Jimin asiste a una convención anime, con la esperanza de desestresarse de su trabajo. La presencia de Jeongguk, un maid de una cafetería temática, es lo que quizás necesita.
⋆.˚ 🍰 ᝰ.ᐟ
Smut
Ambos son mayores de edad Y PERSONAJES
Reescrito de 'sailor...
Smut, mi gente. Sólo así me hacen caso ustedes /puchero
Maid kink?¿ Lo hacen en el baño ajá, eso cuenta como public sex??? Dinámicas de dom/sub Humillación/degradación + praise kink Dinámicas de sadomasoquismo Dacrifilia
Subtop! JK Dombttm! JM
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Taehyung ya se estaba comiendo el tercer mochi de la tarde cuando Jimin pudo vislumbrar a aquel joven, caminando a saltitos emocionados, su falda y pequeñas colitas rebotando con cada paso saltón que daba. La convención dedicada al anime estaba abarrotada, pero incluso entre la multitud de adultos cansados, buscando comida y cómics japoneses, el chico era fácil de distinguir; con una cara bonita, los ojos grandes, brillantes, y las mejillas sonrosadas. No sonreía demasiado y parecía algo tímido incluso si movía su cabeza de manera coqueta, hablando rápido consigo mismo al hacer un puchero que lo delataba como una persona tierna. El calor, el encierro de toda esa gente estaba volviendo loco a Jimin, y también era la excusa perfecta para salir al patio y seguir los pasos de ese muchacho vestido de manera tan particular.
─── Jimin ah, éste relleno es fantástico. Necesito ir a Japón alguna vez y colarme en las fábricas de mochi, en serio. ─── hablaba Taehyung, ignorando las miradas de algunas chicas que, atraídas por su físico, no se daban cuenta de la extraña actitud del hombre. Jimin ponía sus ojos en blanco.─── ¿De dónde salió la idea del anko? Es una maravilla.
─── Hay un café de maids aquí, ¿no? ─── interrumpió el más bajo de los dos, ganándose un puchero por parte de Taehyung. No se veía muy joven usualmente con esa expresión seria que solía tener encima, junto al traje de su trabajo de oficina, pero con los labios un poco manchados con harina de arroz y haciendo una cara de perrito sufriendo daba la sensación de ser el mismo universitario que le ofrecía ayuda a Jimin para manejarse en el campus, cinco años atrás.
Cinco años no debería ser tanto tiempo, pero cuando trabajas en una oficina y tu comida es el estrés, los años se te vienen encima.
─── Ay Jimincito de mi corazón, no me estás prestando atención. ─── reclamó el hombre, totalmente ajeno a las reacciones por parte de las personas que caminaban a su alrededor. Si las chicas se sonrojaban con su presencia y los hombres se ponían a reír, no le importaba. Eso pasa cuando eres adulto, te dejan de importar las opiniones de los que no conoces.─── Te estoy diciendo que ando comiendo el mochi más delicioso de la vida y me respondes algo nada que ver... ¡Eres pésimo amigo! Buuuing ~.
Jimin ignoraba el puchero exagerado de su amigo, o más bien, ponía sus ojos en blanco antes de hablarle sin prestar atención a sus expresiones llenas de 'aegyo' y 'ternura'. Se preguntaba si le hacía los mismos pucheros a su novia, pero en el fondo sabía que la chica que estuviera con Taehyung iba a estar en la misma frecuencia que él. No había mucho qué decir al respecto.─── Vayamos al café de maids y compremos mochi. No es tan difícil.
