ꕤ「capitulo 11」

2.4K 275 4
                                    


Estaba jodido, aquella habitación de hospital lo estaba matando poco a poco, ¿Cuánto tiempo más tendría que estar ahí?, maldita sea la hora en la que se encontró con esos matones, aunque él está muy seguro de que ese encuentro no fue de casualidad, alguien lo había mandado a amenazar o aún peor, a matar.

Curiosamente ese grupo de hombres que lo habían rodeado hace dos días no dijeron ni una palabra o amenaza sobre algo, pero él sabía muy bien quién lo quería ver mal y herido, el presidente ¿Quién más seria si no?, no tiene más enemigos.

Y lo peor fue que él no es una persona sumisa que se deje mandonear o atacar fácilmente, pero por esa misma valentía, había terminado con un brazo fracturado, un par de golpes en el pecho y un pequeño corte en la mejilla.

La puerta de la habitación se abrió dejando ver a Yoongi con una bolsa de lo que parecía ser un postre, ya que él sabía que Jimin preferiría mil veces comida antes que  algún otro detalle, en ese tiempo que llevaban conociéndose, ambos habían formado una linda amistad.

— ¿Cómo te sientes?. — Cuestionó dejando el pequeño postre en una mesita.

— Mal Yoonie, estoy jodido, nose cuanto tiempo tendré así él brazo, lo odio, enserio detesto a Jungkook, maldito imbécil. — Gruñó.

— Hablé con una enfermera me dijo que mañana te podrían dar de alta, no te preocupes, hemos reunido mucha información en estos días, todo saldrá cómo lo planeamos, ¿Bien?, se fuerte cariño, saldrás de esto, ya lo verás.

— ¿Cariño?, ¿Y ese apodo ministro Min?. — Dijo sonriendo divertido por la situación.

Rápidamente un potente tono rojizo apareció en las mejillas del contrario. — ¿No te gusta?, si quieres no te lo digo, yo..

— Esta bien, me gusta, me puedes llamar así o cómo quieras, cielo. — El pelinegro extendió uno de sus brazos para que el mayor se acercara a darle un abrazo, pues solo podía extender uno por el momento.

Yoongi se acercó a él y lo abrazó para después depositar un beso en la frente del menor, las cosas entre ambos estaban avanzando poco a poco, no había porque apresurar las cosas, ambos se estaban dando la oportunidad de conocerse y ser felices juntos en un futuro.

Mientras tanto, Jungkook y Taehyung habían llegado al departamento de este último en silencio, el camino había sido un poco tenso.

— Bien, buenas noches, nos vemos mañana. — Soltó Jungkook desde el marco de la puerta para después voltear y marcharse.

Pero antes de dar un paso sintió unos brazos rodearlo por la espalda, Taehyung se acurrucó en la espalda del mayor.

— Taehyung. — El pelinegro se sentía tentado a dejar de estar molesto.

— Koo, ¿No quieres quedarte esta noche a dormir aquí?, me siento solito.....— Uso un tono de voz suave.

Todo estaba bien hasta que los recuerdos en el restaurante llegaron de nuevo a su cabeza.

— ¿Si?. — Volteó para mirar al menor a los ojos. — ¿Mi Taehyungie se siente solo aquí?. — El castaño asintió.— Entonces, ¿Porque no llamas al mesero?, quizás te traiga otro postre de cortesía. — Masculló soltandose del agarre.

— No lo quiero a él, yo te quiero a tí. — Hizo un mohín mientras volvía a abrazar al mayor por la cintura.

— Ya sueltame. — Se cruzó de brazos ignorando el mohín del menor.

Pero Tae rápidamente lo soltó y cerró la puerta de su departamento con llave y estas mismas fueron lanzadas a alguna parte de la sala.

— ¿Qué se supone que hiciste?. — Preguntó el mayor sorprendido. — Estás quitándome mi libertad al encerrarme aquí contigo, incluso estas obligándome a quedarme aquí, cuando yo no quiero. — Protestó.

— Koo no seas así, ¿No quieres que te de un par de mimos?. — Sonrió ladino, pues los mimos eran el punto débil del pelinegro.

Casi que lo lograba, enserio, Taehyung casi lo logra pero el mayor sabía cómo jugar sus cartas y hacerse el duro cuando se lo proponía.

— Esta vez no me apatecen tus mimos cariño, así que porfavor se bueno y abre la puerta de tu departamento para poder irme. — Respondió firme.

El castaño se quedó incrédulo, pues los mimos nunca fallaban, ¡SOS!, ¡TENEMOS UN SOS!, ¡¿Acaso tendría que recurrir al plan C?!, aquel plan que sólo se utiliza en caso de emergencias.

— Bueno, tú te lo buscaste Jungkookie, mira, yo no quería hacerlo, pero me estás obligando a tomar medidas que yo no quiero, claro que no, no, no. — Negó mientras se iba acercando al mayor cada vez más.

— ¡Atrás!, ¿Qué planeas ardilla promiscua?. — Arqueó una ceja al ver al menor sonreír maliciosamente.

Y unos minutos pasaron dentro de aquél departamento para que después se escuchasen risas muy fuertes y escandalosas dentro de él.

¿Qué es más efectivo que los mimos?, fácil, las cosquillas, claro que si, aunque después de hacer reír a Jungkook cómo un total desquiciado, Tae iba a darle sus merecidos mimos.

¿Qué es más efectivo que los mimos?, fácil, las cosquillas, claro que si, aunque después de hacer reír a Jungkook cómo un total desquiciado, Tae iba a darle sus merecidos mimos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
the president | kooktae♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora