La pregunta era de esperar, así que no me sorprendió.
Recordando aún los valores de mi vida pasada, era natural que ocultara a William el ciclo del celo.
William era menor según las leyes de mi vida pasada, y aunque mi orientación sexual favorecía a los hombres, no podía aceptar de forma natural quedarme embarazada de un hombre, y aunque lo hiciera, no estaba segura de poder soportarlo.
Pero no podía decir honestamente por qué en este momento. Sabía que la reacción de William dependería de cómo respondiera, así que tenía que ser cuidadosa.
"¿Y si sigues temblando? No te culparé, pero dime por qué".
Miré a William, que me apremiaba con tono amable, y contesté con calma.
"Tenía miedo".
"¿De qué, de tener una relación conmigo?".
Negué con la cabeza, aunque la verdad era que tenía miedo de tener una relación con William.
"Entonces, ¿de qué tenías miedo, de que te hiciera daño y te hiciera sufrir? No... Si ya has tenido un ciclo de éxito, ¿de qué hay que tener miedo?".
"No era eso lo que temía".
"¿Entonces?"
Levanté la cabeza y clavé los ojos en William, contándole la historia que había estado preparando para este momento: una historia de intriga cortesana. Fue por su bien que entendió mejor la historia.
Escuchó atentamente mi relato y, aunque tenía una expresión de estupefacción en el rostro, comprendió enseguida la intención de la historia.
"¿Dices que temías el caos que se produciría si tú, y no la emperatriz oficial, te quedabas embarazada y dabas a luz a un príncipe?".
"Sí. Has dado en el clavo, yo soy la que ha visto desde la barrera cómo crecían Kaloi y Su Majestad, y las luchas a las que se enfrentaban, así que ¿cómo no iba a tener miedo?".
"¡Huh! Wow... Danny, de verdad.... No lo entiendo, no lo entiendo, y me siento traicionado ".
"Por qué no lo entiendes, el príncipe que di a luz ni siquiera recibirá el tratamiento adecuado...."
¿Eh?
Había algo raro en su forma de hablar. En primer lugar, mi plan era darle a William algo que pudiera entender de por qué le oculté el ciclo de calor.... Lo que estaba diciendo ahora sonaba como si yo fuera Jang Hee-bin, desesperado por ser un peso medio.
No lo soy.
"No me digas. ¿Estás diciendo que ocultaste el ciclo de golpe porque sabías que no te tratarían bien?".
Negué con la cabeza mientras me pedía confirmación.
"No, eso no es así....".
Rápidamente puse los ojos en blanco, estirando la última palabra todo lo que pude.
"Mi intención era quedarme embarazada del príncipe heredero después de ser coronada oficialmente emperatriz. Por el bien de la estabilidad del imperio y el buen camino que les espera al príncipe heredero y a la princesa heredera."
Sí, eso era lo que quería decir, después de todo.
No era lo que realmente quería decir, pero tenía sentido y no había nada lógico en ello, así que era una buena excusa para convencerle.
Pensé que eso bastaría para que lo entendiera, pero ni se inmutó y me volvió a preguntar.
"¿Por qué?"
