El tiempo pasaba y las vacaciones se hacían menos aburridas, Gabriel insistía en salir y cada fin de semana salían a pasear a cualquier lado, haciendo que los muchachos esperarán cada fin de semana con ansías para verse y tener algo de diversión.
Ese sábado sería diferente a los anteriores, su padre le pidió que cancelara solo por esta vez su compromiso con sus amigos y lo acompañará a algún lugar, durante esas semanas su relación había mejorado, por lo menos para Aziraphale ya no era incómodo estar con el no le desagradaba tanto su presencia como antes, de hecho, la empezaba a disfrutar bastante.
-Estoy listo, ¿A dónde iremos?- dijo Aziraphale bajando las escaleras y caminando a su padre que lo estaba esperando en la puerta.
-Ya verás, te va a gustar.-
Después de un rato de manejar llegaron a su destino, un tanto inesperado.
-U-un parque de diversiones... No sigo siendo un niño padre.- Aziraphale miraba extrañado los boletos para entrar al parque al lado de su padre.
-Eso lo se, y lo lamento mucho, pero quiero pasar tiempo con mi hijo.- tomo a Aziraphale por los hombros y lo guío a la entrada del parque.
Tenía que ser sincero, no le desagradaba la idea de pasar tiempo con su padre, realmente le estaba gustando, no recordaba a su padre tan amigable y gracioso, una parte de el realmente lo había extrañado mucho.
Se encontraban en un pequeño restaurante dentro del parque, Aziraphale prefirió comer antes de pasear, y a Enzo no le molestó, al contrario, solo quería el amor de su hijo de vuelta.
-Habia algo que quería decirte.- Aziraphale alzó la mirada de la carta del menú y miro atento a su padre.
-Dime.-
-En el aeropuerto, vi a un pequeño niño recibiendo a su padre de una manera... muy satisfactoria, solo pensaba en que esa podría ser tu reacción, obviamente no lo fue.- una risa junto con un suspiro bajaron la mirada de Enzo haciendo una pausa, Aziraphale no reaccionaba, solo escuchaba la grave voz de su padre, tan irreal y real a la vez.
-Y yo.... y cuando volví a Londres lo sentí, la otra versión de mi, estaba allí, cuando tú eras un niño, risueño y juguetón, me alegro tanto saber que sigues siendo el mismo, ya no eres un niño, pero para mí, sigues siendo mi niño, y no sabes lo mucho que lo siento.- Enzo tomo las manos de Aziraphale que estaba del otro lado de la mesa, luchaba contra si mismo para no llorar, era verdad, a sus ojos Aziraphale era tan solo un niño.
-Pa, yo...-
-Disculpen, ¿Que van a ordenar?- un muchacho alto de cabello castaño haciendo ver qué era el mesero, interrumpió.
-Ah, eh, si yo sí, ¿Tu hijo?- la sonrisa de Enzo distrajo a Aziraphale, en su mente aún sonaba el eco de las palabras de su padre.
-Si, yo igual.- después de darle su orden al mesero este se retiró y Aziraphale bajo la mirada- No se que decirte, fueron varios años y...-
-No hijo está bien, solo quería que lo supieras, no quería una respuesta.- le sonrió dándole confianza, Aziraphale se sintió más cómodo y esperaron su orden cambiando de tema por completo.
Una vez que ya tenían su orden comieron muy tranquilamente, sin embargo ambos notaron una actitud extraña de parte del mesero, ninguno dijo nada, cuando terminaron Enzo pidió la cuenta el muchacho con mucho gusto se las dio, y mientras recogía los platos dejo caer un papel en el regazo de Aziraphale, se miraron por un momento, en chico le sonrio y le guiño el ojo para después retirarse.
Aziraphale se sonrojó ante el gesto tomo el papel y en el tenía escrito un número de teléfono junto con un:
"Eres muy lindo, llámame :)"
Azira sonrió y se sonrojó aún más, levantó la mirada y dejo de sonreír al ver la mirada de su padre, tenía la expresión seria y una ceja levantada expresando su confusión, extendió la mano y Aziraphale le entrego el papel, creyó estar frito cuando vio a su padre soltar una carcajada.
-Si vas a llevar a un chico a la casa que por lo menos sea uno decente y no un simple mesero.- ahora el confundido era Aziraphale, no estaba entendiendo el comentario de su padre, aunque si tenía claro que lo clasista no se le quitaba.
-N-no entiendo pa, ¿No te molesta?-
-¿Por qué debería? Ay hijo, lo sospechaba desde que eras un niño, y hace tiempo solo lo confirmé, que tú abuelo sea anticuado y viejo no significa que yo sea igual, eres mi hijo y te amo.- Aziraphale sonrió, jamás pensó que si padre lo apoyaría en algo asi.
No había mucho que Aziraphale quisiera hacer, pero Enzo lo termino de convencer de subir al carrusel, solo pasearon por ahí mientras hablaban de como habían sido sus vidas esos últimos años.
Se hizo tarde, padre e hijo llegaron a casa, y antes de entrar Aziraphale le dio un gran abrazo a su padre, sorprendiendo demaciado a Enzo, pero no dudo en corresponderle el abrazo.
-¿Así o era aún más fuerte en tu imaginación?- Aziraphale le pregunto a su padre levantando la mirada.
-Es mucho mejor que en mi imaginación.-
Le alegraba tanto poder arreglar la relación que tenía con su padre, era un peso menos, dio un salto del susto al sentir vibrar su teléfono, Uriel le había enviado una imagen, no alcanzo a verla del todo, su teléfono volvió a vibrar y está vez era la llamada de Uriel.
-Hola Uriel, que suce..-
-Aziraphale, ¿Ya viste nuestro nuevo horario?
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ME MA-MA EL EXCESO ♪ AÚN QUE SEA LUNES VAMOS A PONERNOS NECIOS ♪ LA CINTURÓN PATROCINÓ TODO EL MUGRERO ♪ PA' QUE ME INVITAN SI SABEN COMO ESTA EL PEDO ♪
Bn naca yo 😔 JAJAJA
El papá de Aziraphale es clasista pero no homofóbico, eeehh q tal 😃 (cuando Crowley lo conozca se va a tener q pegar el estado bancario en la frente)
