mentalmente. En qué demonios estaba pensando. ÉL tampoco era el mismo de hacía dos años atrás. Ahora era más fuerte y el mejor, qué era eso de intimidarse. Así que miró de nuevo por encima del hombro, pero esta vez Asha estaba atento al profesor y lo volvió a ignorar.

Soltó un jadeó. Era en serio.

-Oye- Charles le pateó el pie- Contrólate quieres-

Lyon apretó los dientes y se giró de nuevo hacia adelante. Ashary no debía importarle ahora. Cada uno tenía sus responsabilidades, así como sus lugares en la corte, y lo único que los unía era Milan... y bueno, todo el tiempo que habían pasado juntos debido la insistencia de sus padres. Pero ahora, no tenían por qué cruzar caminos, a menos que fuera Asha el que se atreviera a perjudicarlo.

La clase terminó una hora después y el profesor se retiró. El resto de los alumnos se preparaban para retirarse cuando se escuchó lo que todos se imaginaban desde que había ingresado el alumno nuevo.

-¿Y bien?- Garlan, uno de los principales problemas del curso, penúltimo en la lista y que había sido enviado a la academia sin mucho resultado estaba ahora al lado de Ashary parado en todo su 1.90 metros digno de una persona que se manifestaría alfa en un futuro cercano.

La mano de este cayó sonoramente sobre el libro de Ashary, que no le había prestado atención, cerrándolo en el proceso y haciendo que la pluma del rubio cayera al suelo.

Asha solo atendió a su pertenencia ignorando a ese extraño que solo estaba formando un espectáculo y atrayendo las risas de varios alumnos al mismo nivel que él.

Lyon sabía que esto pasaría, era solo cuestión de tiempo.

-Maldición- se levantó reaccionando, para ir hacia allí, pero Charles lo detuvo y negó,

En el pasado ellos no se habían enfrentado dado que cada uno sabía su posición, hacerlo ahora, cuando Lyon tenía un lugar estable podría hacer una mancha es su expediente. Y el trabajo de Charles era asegurar aquello.

Lyon era también consciente de ello, y aunque sabía que Ashary era fuerte, no podría salir fácil de esto, pues si se oponía a Garlan sus secuaces lo apoyarían.

-Oye, estoy hablando contigo- la vena en la sien de Garlan se había hinchado ante la poca atención que le había dado Ashary que se inclinaba elegantemente para recoger la pluma- No te hagas el importante- gruñó alargando su mano y agarrando la larga trenza de Ashary para tirar de esta- Tu función es abrir las piernas y... AAAAAAHHHH

El grito estremecedor por parte de Garlan hizo que todos en el aula se paralizaran. Eso había sido un grito de dolor. Y Garlan miró hacia abajo encontrando que la pluma que había caído al suelo ahora estaba enterrada en el medio de su mano atravesándola.

Ashary inclinó la cabeza, como si no se la hubiera acabado de enterrar y se inclinó moviendo sus labios, susurrándolo algo a Garlan que solo él pudo oír y que hizo que el joven abriera su mano, soltara su trenza y a la vez su rostro se pusiera pálido.

Nadie supo que había pasado, ni siquiera Charles, mucho menos Lyon que solo podía ver petrificado al chico que apenas tenía de lejos que lo recordaba. Asha era serio por naturaleza, muy medido en todo, pero la sonrisa que tenía de lado cuando dejó de murmurarle a Garlan para levantarse tranquilamente, lo dejó sin aire.

Los secuases de Garlan quisieron ir tras él, pero este mismo alzó las manos y negó, razón por la que Ashary bajó la escalera central del estado para salir por la misma puerta por donde había salido el profesor dejando una atmósfera sumamente incómoda en el aula.

Nadie sabía que le había dicho, pero lo que fuera parecía que podría hundir a Garlan

Por lo visto... habrían nuevos rumores.

***

Lyon no vio a Ashary en las próximas clases y supuso que se debía a que se estaba instalando, y Charles se lo confirmó en la tarde al terminar todos sus turnos y solo quedaba volver a sus habitaciones a bañarse.

-En serio que Ashary me impresionó hoy- Charles habló relajado caminando con las manos detrás de la cabeza- Su imagen me recordó al rey cuando manda a alguien a tu sabes- sacó la lengua e hizo la simulación de cabeza cortada.

Lyon que iba a su lado no se rio. Se sentía incómodo, pero eso tenía solución. Así que caminó más rápido.

-Oyeeee- Charles tuvo que apurar el paso- ¿A dónde vas?

-¿En qué habitación está Asha?- ya sabía que Charles había averiguado esos detalles.

-La 20- respondió el chico pisándole los talones.

Y fueron en dirección a la ubicación que quedaba a seis puertas de la habitación de ellos. No se demoraron en llegar y Lyon se detuvo delante de la puerta. No lo dudó para tocar.

La puerta se abrió tras la tercera vez que siendo un chico del año el que apareció. Apenas le llegaba a la barbilla a Lyon, con el cabello negro rizado y pecas sobre sus mejillas.

-Hola, qué ocurre, preguntó-

Lyon no le interesaban mucho los demás del grupo, pero era cortesía saber sus nombres.

-Miley, se encuentra Asha... ry- recordó que había muy pocas personas que lo llamaban de esa forma, al principio solo él, y después de un tiempo a Milan se le había pegado, pero si hacía memoria, nadie más.

Eso de alguna forma hizo que su corazón latiera dada la intimidad que suponía aquello, pero sacudió su cabeza dejando de lado sus pensamientos cuando vio a Miley asentir.

El chico se giró para mirar al interior de la habitación.

-Ashary, te buscan.

El joven en el interior al escuchar esto miró hacia la puerta y alzó una ceja, dejó caer sobre sus hombros la toalla con la que estaba secando su ahora largo cabello y se acercó a la puerta recostándose en el marco. Ahora que no tenía la chaqueta puesta se notaba más el cinturón del pantalón ajustado a la estrecha cintura y al resto de sus piernas viéndolo aún más delgado que antes, aunque no de forma desagradable sino por el contrario.

Varias gotas de agua corrían por los mechones dorados cayendo sobre la camisa blanca transparentando parte de esta, y que Lyon se encontró siguiendo una con la mirada hasta que cayó sobre el pecho de Ashary.

Fue entonces que escuchó un carraspeó de garganta y eso hizo a Lyon alzar la cabeza.

-¿Qué quieres decirme?- Asha pestañeó lentamente.

Pero Lyon no pudo responder.

Mi odioso duque omega ( trilogía corta Palacio de Cristal I)Where stories live. Discover now