Capítulo 7

1.8K 100 6
                                    

Mi cabeza ha sido un lio todo el puto día.

No paro de pensar en cosas no muy alegres, y mi "novio" no ayuda para nada en todo esto, solo me trae más problemas.

Es como si no entendiera que él no es el centro de mi vida, tengo más asuntos que su bienestar, o sus problemas.

Para más remate me he sentido observada todo el día, como si alguien me estuviese siguiendo.

Pero, imagínense que tanto miedo tuve cuando vi aquella camioneta del año, con vidrios polarizados detenida un par de metros delante de mí.

Mi corazón empezó a latir desenfrenadamente, como si supiese que algo me iba a pasar, al igual que mi respiración.

Supe que no era mi imaginación cuando de la nada 3 tipos bastante corpulentos bajaron del auto con rapidez y mucha agilidad.

Ellos se dirigían hacia mí, de eso ya no había duda.

Los 3 me miraban fijamente, no corrían, es como si sabían que yo no haría nada.

No pude correr, no pude gritar, no pude actuar, el miedo me había paralizado, estaba ahí, en mitad de la vereda, mirando como aquellos tipos venían hacia mí y estaban cada vez más cerca.

Mi mente solo pensaba en lo que estaba pasando, y creando escenarios trágicos sobre mi muerte, o sobre torturas que me van a destrozar.

Me van a secuestrar.

Me van a vender.

Me van a descuartizar.

Eso y mucho más corría por mi mente, en un remolino de ideas sangrientas.

Al igual que tenía una pregunta. ¿por qué yo entre todas las chicas? ¿será que saben quien es mi padre? ¿Será por asuntos de dinero? er

Y bueno, supongo que fui la presa más fácil en toda su carrera de secuestradores.

Entre los 3 me agarraron, recién ahí empecé a forcejear, traté de patear, rasguñar, morder, pero eran notablemente más fuertes que yo, y sabían lo que hacían.

Uno de ellos me agarró del cuello, dificultando la respiración, y no recuerdo mucho más, todo empezó a volverse oscuro, lo último que recuerdo es que me subieron a esa camioneta por la fuerza

Cuando desperté, mi cabeza daba vueltas sin cesar.

Todo se había vuelto negro de un minuto a otro, tenía muchas nauseas, y un agudo dolor de cabeza se presentaba en mí, como agujas clavandose en mi cerebro.

Trate de abrir mis ojos varias veces hasta que lo conseguí, pero de todas formas no logré ver mucho, una cinta cubre mis ojos, dejándome ver la nada misma.

Escuchaba el ruido del motor de un auto, al parecer íbamos hacia algún lado, y por alguna razón, no sentía pánico, o quizá solo un poco.

Todo se sentía tan cotidiano, como si ya lo hubiese vivido antes, exactamente como un deja vu

Pero al mismo tiempo, algo en mi interior me gritaba que estaba en riesgo, que tenía que salir de ahí rápidamente, que mi vida estaba a punto de dar un gran giro.

Sentía mi corazón latir con fuerza, probablemente era la adrenalina del momento, pero al contrario, mi respiración era lenta, quizá porque recién había despertado.

Quería hablar, quería gritar, pero las palabras no lograban formularse, ni siquiera un mínimo grito era capaz de salir de mí.

No podía asimilar lo que estaba pasando, en absoluto, estaba en completo shock

EfímeroWhere stories live. Discover now