Inefable🖤#2 [Mattheo Riddle]

Capítulo 27

TN POV

El mar se extendía ante mí, sus olas rompiendo suavemente en la orilla, como si susurrase secretos ancestrales. Me encontraba frente a él, sintiendo su inmensidad abrumadora pero reconfortante al mismo tiempo.

Había pasado por tantas tormentas en mi vida, tantas batallas internas que me dejaron cicatrices invisibles pero profundas. Pero aquí, junto a ese mar sereno, encontré la paz que tanto anhelaba.

Cada ola que llegaba a la costa parecía llevar consigo un pedacito de mi dolor, y con cada retirada, dejaba una sensación renovada de esperanza y curación.

En ese momento, me sentí conectada con la naturaleza de una manera que nunca antes había experimentado, como si el mar estuviera compadeciéndose de mis penas y ofreciéndome su fuerza para seguir adelante.

En ese instante, supe que ahí, frente a ese mar infinito, encontraría la sanación que tanto necesitaba.

Al fin y al cabo la expulsión como castigo nos iba a venir bien. Elegimos la playa como lugar de desconexión y descanso. Justo lo que necesitábamos después de por todo lo que habíamos pasado. Tanto yo, como Leah, Theo, Mattheo, Enzo, Matty y la pequeña Angelina, a quien decidimos llevarnos para que Matty tuviese una distracción.

Minerva nos permitió la salida de Matty durante nuestra expulsión así que aproveché en pasar unos días de descanso junto a mi hijo y mi familia, porque sí, lo eran. Todos ellos se habían convertido en mi verdadera familia.

Me habían demostrado todo lo necesario y más, como para no serlo. Y a ellos los consideraba justo eso, mi familia. La familia que nunca tuve por circunstancias de la vida. Lo que sí estaba claro es que yo sí se la iba a dar a Matty y aunque lo consideraba muy tarde nunca era demasiado tarde para que conociese a fuese criado junto a sus padres, sus verdaderos padres.

Ahora éramos felices al fin después de la derrota de Voldemort. Aunque aún me asustaba y me aterrorizaba el pensar que Matty poseía los mismos poderes de su abuelo pero me tranquilizaba el hecho de sentir esa paz que hacía años que no lograba sentir. El mal ya no estaba y ahora el poder podía ser usado para el bien. Mi niño lo iba a cambiar, lo iba a hacer.

Aún seguía herida pero aún así estaba agradecida con la vida y por supuesto con Theo, Mattheo y mi niño quienes me salvaron la vida. Si no llega a ser por ellos y no hubiesen llegado a tiempo yo me hubiera acabado desangrando y no estaría en la playa de vacaciones junto a ellos como lo estaba.

Aunque sí era verdad que tuve que pellizcarme varias veces para comprobar que esto era real y no estaba en el cielo. Pero podía confirmar plenamente que sí lo era. Podía sentir todos y cada uno de los roces y toques sobre mi piel. Y por supuesto el que más me gustaba, justo el que estaba sucediendo en ese instante.

Alguien acarició mi cintura con sus brazos desde atrás. Por el simple aroma pude deducir que era mi Matt, mi novio, el padre de mi hijo y el amor de mi vida.

Podía sentir sus cálidos brazos rodear mi cintura mientras dejaba besos delicados por mis mejillas con cuidado de no hacerme daño en el cuello que es donde aún llevaba mi collarín por el desangrado que Voldemort me provocó.

No podía quejarme del cuidado de Mattheo porque no había nadie en el mundo que me cuidara mejor que él.

Disfruté del momento mientras la brisa que se propagaba en la orilla del mar golpeaba contra nuestras mejillas a la vez que podía sentir el cuerpo de Mattheo acariciando el mío. Cerré los ojos apoyando mi cabeza sobre su hombro y llevé mis manos a las suyas que estaban apoyadas en la parte delantera de mi cintura mientras las acariciaba. Mattheo atrapó las mías y entrelazó nuestros dedos.