Capítulo 4.- Duett (Das Minnelied Der Incubi)

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Balancéate, balancéate, balancéate en el baile
Ven y déjame enseñarte
Vuela, vuela, vuela, ten fe.
Porque el mañana está muy lejos

Amanecer
Cuando la luz amenaza la noche
Porque solo en sueños
Puedo estar contigo
Y me desvanezco al amanecer.

*Duett (Das Minnelied Der Incubi) - ASP*

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El punto de quiebre para ambos hombres vino de la mano de una ocasión que debió haber sido alegre. El pueblo estaba haciendo su festival de otoño, para celebrar el inició de la estación. La mayoría de los jóvenes que estaban estudiando en la universidad ya se habían ido pero solían regresar el fin de semana del festival.

Dean Thomas se había ido a la Universidad de Dublín, pero estaba emocionado de verse con Seamus Finnigan. No se habían declarado uno al otro pero su relación de amistad ciertamente se había hecho más profundo y había estos momentos cuando estaban a solas que parecía que Seamus quería besar a Dean, pero algo siempre lo detenía.

Bueno, Dean tenía el plan de coquetearle a algún otro chico, a ver si Seamus finalmente lo veía como algo "no tan seguro" y se atrevía querer más.

Seamus no entró a la universidad, no por falta de potencial sino porque él hace tiempo había decidido hacerse cargo de la granja de la familia. Le gustaba la vida del campo y era una de las razones por las que no había hecho un movimiento con Dean. Con Harry, sabía que solo era pasar un rato agradable pero si hacía esas cosas con Dean... Seamus sabía que no habría vuelta atrás. Él nunca podría volver a ser amigo de Dean si no funcionaba y a la vez, tampoco se veía casado o junto a alguien que no fuera Dean.

Seamus tenía miedo de perder a Dean y Dean se estaba impacientando, no importando que el Padre Severus le dijera que no hiciera nada precipitado y que ir lento, haciendo crecer la amistad y los sentimientos era un buen camino para construir una relación. Dean temía que Seamus al final prefiriera a alguien más.

Como Seamus había tenido sexo con Harry (los chismes por una vez eran bastante ciertos), Dean se sentía... insuficiente en el departamento de apariencia. Así que para curar un poco su ego herido, Dean decidió que coquetearía con Harry y luego vería si Seamus finalmente hacía algo.

El festival era efectuado en un amplio callejón que estaba en la parte más antigua del pueblo. Las casas ahí ya no tenían pobladores y aunque podían ser habitadas, nadie en realidad quería vivir ahí. Parecían casas atrapadas en tiempos medievales y eran bastante pintorescas, pero no tenían las comodidades modernas de las otras casas, que si bien tenían fachadas de estilo antiguo, por dentro tenían servicios modernos.

Había estado lloviendo y había ese olor a hierba y tierra mojada tan agradable. Los puestos de comida y artesanías estaban por doquier, el callejón tenía decoraciones de la cosecha y luces decorativas, alusivas al otoño. Y al fondo del callejón estaba una tarima muy grande donde habría un espectáculo de saltimbanquis y baile irlandés tradicional. Harry estaba entusiasmado por los espectáculos pero como faltaba para eso, se dedicó a andar pululando entre puesto y puesto.

Saludo a sus amigos del pueblo y al Padre Severus que estaba platicando con los ancianos "cascarrabias" de Arabella y Argus. A Harry le caían muy bien los ancianos. Arabella y Argus solían invitarlo al té y hablaban con él de los últimos chismes del pueblo y Harry les pasaba los que él conocía.

Ese día el Padre Severus se había dejado el cabello suelto y Harry quería suspirar tan mal al ver al hombre verse tan sexy, incluso con esa ropa secular, que aun así lo indicaba como hombre de la Iglesia. A veces se preguntaba cómo se vería el hombre en algo tan normal como un traje o un suerte con gabardina. Su mente le proveyó la fantasía y Harry tuvo problemas para no ruborizarse por la imagen tan sexy de Severus en Gabardina.

Sanctus/BenedictusWhere stories live. Discover now