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V: The strange feeling —

— V: The strange feeling —

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TENESSEE

MÁS DE DOS MESES HABÍAN pasado desde que Klaus había arrastrado a Alexandra y Stefan con él a cazar lobos, eso era lo que más le sorprendía a la rubia, porque entendía la razón de cazar lobos, Klaus quería tener su ejército de híbridos y necesitaba la ayuda de Stefan.

Lo que no entendía era lo que ella hacía ahí, era humana y muchas veces llegaba a ser una carga en los planes del rubio, lo notaba pues debían de detenerse cada cierto tiempo para que ella comiera sus tres comidas del día, debían de detenerse para que ella hiciera sus necesidades en un lugar digno, debían de detenerse cuando se cansaba o simplemente Klaus la cargaba y demás detalles pequeños que había notado con el pasar de los días.

Era una carga, lo sabía y cuando luego de un mes se lo expresó a su alma gemela él solo rodó los ojos diciéndole que dejara de decir idioteces, que ella pertenecía a su lado.

Ella entendía esa parte, además que había estado observando y notando que sí estaba aquí independientemente de los lazos entre ambos, también era un incentivo para Stefan Salvatore, Klaus sabía que el vampiro se quedaba por aquella rubia, lo que le parecía perfecto.

Y en el tema de Klaus, se sentía extraña, empezaba a quererlo a su lado todo el tiempo, buscaba cualquier excusa para mantener contacto físico, le alegraba el día cuando empezaban a interactuar, se empezaba a sentir atraída a él y se había cachado buscándolo con la mirada cuando no estaba a su lado, cosas que se supone no debían de pasar.

No le gustaba, ni a ella ni a Stefan que no le terminaba de agradar la idea de que su Lexa estuviera atada a aquel monstruo.

― Ya me cansé de esto ― Alexandra se detuvo cuando ya casi habían llegado a la casa que buscaban. Klaus hizo lo mismo observándola. ― ¿Sabes? Creo que adelgacé desde que estoy contigo.

El vanpiro rió mientras Alexa bajaba la mirada a sus pies observando sus botines blancos sonriéndoles, había sido un capricho que Klaus felizmente cumplió.

El híbrido suspiró. ― ¿Quieres que te cargue? Así le damos más dramatismo a la escena, decimos que te torciste el pie o algo por el estilo.

Alexa sonrió asintiendo y cuando Klaus se arrodilló un poco para estar a su altura, la humana pegó un brinco enredando sus manos en el cuello del híbrido y sus piernas en su cintura mientras él colocaba las suyas en los muslos de la rubia sosteniéndola para que no se cayera.

Empezó a caminar mientras Lexa tarareaba la canción "Look After You", su obsesión de la semana cuando Stefan le pidió de favor que cambiara de género musical, o al menos de artista, ya que lo tenía agobiado con Taylor Swift.

Klaus le había dicho que no importaba, que ella siguiera poniendo lo que quisiera; pero, complaciente hacia su mejor amigo, cambió de artista.

― Esa canción es de tus favoritas ¿no? ― preguntó sonriente al tenerla tan cerca, escuchar el corazón de su chica era algo que le gustaba apreciar, daría la vida por aquel sonido tan maravilloso.

The Great War || Klaus Mikaelson Where stories live. Discover now