24: Buenos días, suegra.

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Por la mañana de un caluroso domingo, en la casa de los Kent, Jon y Damián amanecían unidos en un abrazo. Los pies descalzos de Wayne, junto con las piernas desnudas de Kent, sobresalían de la manta que los unía. Jon se recostaba sobre el tórax de su novio, con la cabeza recargada sobre su corazón, escuchando su latir constante para darle paz durante toda la noche, todo esto mientras con sus brazos rodeaba la gran espalda del petirrojo. Wayne recostaba su cabeza sobre la almohada y con sus dos brazos cubría la delicada y suave espalda del kriptoniano.

El sol ya se asomaba por la ventana de los chicos y la luz iluminaba la habitación para mostrar el desastre que dejaron la noche anterior: ropa botada por todos lados; manchas blancas en pared, piso y puerta; y un ligero aroma a sudor desprendido una vez terminaron el acto.

Con mucho esfuerzo Jon despertó, trataba de enderezarse, pero le pesaba todo el cuerpo. Sin poder realizar gran esfuerzo, se movió hasta los labios de su amado para despertarlo de un beso. Aun estando dormido, Damián contestó al rose de labios, pues era algo que ya hacía por reflejo.

Con una voz suave, Jon comenzó.- "Dami... despier... *bozteso* ahhh... ta"

Damián se acomodó ligeramente en la almohada. Sin abrir los ojos, contestó.- "Estoy despierto"

"Ya en serio"

"Es en serio, estoy acostumbrado a solo dormir 3 horas por todos los años de patrullaje que tuve con Batman. Además, que me des tu energía vital solo hace que me sienta al cien"

"Hablando de eso *boztezo* ahhh... creo que quiero más..."

Damián notó el segundo bostezo y preocupado se enderezó.- "Jon, ¿Hace cuando tomaste tú último baño de sol en la cámara?".

Ahora fue Jon quien cerró los ojos mientras se volvía a acomodar en los abdominales marcados de su novio.- "Hmm... no sé..."

"Jon..."

"Creo que fue más hace una de una semana..."

"Es mucho tiempo. Tenemos que volver a la escuela"

"Tranquilo... *bostezo* ahh... todavía aguanto otro round" –decía el chico de ojos azules besando el ombligo del de ojos verdes. Al parecer Jon se ponía cachondo cada que estaba tan falto de energía solar, pero Damián no cometería el mismo error dos veces.

Wayne se levantó y dejó a Jon en la cama. Comenzó a tomar su ropa. Por alguna razón mágica que no tiene explicación, las prendas de Wayne estaban dispersas por toda la habitación, su pantalón por debajo de la cama, su camisa colgada en el sistema planetario del techo y sus calcetines colgados en el picaporte interno de la puerta, pero no veía su trusa...

"Jon, ¿viste dónde dejé mi...?" –preguntaba al chico adormilado quien en su mano olfateaba como una droga la prenda blanca de Robin.

"*snifffff* creo que me los quedaré..." –decía casi como si estuviese borracho. Kent estaba en un punto medio entre su estado comatoso y apenas despierto. Todavía tenía suficiente energía como para poderse levantarse y hacer su día normal, pero la falta de radiación solar en su cuerpo hacía que reaccionase como si se hubiera fumado medio kilo de hierba.

Damián se acercó para intentar arrebatar su ropa interior.- "Vamos, Jon. No podemos jugar ahora, tenemos que volver a la escuela" –pero Jon escondió la trusa al darse media vuelta.

"No quiero ir a la escuela, mamá" –contestaba como si se tratase de un niño, de espaldas y mostrando su trasero de bebé hacia Damián.

Por lo regular, Wayne le habría lanzado un balde de agua fría para despertarlo de golpe, pero se sentía tan bien internamente por haber tenido una noche excelente que decidió ser más considerado y tratarlo como si fuese un pequeño de jardín de niños.

DC: SuperSons. Escuela de héroes adolescentes A-HEROESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora