67: Cuarenta días sin sexo

386 11 0
                                    

Pov: Lilian

—Lil no llores, tranquila — Penny trata de consolarme pero es peor. — Dem te dejo que Lil está llorando, ya sabes se pone sensible en su estado — corta la llamada para poder prestarme atención.

— ¿Por qué lloras Lilian? — Liv viene a mi bastante mal humorada.

—No me hables mal — ella rueda los ojos.

— Estás llorando por nada, ni siquiera paso algo grave, Danniel ya está grandecito, si no es padre ahora ya va a estar más para abuelo que otra cosa — me empiezo a reír mientras lloro sin poder evitarlo.

— No es eso igual, solo... — vuelvo a llorar porque me afecta demasiado.

— ¡Ay ya! Mañana me voy a casar, no puedo tener ojeras porque mi hermana que ya tiene 28 años no puede aceptar el hecho de estar embarazada — la miro mal, porque ese no es el problema.

— ESE NO ES EL PROBLEMA — grito enojada de su estúpida hipótesis.

— ¿Y CUÁL ES? — grita Liv más enojada.

— Que ya no podré tener sexo duro y además cuando nazca estaré 40 días sin sexo — me mira sería y estalla en una carcajada, que Penny sigue. — No es divertido — digo entre lágrimas.

— No puede ser — dice Liv llorando de la risa — Te juro que te amo, ¿Lo único que te preocupa es el sexo? — asiento aun derramando lágrimas.

— ¿Qué pensabas que soy tan básica para pensar que no le voy a gustar a Dan? — Resoplo — Dan está loco por mí, no importa así parezca un globo, seré un hermoso globo que él amará — Liv no deja de reírse.

— Sos única Lil, dios me hiciste la noche — y solo se ríe

— Y vos Penny defiéndeme — se empieza a reír.

— Lo siento Lil, es que de verdad te preocupas por nada, el sexo durante el embarazo es — pone los ojos en blanco — Genial, pero hay que ser de.li.ca.dos, a Dem le costaba, pero yo amaba que no me sacará las manos de encima — quiero llorar otra vez, porque ella no tiene idea lo poco civilizados que somos para el sexo Dan y yo.

— Penny ellos rompen la cama varias veces al año — dice Liv y Penny se ríe poniéndose roja.

— El secreto es comprar Somier, no se rompe, al menos no tan fácil — abro la boca incrédula y Liv igual.

Penny nos mira muy roja apretando los labios.

— Claroo fueron cuatro años de celibato, el chico necesitaba sacarse toda esas ganas, no pensé que Demiancito fuera tan salvaje — Liv me golpea y empiezo a reírme — Noo en realidad no pensé que a vos — señalo a Penny — Te gustara así, pero no por nada Demiancito esta tan desesperado por vos — se empieza a reír.

— Dem es único, ya no me avergüenza decirlo, él es muy bueno en lo hace — pego un grito de emoción.

— Que bien, pero igual que asco — lanza una carcajada ante mi comentario. — Entonces si voy a poder tener sexo — asiente y Liv rueda los ojos muy divertida de mi papelón.

— Ahora sí, vayamos a dormir — dice Penny bostezando.

— Yo pensé que abría alcohol — dice Liv.

— Yo tengo a Sieni, no puedo tomar alcohol, ella — Penny me señala — Está embarazada — Liv hace un puchero.

— Al menos mañana no tendré resaca, al menos hubiera invitado a Sam y Cali — me encojo de hombros porque la estoy odiando.

— Claro porque yo soy una insoportable y ya no me querés — hago seña de mi mano hablando — Claro anda con tu cuñada, traicionera, lo único que falta que también invites a Azul, pobre Sam, ahora la querés porque no me querés a mi — Liv abre los ojos y la boca, Penny se cubre la boca aguantando la risa y quisiera arrancarle su estúpido pelo de niña buena.

— Lil, estás súper sensible, yo nunca deje que te odiaba, no soy amiga de Azul, así que deja de inventar cosas, Azul solo es... solo — ruedo los ojos y no la miro. — Lilian — me encojo de hombros y no la mira — No seas pendeja y mírame, admití que no tenes razón — no la miro y siento el nudo en mi garganta.

— Liv, no deberías hablarle así, está sensible — miro a Penny y asiento con los ojos empañados.

Liv me mira y no puedo aguantar el llanto, ¿Qué mierda me pasa? Odió esto.

— Ay no Lil — Liv me abrazo y me siento una estúpida llorando por nada — No llores, Ey! Estoy nerviosa y no tendría que hablarte así, pobre mi sobrino, va a sufrir por mi culpa — me abraza y como una tonta lloro.

— Perdón, no quise decirte traicionera — Liv se ríe.

— No pasa nada, no llores más Lil — sorbo mis mocos y seco mis lágrimas.

— ¿Podemos comer algo? — pregunto ya más tranquila.

Liv y Penny estallan en una carcajada.

— Dios que lindo va a ser ver a Danniel lidiar con todo esto — comenta Liv y ahora que menciono a Dan, lo extraño.

Pero aunque lo vea, que mierda no poder hacer el amor como siempre.

— ¿Ahora dije algo malo? — Liv mira Penny.

— ¡Shhh! Seguro se acordó de Dan — asiento ante la afirmación de Penny.

— Voy a traer algo de comer pero por favor, deja de llorar — asiento llorosa.

No puedo parar, hace días que lloro por todo, tengo que irme al baño a veces a llorar, porque Dan va a pensar que estoy loca, pensé que sería hormonal, bueno lo es, pero no pensé que un embarazo.

Aunque era obvio si me tome unos meses de descanso de la píldora y algunas veces nos olvidamos de usar cordón, tampoco es que somos tontos, sabíamos que podía pasar, pero ya Dan no es un niño, yo mucho menos.

Si llegaba un bebé seríamos felices y sino, bueno luego veríamos.

Pero como para no embarazarme con lo rico que me lo hace este hombre cada que me agarra me deja al borde del agotamiento total.

Debería ir al médico a que me explique ¿Como a su edad tiene esa energía? Aunque 49 años no son nada en verdad, pero el problema lo tengo yo que ya casi no puedo seguirle el ritmo, mi cuerpo me pasa factura.

— ¡Lilian! — Miro a mi hermana algo confundida — Te estoy hablando ¿Vas a comer? — suspiro, porque creo que ya no tengo hambre.

La puerta suena y Penny se levanta a atender, Liv deja de prestarme atención y se va a la cocina.

— Lilian — miro a Dan que entra sin avisar ni saludar a la casa, raro; él es muy educado siempre. — ¡Por dios! ¿Qué estabas pensando? — se acerca a mí y me examina mientras toma mis mejillas, estoy sentada en el sillón con los pies sobre el mismo.

— Dan... yo... — me abraza y no entiendo nada.

— No llores mi amor, me asuste, vine muy preocupado, cuando Demián me lo dijo yo...

— ¿Demián? — pregunto enojada.

— No te preocupes, no me importa haberme enterado así, por dios Lil, estoy muy emocionado, yo... claramente nunca pensé que pasará, bueno ya lo hablamos, yo...

— Demián es un pelotudo, yo tenía que decírtelo en una sorpresa, es un tarado, seguro se tomó unas cervezas y el idiota suelta todo. — me separo de Dan enojada.

— Lil amor, no importa eso, ahora tenemos que pensar en que vamos a tener un bebé — lo miro y sus hermosos ojos verdes brillan muchísimo.

¡Dios Mío, vamos a tener un bebé!

— Te juro que no sé cómo explicar lo que siento, soy demasiado feliz, porque yo te amo demasiado, pero pensar que me harás papá, dios Lil, te amo muchísimo más y... te amo mucho preciosa — me da un beso y vuelve a abrazarme. — Vamos a casa Lil — asiento y no me importa dejar a mi hermana para irme sin más.

— ¡Chau! Felicidades Dan, mañana la boda es las 4 no vayan a llegar tarde y por favor no lo hagan tan duro porque quiero tener a mi sobrino o sobrina — Me empiezo a reír por el comentario de Liv.

Tiene razón, pero que ganas de celebrar con sexo muy rico y salvaje maldición.

¡Tendré que limitarme un poco!

¡Podría ser tu padre! 🔥(HISTORIA FINALIZADA) 🔥Where stories live. Discover now