Him & I

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Emma

He pasado una hora sentada en una mesa con dos apuestos hombres, reconozco que no ha sido incómodo estar con ellos, apesar del nerviosismo que tengo por la mirada de ambos en mí, la mayor parte del tiempo ha sido agradable convivir con ellos.

Después de varias preguntas sobre mí y un par para ellos, llegamos al postre, a James le suena el celular, él lee por encima el mensaje que le acaba de llegar y toma el aparato para contestar.

-Es mamá, quiere que vayamos a cenar hoy, Mark acaba de llegar de Alemania. -le dice a Jack.

-¿Son hermanos? -no resisto a preguntar.

Ambos me miran y sueltan una risita divertida.

-Legalmente lo somos -responde James con una sonrisa de lado.

-Biológicamente Mark, James y Eric son hijos del General Thomas y Olivia. -dice Jack mirándome divertido. -Mientras que Nick y yo somos los gemelos adoptados.

-Ou, entiendo -evito hacer más preguntas aunque la garganta me arda por querer saber todo, no interrogaré a mis superiores.

Al final del almuerzo James paga la cuenta, me levanto y siento su mano en mi espalda baja, lo miro pero él solo mira hacía el frente mientras camina, no digo nada porque su tacto se siente bien.

Abordamos la camioneta y el camino de vuelta a la central se pasa en silencio, pero es esa clase de silencio dónde no hay incomodidad.

Al llegar bajamos del vehículo y me acerco hasta estar frente a ellos.

-Gracias por el almuerzo, lo pasé muy bien. -les sonrío amablemente.

-Gracias a ti por la compañía, preciosa.

Mi corazón se acelera al escuchar lo último y trato de mantener la calma para no sonrojarme.

-Yo... debo irme... a trabajar. -que vergüenza, parezco retrasada hablando así.

-Fue un placer, linda. -Jack se acerca y deposita un beso suave cerca de la comisura de mis labios y James se acerca después a hacer lo mismo pero del otro lado de mi rostro.

Me quedo quieta unos segundos hasta que siento que mis mejillas se empiezan a calentar, en ese momento me doy la vuelta y salgo del estacionamiento lo más normal que puedo, pero mientras voy a mi dormitorio para cambiarme, siento mi corazón latiendo tan rápido y mis mejillas ardiendo.

Me siento en mi cama al llegar al dormitorio, rememoro absolutamente todo lo que ha pasado el poco tiempo que he estado aquí, sobre todo al misterioso besador del antro, al tacto de Nick Clarke, no había pensado en ese día de nuevo, puesto que se siente subreal, y el cómo me hicieron sentir los besos de James y Jack.

Definitivamente no es algo norteamericano.

Y luego recuerdo, la mirada de Eric en la oficina de su padre, la mirada fija de Nick en el almuerzo con las chicas, las miradas que James y Jack le lanzaron al pobre mesero que desapareció. No es difícil sumar dos más dos, supongo que les llamé la atención a los hermanos McClane-Clarke...

No, no puede ser, apenas me conocen, apenas los conozco yo, además ni siquiera estoy segura de lo que estoy teorizando.

Sacudo la cabeza, mejor me voy antes de seguir llenándome la cabeza con tonterías. Me cambió a mi uniforme de pila y me voy al área de Tenientes. Durante un par de horas termino los reportes sobre el desempeño de los cadetes de ésta semana.

El teléfono de mi escritorio suena y la voz del cadete secretario de el área de Tenientes suena.

-Teniente Harelik, buena tarde, la necesitan en la sala de conferencias.

Amor y Armas [+18]Onde histórias criam vida. Descubra agora