Capítulo 3.- Varieté Obscur

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Habían pasado un par de semanas desde aquella plática y Harry poco a poco le había contado cosas de su vida a Severus. Cosas inocuas como sus amigos de la escuela. Le contó a Severus sobre Ron Weasley y su multitud de hermanos y primos, todos con el cabello rojo. Le contó de Hermione y su incesante búsqueda de conocimiento hasta en las cajas de cereal. Incluso le hablo de Neville y Luna, sus amigos obsesionados, uno con la botánica y la otra con los horóscopos y la adivinación. También le contó sobre Draco y sus padres, algunas de las pocas personas con las que se había abierto un poco, aunque esto no se lo dijo al Padre Severus.

Severus sabía que el joven no volvería a soltar información cercana a su corazón como esa primera conversación donde dijo que sus tíos jamás le habían dicho algo agradable, al menos no tan pronto. Albus había estado preguntando aquí y allá sobre los Dursley y eran terribles para fingir ser normales.

Hogsmeade era un pueblo pesquero común y corriente pero todos sus habitantes tenían una historia detrás de ellos. Todos sabían más o menos esas historias de sus vecinos y era esa confianza compartida lo que hacía que Hogsmeade fuera un gran lugar para vivir. Incluso Rufus Scrimgeour y Cornelius Fudge nunca pensaron en ocupar el pasado de Severus para sacarlo del pueblo, ya que aunque lo odiaban, sabían que a los pobladores les agradaba y ellos no querían hacerse los enemigos públicos. Tal era el nivel de confianza y valores del pueblo.

Sin embargo, los Dursley sobresalían al intentar mimetizarse con la gente del pueblo. Petunia intento cocinar pays y galletas caseros que regalo a su vecinos inmediatos y estos mezclaron los regalos con la comida de su ganado (pollos, ovejas, cerdos y una que otra vaca), ya que eran incomibles a pesar de su prolija apariencia.

Vernon, mientras estaba en su modo profesional era fácilmente confundido con una persona común y corriente. Era cuando intentaba ser "pueblerino" que caía en lo que solo podía llamarse estereotipado. Actuaba como si todos los del pueblo hablaran una mezcla de inglés y gaélico, y todas sus conversaciones fueran sobre sus cosechas, ganado y el pescado, así como sobre sus cuentos folclóricos.

La verdad es que los aldeanos hablaban inglés casi todo el tiempo y solo unas pocas expresiones en gaélico. Además, aunque había gente que si hablaba todo el tiempo de cosechas, pesca y ganado, la gran mayoría hablaba de cualquier tema. Incluso había gente bastante erudita sin contar al profesor de la escuela. El propio sacerdote Albus podía hablar de cualquier cosa si lo llegabas a invitar a tomar el té.

Pero peor que Vernon y sus ideas preconcebidas de lo que significaba vivir en el campo era su hijo. Dudley Dursley se comportaba como si nunca en la vida hubiera vivido en la ciudad. Hablaba con las expresiones del pueblo, luego de días observando a los jóvenes de la comunidad y fue cuando salió a la luz sus motivaciones: las señoritas de la comunidad.

Dudley actuaba como si fuera el aldeano supremo y las señoritas debieran sentirse halagadas de que él quisiera su atención. Evidentemente las señoritas del pueblo lo ignoraron olímpicamente y prefirieron hablar con su primo. Entonces Dudley soltó que su primo era un "desviado que le gustaba la polla" y las chicas del pueblo solo se rieron de Dudley.

Ya había varios jóvenes aldeanos que eran "desviados que les gustaba la polla" y paradójicamente, la mayoría de los aldeanos estaba bien con eso. Solo unos pocos no gustaban de ese hecho pero no los criticaban abiertamente. Quizás solo decían que nunca podrían formar familias con hijos, hasta que se les recordaba a estar personas que ya existían métodos para procrear que no implicaban el sexo heterosexual.

El único de aquella familia que era plenamente aceptado en el pueblo, era irónicamente el miembro al que los Dursley esperaban rechazaran de pleno: Harry Potter.

Si bien Seamus y Harry no volvieron a juntarse, si quedaron como amigos y procuraban verse cuando había más personas en la salida. Entre salir con los otros jóvenes, su trabajo voluntario en la iglesia y sus excursiones a la naturaleza y unas pocas ruinas cercanas, Harry estaba integrándose muy bien a la vida en el pueblo.

Sanctus/BenedictusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora