Hola chicos y chicas esta es mi primera historia Casmund, esta historia estará centrada cuando los cuatro hermanos Pevensie regresaron nuevamente a Narnia sin embargo, se hablara un poco acerca de la pelea con los Telmarinos, de igual manera habrá m...
Todos los presentes observaron al anciano que traía una vestimenta algo peculiar, lo que más destacaba era el inmenso batón que llevaba puesto ya que al caminar pareciera estar flotando en el aire, la Reina Lucy lo presento con el nombre de Coriakin no sin antes aclarar que esa era su isla. El anciano con una sonrisa en su rostro se inclinó con una reverencia en señal de respeto ante el resto de Reyes mientras era presentado.
Sin embargo, los enanos comenzaron a decirle un sin fin de cosas, ya que seguían molestos con él, al instante este decidió caminar en dirección a estos seres, pero al parecer le tenían tanto miedo que retrocedían a su paso.
Co- Yo jamás les hice daño, los volví invisibles porque quiero protegerlos
Fa- ¿Protegernos? Eso es opresión (Opresor, opresor, se escuchaban las voces del resto de enanos ante el anciano.)
Co- Jamás los he oprimido (Menciono insistente Coriakin, mientras todos lo miraban viendo como sacaba algo de su bolsa.)
Fa- Pero si quisieras podrías hacerlo
Co- Váyanse (El por fin hizo que estas criaturas se marcharan brincando del miedo porque les había arrojado algo.)
L- ¿Que son esas cosas? (Menciono preocupada Lucy, por las criaturas.)
Co- Pelusas, pero no les digas
Eu- ¿Qué son esos? (Menciono Eustace, que recién se unía al resto, asustado y confundido nunca había visto semejantes criaturas, al parecer todo se iba poniendo más raro conforme estaba en ese mundo.)
Co- Farfapodos
Eu- Ah, claro era obvio (Menciono con ironía, era obvio que él no los conocía.)
Todos caminaron rumbo a la mansión siguiendo a Coriakin, mientras hablaban acerca de la bruma verde que era la causante de pesadillas y desaparición de personas, absorbiendo la magia de los seres de ese mundo. Llegaron a una biblioteca sumamente hermosa, Rilian sonrió en los brazos de Edmund mientras veía el techo, en el cual se reflejaban hermosas luces estas eran en realidad galaxias, todos se asombrar al ver tan magnifico lugar.
El anciano camino a un estante, para después arrojar al piso un gigantesco mapa que no dejaba de expandirse, mostrando hermosas imágenes de las tierras de Narnia.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
