El Poder Hace Lo Correcto

What-If Smut Omake 1: El fracaso de la misión crítica de TVA

Resumen de Omake: El-Que-Permanece no cerró las Puertas del Tiempo lo suficientemente rápido. Ravonna y sus TVA Minutemen no pudieron retrasar lo suficiente a Hevnokren. Y estos dos errores menores finalmente le permiten a Hevnokren ingresar a la sede de TVA y convertir la Línea de Tiempo Sagrada y a todos los que la habitan en sus juguetes.

Etiquetas: Vaginal, Oral, Anal, Uso Público, Picota (Acciones)

[En el puesto avanzado de TVA en Sakaar]

Ravonna Renslayer suspiró aliviada. Parecía que iba a vivir un día más.

En la relativa seguridad de su improvisado puesto de avanzada en este almacén alienígena, recorrió con la mirada el amplio espacio abierto donde se habían reunido las dos docenas de endurecidos supervivientes de esta desastrosa operación. De las siete docenas que habían llegado a esta miserable roca, sólo quedaron ellos.

Vigilando las entradas con ojos sombríos, curando sus heridas o sentados contra la pared dormidos de cansancio. Esta operación les pasó factura a todos.

Y, sin embargo, era trágico que no pudiera decir lo mismo de muchos de sus subordinados. Lo que le quedó fueron los veteranos Minutemen endurecidos. La vista de tantos uniformes negros y rojos de los Minutemen de TVA le aseguró que este largo día había llegado a su fin. Todo lo que quedaba por hacer era podar esta variante que había matado a tantos de ellos.

Sus ojos marrón oscuro miraron fijamente al prisionero que tuvo el descaro de no sólo mantenerse erguido, sino también sonreír como ella. Una rubia sonriente con ojos azul verdosos que brillaban con picardía; esta variante no podría haber sido más alta que ella y, sin embargo, logró matar a muchas de sus tropas. Y para colmo de males, la Variante incluso estaba disfrazada de uno de sus propios TVA Minuteman.

Ravonna entrecerró los ojos ante la vista; en algún lugar afuera estaba el cuerpo de uno de sus subordinados, despojado de su dignidad. No se puede subestimar el descaro total de esta variante.

A pesar del extraño bastón ornamental que sus Minutemen le habían permitido sujetar, la Variante no parecía tan resistente ahora flanqueada por dos Minutemen y con un collar cronocinético alrededor de su cuello.

"Variante", se dirigió a ella con voz resonante en todo el almacén, "por orden directa de los Guardianes del Tiempo, por la presente te condeno a ser eliminado de la Línea de Tiempo".

"Mi nombre es Sylvie Laufeydottir. Me pregunto si todavía me recuerdas". La Variante se presentó, con un tono endurecido en su voz mientras sus ojos azul verdosos se entrecerraban con ira. "Yo era esa niña que te robó la tempad y se escapó ante el juez".

"Tú..." siseó Ravonna con los ojos marrones entrecerrados.

Por supuesto que recordaba a este mocoso. Fue una de las pocas marcas negras verdaderamente notables en su hoja de servicio. Después de todo, ¿cómo podían sus superiores confiarle más responsabilidades cuando ni siquiera podía detener a una niña? Ese fiasco paralizó su carrera durante décadas.

"Sí, yo fui el mismo que secuestraste de su casa antes de borrarla de la existencia". La niña, ahora una mujer adulta, afirmó con el ceño fruncido: "¿Te sentiste como una gran heroína en ese entonces? ¿Arrastrar a una niña lejos de sus juguetes, ponerle un collar y destruir su casa?"

"Fue lo correcto. ¿No entiendes lo que logramos en TVA?" Ravonna respondió con más de una pizca de condescendencia, como si estuviera hablando con un niño idiota que le hacía preguntas estúpidas. Lo cual ella ciertamente consideró apropiado para esta conversación.

"Preservamos TODA la realidad". Se aseguró de enfatizar, amable y lento para la Variante, "Y por tu misma existencia, amenazaste a todo y a todos en cada existencia. Y si no te queda lo suficientemente claro, ese 'todos' también te incluye a ti " .