LLEGASTE TÚ-PEDRI GONZÁLEZ

17-Principe azulgrana

*Pedri*

-Venga tío, vente joder-me pidió ferran y yo rodé los ojos negando.

-Que no, que están aquí mis padres tio-le puse como excusa y el chasqueo la lengua haciéndome un gesto nada cortes con la mano.

-Este se ha echado novia y ya pasa de nosotros-le dijo Gavi y yo lo miré mal.

-¿Pedri? ¿Con novia?-rió ferran a carcajadas y el otro inútil lo imitó burlándose también.

¿Lo peor de todo? Frente a Alexia.

Ella me dio una mirada algo incómoda por los comentarios de los dos subnormales que tenía como amigos y era entendible, estaban dando a entender que yo evitaba el compromiso y quizá había sido así hasta ahora, pero Alexia había cambiado mis planes.

-Sois imbéciles, de verdad, cuando madureis me llamais-zanjé mientras intentaba relajarme con el masaje que me estaba haciendo Alexia y ambos rodaron los ojos.

-No has tenido una de esas en tu vida-se burló ferran.

Yo apreté los dientes porque era mejor opción que decirle algo que le iba a hacer daño.

-Ni la tendrá, es anti relaciones-dijo Gavi esta vez y ya me levanté sorprendiendo a Alexia.

-Mira paso de vosotros, me voy a mi puta casa-dije cogiendo mis cosas.

-Pedri no he terminado-me dijo Alexia con cara de circunstancias.

-Pues diles que se vayan, con ellos si has terminado-le dije señalandolos y ella rodó los ojos para dirigir una mirada a los chicos.

-Chicos-los miró y ambos le hicieron ojitos-si os quedáis dejáis de hacerle rabiar, sino os vais-les pidió y los otros dos idiotas decidieron irse dejándome una colleja cada uno antes de irse.

Me volví a tumbar intentando relajarme, pero no podía evitar pensar que Alexa fuera a pensarse una barbaridad sobre mi.

-No les hagas caso, no saben que dicen-le pedí y ella me miró sonriendome tranquila.

-Yo no he dicho nada-me dijo encogiendose de hombros.

-Ya, no se que es peor, quizá deberías gritarme-le dije confuso y ella rió negando.

-Pedri no tienes que darme explicaciones ni ahora ni de tu pasado mucho menos-me dijo y yo asentí jugando con mis manos.

-Nunca he pensado en atarme a nadie, y menos tan joven-le dije sincerandome y ella asintió escuchandome-siempre he creido en el amor, mis padres me han criado gracias a dios en una casa donde el amor estaba por bandera y siempre he deseado tener algo como lo que tienen ellos, una familia y un hogar donde siempre ha reinado el amor-ella sonrió.

-Eso es muy bonito-me dijo y yo asentí.

-Siempre he pensado que nunca encontraría a alguien con quien crear algo así, por eso nunca he tenido novia, nunca alguien me ha gustado tanto-le confesé y ella me sonrió quitándose los guantes.

-Bueno, ya llegará, ¿no?-me dijo y yo sonreí mordiendo mi labio.

-¿Y tú? Cuéntame algo sobre ti-le dije sentandome en la camilla y ella empezó a recoger las cremas.

-Pues...siempre he sido de las creían en los cuentos de hadas, de las que piensa que en algún lugar de este mundo estaba mi príncipe azul esperándome con su espalda y su armadura para dar cualquier cosa por mi-me dijo y yo sonreí escuchándola atento- a diferencia de ti en mi casa no se respiraba amor, pero siempre me ha gustado meterme en los libros o en las pelis y querer ser la protagonista a la que el protagonista le dedica una canción en mitad de nueva York, por la que cogen un avión a la otra punta del mundo o por la que derrotan al malvado dragón para salvarla-me dijo encogiendose de hombros y yo le sonreí.