Narnia: Un amor a primera vista~Casmund

Capítulo 23: La Isla Del Dragón

Esa misma noche mientras todos dormían, Lucy en su habitación saco nuevamente aquella hoja de papel que había robado, con mucho cuidado lo desdoblo para no despertar a Gael que dormía a su lado, recitando nuevamente las palabras del hechizo, sin darse cuenta la bruma había entrado a su habitación tentándola. Sin embargo, ahora su relejo se plasmó en el espejo frente a su cama, lentamente se levantó impresionada de lo que veía, era ella en el cuerpo de su hermana Susan, mientras sonrió al ver qué bonita se veía.

Al parecer todo a su alrededor cambio mientras atravesaba el espejo, pudo ver a su familia cuando vivían en Inglaterra y a sus hermanos vestidos con un traje elegante, sumamente apuestos, mientras ella llevaba un vestido azul con pequeñas flores blancas, realmente hermoso.

P- ¿Hermana como estas?

L- Peter, Edmund (Sonrió mientras abrasaba a sus hermanos.)

E- Ven debemos tomarnos unas fotos

Los chicos se pusieron en ambos lados de la chica, mientras un hombre al parecer un soldado se acercaba a ellos sonriente, mientras les indicaba que miraran enfrente de aquella cámara fotográfica enfrente suyo y que sonrieran.

L- Esperen chicos aún falta Lucy

P- ¿Quién?

E- ¿Alguna amiga tuya? (Menciono sonriente.)

L- No chicos, nuestra hermana

L- Me quiero ir, ya basta chicos, YA BASTAAAA (Grito al ver que no la soltaban.)

Al parecer todo fue una pesadilla, al instante vio a Aslan reflejado en el espejo, aquel León le explico que eso podría haber sucedido si ella hubiese deseado dejar de existir y por lo cual ella y sus hermanos jamás hubieran conocido Narnia, ya que ella fue la primera en llegar a magnifico mundo, y así observo como el León desapareció. Lucy por fin comprendido que no debía avariciar ser otra persona y la belleza de esta, ya que ella igual era sumamente hermosa a su manera, así que decidió quemar aquel pedazo de papel arrojándolo al fuego de la chimenea, y al instante se escuchó un pequeño rugido acompañado de la imagen de un León en el fuego.

Ala mañana siguiente todos se dirigieron al barco después de despedirse de aquel anciano amable, y así continuaron su rumbo en busca de la estrella, llevaban ahora dos semanas navegando en medio de una tormenta que pareciera nunca acabar. Drinian les sugirió a los Reyes regresar ya que no tendrían suministros suficientes para continuar, sin embargo, los Reyes decidieron optar por seguir con el viaje.

Esos días las pesadillas continuaban llegando, Susan soñando que se había quedado sola en Inglaterra ya que sus hermanos habían fallecido en un accidente de tren, mientras sus almas regresaron a Narnia, menos ella por dejar de creer, Caspian soñó que su padre le decía que era una vergüenza como Rey, mientras Edmund nuevamente soñaba con Jadis dispuesta a arrebatarle todo lo que amaba, al parecer Peter y Eustace aun no habían sufrido algún efecto.

Por fin la lluvia comenzó a desaparecer, hasta que nuevamente se apreciaba el hermoso cielo azulado, y no muy lejos se veía una isla algo peculiar, no se apreciaban rastros de vegetación en este, al parecer todo en esta se encontraba muerto.

El barco se acercó lo más que pudo y nuevamente decidieron ir a explorar, Drinian quedo al cuidado de Rilian en el barco, Tavros y sus hombres se encargarían de buscar alimento, mientras que los Reyes se encargarían de explorar la isla. Eustace decidió escaparse por un momento de sus primos yéndose por otro lado, mientras el resto se quedaban viendo una cueva peculiar bajo tierra, en la cual caía una cuerda, al parecer hubo gente en ese lugar.